Mi Tutor (SasukeXNaruto)

Confusión.

*Gracias por los comentarios y votos :3, me dan mucha felicidad  *

—¿Como se te ocurre querer tocarlo? Te dije claramente que limitaras el contacto y no lo obligaras a nada que no quisiera—La voz de Sasuke a través del teléfono seguía siendo igual de terrorífica por muy neutral que estuviera—Naruto es mi responsabilidad y si no estas dispuesto a seguir las ordenes que te mando,  no esta calificado para este trabajo. Lleva a Naruto a casa y ven a la oficina. 

—Si Señor —Murmuro antes de cortar he ir hacia la dirección donde el azulino se encontraba. 

Mientras, el ya nombrado trataba de evadir el contacto verbal con aquel muchacho de cabellos rojizos.

—Si.. Estoy bien, no fue nada. —esbozo una sonrisa antes de darle la espalda en un intento de terminar la conversación.

—Me llamo Sasori, ¿tu eres Naruto verdad? —El muchacho se le coloco nuevamente frente a el. 

—Si... ¿Porque me hablas? —Arrugo el entrecejo sin entender bien su actitud. 

—Perdón, siempre te veo salir de tus secciones... Nunca me atreví a hablarte, aparte de que ve ibas demasiado rápido —Rio nervioso—  Tan solo llamaste mi atención y quise hablarte... ¿Te molesta?

Naruto observo con detenimiento al muchacho, sin poder  evitar sentir desconfianza, no era nada personal con nadie, tan solo no podía evitarlo .

—No es mucho de mi agrado el hablar con las personas... Me incomoda, no es por ti claro esta —fijo su mirada en sus zapatos. 

Sasori sonrió enternecido  pero antes de que pudiera responder, Juugo entro en la escena.

—Hebi —susurro de modo que solo Naruto pudiera escucharlo

—Adiós, Sasori —Se despidió secamente del pelirrojo antes de seguir al uniformado. 

Sonrió viendo como el se iba, pensando en como podía hacer para caerle bien a Naruto. 

La trayectoria hasta la casa fue por sobre todo silenciosa, y la angustia se intensifico mas al ver que Sasuke no estaba ahí aun; Era algo sabido, pero aun así tenia patéticas esperanzas de que estuviera. Lo único que llego a reconfortarlo fueron las galletas de chocolate que le había preparado Shizune. ¿Cuando podría disculparse con el azabache?.

El uniformado por otro lado, llego a las oficinas. El Sr Sasuke se encontraba en una junta de empresas cuando Gaara llego hasta el avisándole que Naruto ya se encontraba a salvo, después de todo, el había dado permiso para interrumpir cualquier tipo de negocios si es que se trataba del rubio. El único problema de aquella junta fue que el jefe Akimichi se encontraba presente cuando el nombre del menor fue dicho en plena junta.

Pronto cruzaron miradas, el rostro reacio y lleno de rechazo fue algo difícil de entender para los demás socios de la junta, mientras, Akimichi se limito a sonreír de una forma "disimulada" por tal información. 

No era nada seguro, tan solo había escuchado el nombre "Naruto" en medio de la conversación, sin embargo ¿Cuantos Naruto's podía haber en una misma cuidad? Considerando que es un nombre poco común y el muchacho había escapado hace unos meses de sus garras... ¿Cual era la posibilidad de que fuera el mismo Naruto? El simple hecho de pensar en verlo nuevamente le daba una sensación indescriptible en el cuerpo.  

El tan solo pensar que aquel hombre estuvo profanando el cuerpo de su niño por un año... La impotencia de no poder hacer nada, de no poder golpearle el rostro, de no poder matarlo con sus propias manos... Todo por una empresa que hacia socios como ese hombre,... le daba repulsión he impotencia. 

En cuanto la reunión termino,  el jefe Akimichi se acerco al despacho del azabache. 

Jamás en la vida había tenido tantas ganas de golpear a alguien como las tenia ahora, sobre todo viendo la manera que se comportaba con el, creyéndose inocente de todo y su mejor amigo, de verdad era un tipo asqueroso y detestable. 

—¡Mi querido Sasuke! —Palmeo su hombro con cariño— Si mal no escuche... ¿Adoptaste a un niño?

Sasuke lo miro de reojo antes de darse la vuelta para hablar cara a cara.

—¿Acaso eso te importa? —Arqueo una ceja mientras se apoyaba levemente sobre el escritorio. Quería partirle el rostro. 

—¿Que si importa? ¡Por supuesto! Somos socios, deberías contarme. Tal vez podría conocer al niño y regalarle algo como cortesía.—Mantenía una sonrisa hipócrita en su rostro. 

—No me interesa involucrar mi familia en negocios. —apretó sus puños en contra el vidrio de la mesada hasta adoptar un color blanco en ellos. 

—¡Pero nosotros somos más que negociantes! ¡Deberíamos hacer una carne asada  así nuestros niños se conocen y afinamos relaciones. 

—Mi hijo no tiene ningún interés en conocerte a ti a ti o a tu hijo.  Siquiera tienes idea de que edad tiene como para querer formar una amistad. —Chōza Arqueo las cejas. 

 —Vamos Uchiha, todo el mundo supo de tu estrecha relación con los Namikaze's ¿A quien mas que a ti podrían haberle dejado al pequeño Naruto? Es obvio cual es su edad. —Soltó el vidrio para llevar sus manos hacia sus bolsillos, petulante y rabioso. 

—No hay nada más que hablar, Choza. —Opto por tomar su maletín e intentar irse, pero la mano de Akimichi aferrando su brazo lo detuvo. 

—No creo que quieras negarme algo, el 30% de tus ganancias son gracias a nuestra alianza.. ¿De verdad quieres perderlas? —hablo en un tono meloso y lleno de malicia. Sasuke se soltó de su agarré de forma brusca dirigiéndole una mirada llena de odio antes de caminar a paso rapido lejos de ahí. Lo tenia acorralado.

Azoto las puertas del auto causando un estruendo por el estacionamiento, Gaara lo observo con curiosidad, sin entender bien que le sucedía pero tampoco se animaría a preguntarle, con ese temperamento hasta podría despedirlo.

Mientras tanto, Naruto caía desplomado sobre su cama. Realmente tenia ganas de verlo y disculparse por su comportamiento... En un movimiento inconsciente, observo de reojo la mesita de luz dándose cuenta del sobre marrón sobre la superficie. Tras tomarlo y abrirlo pudo observar una gran cantidad de dinero con una nota de letra delicada que decía "Para Hikigaeru, tu desayuno estuvo bueno" Una sonrisa tonta se le dibujo en el rostro, aunque no aceptaría tanto dinero por un desayuno le pareció tierno. 

Sintió la voz de Shizune mencionando a Sasuke y casi como un rayo, Naruto salio disparatado hacia la planta baja a recibirlo. Estaba junto a Gaara lo cual le dio mala espina pero al fin de cuenta tan solo se fijo en el azabache. 

—¡Sasuke! Bienvenido —Sonrió animado—¿Podríamos habla...

—Naruto, ahora no es momento, hablaremos en la noche — Su voz salio fría, sin sentimientos. Siquiera miro sus ojos para decirlo, tan solo paso de largo hacia su despacho.

Sintió una puntad en su pecho, realmente aquella actitud le había dolido, después de todo... Era a la única persona que le hablaba con tanto entusiasmo, y el ser rechazado así... le hirió. 

Shizune lo miraba con pena, haciéndolo sentir el triple de mal. Como un cachorro vulnerable.

—Ven querido. No le hagas caso, seguro tuvo un mal día en el trabajo. Te haré chocolate caliente. —Tomo su hombro para dirigirlo hacia la cocina. 

¿Acaso estaba actuando así porque estaba enojado por su actitud? No entendía muy bien...