Mi Tutor (SasukeXNaruto)

Alianza

El ambiente en aquel húmedo y caluroso sótano era aterrador.

—¡¿Donde demonios está Naruto?! —Apoyo el martillo sobre la rodilla del hombre inmovilizado.

Habían irrumpido en la casa de Choza, amarrandolo a una silla en su propio sótano.

—No serías capaz de lastimarme Sasuke. Siquiera pudiste hacer algo cuando entre a tu propia casa, ¿Que te hace pensar que ahora será diferente?

Sasuke sonrió de forma torcida y en ese instante un grave gritó le desgarro la garganta al hombre al momento en que su rodilla fue fracturada ante el golpe de un martillo sobre la misma.

—El siguiente será en tu pene si no dices lo que te pido.

—Te vas a arrepentir, maldito mocoso—lagrimas caían sobre su rostro, mientras su respiración se volvía entrecortado y el pulso imparcial, el dolor invadía cada celula de su cuerpo haciéndole imposible el tranquilizarse. —Yo no se nada.

Aquellos hombres que acompañaban a Sasuke mantenían sonrisas psicóticas en sus rostros.

—Si no sueltas lo que sabes ahora—Era la primera vez que veía aquel rostro en él... Era un verdadero demonio—. Romperé cada una de tus extremidades hasta el punto en el cual tu cuerpo no pueda soportar tanto dolor y  roce la inconsciencia, cuando eso pase te inyectare adrenalina obligando a tu cuerpo a llegar a limites de dolor que nunca antes has sentido y tendrás que ver cómo torturó a tu hijo, y luego a tu esposa hasta que sueltes lo que tú repugnante boca sabe.

—¡Eres despreciable! No metas a mí familia en esto... Ellos no tienen nada que ver, no son malos... Ten piedad—Exclamo sin dejar de lagrimear, desesperado sin poder hacer nada, notando como Sasuke acomodaba el martillo dispuesto a dar otro golpe.

—Tu no tuviste piedad cuando metiste a mí familia en esto ¿Por que yo debería tenerla? —Su voz era gélida, sin una pizca de sentimiento al igual que sus expresiones... Tan solo demostraban a un psicópata en potencia. —¿No responderás? Supongo que no te interesa perder las piernas. Quiero ver cómo tus huesos te rompen la carne tras cada golpe.

—¡Detente! —Choza parecía que sufriría un ataque cardíaco en cualquier momento.

—Dame una buena razón. Tu no paraste cuando Naruto te lo suplico. 

—T- te diré lo que se... —Respiraba agitado—S-suelta la masa por favor... Tu... Tu lo que sea... El está con Danzō Shimura... Yo en ningún momento quise volver a tenerlo... Siempre fue el quien me mandó a hacerlo..  No se que fue lo que te contó Naruto, pero, yo no era el verdadero obsesionado con él, era mí jefe y el siempre lo quiso de nuevo.

—No digas el nombre de Naruto con la boca tan llena de mierda que tienes. —Espeto con asco, escupiendo el rostro. —¿Donde demonios está?

—E-eso no lo se... Ellos sabrían que... Que tu vendrías a por mi, tal vez esta en su casa, no lo se, dije todo lo que sabía... Y y yo no volveré a a aparecer nun nunca más en tu vida. Lo juro.

Sasuke sonrió complacido.

—. Hiciste un buen trabajo pero.. —Dejo escapar una sonrisa al momento en que el martillo se alzó por sobre sus hombros y con toda la fuerza posible se estrelló sobre la entrepierna de Choza. Ignorando los gritos y alaridos, Sasuke espetó —No te quiero ver nunca jamás en mí vida.  —Sasuke pateo la silla a la cual estaba atada el cuerpo provocando gritos más agudos y llenos de dolor. —Vamonos.

..

Los guardias se removian inquietos ante la presencia de aquella mujer que luchaba por entrar a la residencia del azabache. La conocían y hasta donde sabían había causado demasiado daño en la vida del protegido de su jefe.
Las órdenes eran claras, nadie debía pasar en su ausencia y... Está no era una excepción

—¡Déjeme pasar por favor! So soy amiga de Sasuke el no tendrá problema en que entre. ¡Por favor! —Se aferraba a los barrotes de las rejas que dividían la casa con el espacio público.

—Se lo advierto señora, no puedo dejarla pasar y si intenta entrar por la fuerza tengo derecho a tomar acción y hacer lo que sea necesario para que no irrumpa propiedad privada.

—¡Es muy importante! ¡Es sobre Naruto! Por favor llamen a Sasuke al menos.  Cada segundo cuenta. Por favor llamen y dígale que se dónde está Naruto. —Ambos guardias se miraron confusos, debatiendo silenciosamente en un idioma que tal vez solo ellos conocían.

—Veremos si está dispuesto a escucharla.

Sasuke volvía a casa luego de aquel "interrogatorio" tenía la información que necesitaba, pero aún faltaba muchísimo más... Se sentía tan perdido, tan enojado con el mundo pero tan enojado consigo mismo... La sensación de vacío en el pecho provocaba que su mirada se encontrará vacia. No lo cuido lo suficiente... Se lo arrebataron nuevamente como si nada... Y el aún no podía recuperarlo.
Ya habían pasado cerca de 2 días desde la última vez que lo había visto... De tan solo pensar lo que podrían estarle haciendo en cada segundo que pasaba... Era insoportable.

En ese momento no le importaba la empresa, no le importaba nada más que su pequeño... Acababa de torturar un hombre como si de ir a comprar a la tienda se tratara y siquiera ponía atención a aquello.

El teléfono vibrando sobre su bolsillo delantero del pantalón lo distrajo de sus pensamientos. Fueron las palabras adecuadas en el momento perfecto.... Pero ¿Por que Kushina sabía dónde estaba Naruto? 

—Voy en camino —Su voz sonó áspera.

Tras bajar del auto diviso a la pelirroja llorando de manera desconsolada.
Tal vez si le importaba Naruto después de todo.

La invitó a pasar tratando de que se tranquilizara y le contara lo más rápido que pudiera lo que sabía, después de todo... El tiempo se escurría como agua entre dedos y eso significaba menos probabilidades de éxito.

Sentados sobre la mesa, el silencio reinaba cuando Kushina logro calmarse... Podía sentir la mirada penetrante de Sasuke en ella... Temía el como reaccionaria. Tenía mucho miedo.

—¿Y? No tengo todo el día, ¿Me vas a decir dónde está o era mentira? —Kushina mantenía la mirada sobre el suelo, casi como un perro inmovil por el miedo que la cohíbia.

—S Sasuke yo... —El silencio reinaba nuevamente.

—¡Dime ya! O les diré a los guardias que te saquen de aquí. — Si tan solo no estuviera segura de que era imposible, juraría que el azabache era capaz de matarte con tan solo mirarte.

Tragó saliva, sintiendo como todo el cuerpo le temblaba...

—Yo... yo sé dónde está.... Aquel día quería ver a Naruto y al llegar noto que está siendo arrastrado hacía una camioneta. Los persigo y termino en la dirección actual donde está... Y yo e investigado el terreno se por donde podríamos entrar sin ser tan llamativos.. Como podríamos sacar a Naruto de ahí... S se que tenemos nuestras diferencias pero, Naruto es prioridad ahora. —Sonrió complacida tras notar como el gesto en la cara de Sasuke se aliviaba.

Había estado a punto de joderla.

—¿Por donde empezamos entonces? —Declaro el azabache. 

......

Estamos cerca del final 👁️👄👁️❣️