Catalina aún no sabía que se estaba metiendo a la boca del lobo, las cosas buenas comenzaban a empeorar, comenzando por la escuela.—| Catalina |—
Pasaron dos semanas y todo seguía como de costumbre, mis hermanos se habían distanciado un poco ya que Elena se había acostado con Damon.... larga historia.
Elijah y yo casa vez compartíamos más tiempo juntos, lo cual a Klaus no le gustaba para nada.
No perdía la esperanza de que algún día volviera Rebeka a casa, la extrañaba muchísimo, necesitaba tener una amiga propia ya que tenía que compartir a Lexie con mi hermano.
—Klaus tomó de la sangre de Elena mientras dormía, probablemente esté haciendo sus híbridos ahora mismo— Damon me informó molesto.
—No porque esté saliendo con el quiere decir que soy su cómplice— dije desenfadada.
La mirada de mis hermanos se posicionó sobre mí, ambos sabían que mis sentimientos hacia Klaus nublaban mi juicio, pero a decir verdad a mi me tenía sin cuidado lo que le pasara a Elena.
—Ve a ver a Klaus, con cualquier pretexto y ahí intentas ver cómo es que hace sus híbridos—
—Tengo que avisarle Stefan, es de mala educación llegar así como así—
—¿Desde cuando a Catalina Salvatore le importan los buenos modales?— Damon no pudo evitar soltar una carcajada.
—De acuerdo, pero solo por esta vez— bufé.
Se que no estaba del todo bien el ir a espiar a Klaus, pero realmente me interesaba lo que planeaba hacer con sus híbridos.
Así que tome mi bolso y salí de la casa, me dirigía hacia la nueva casa de Klaus, ya me había invitado a pasar antes así que podría entrar sin ningún problema.
Estacioné mi emblemático auto rosa en el portico de la mansión del híbrido y entre a la casa sin tocar, lo cual fue un error.
En el sillón de la sala estaba una manta que cubría algo parecido a un cuerpo, levante la manta lentamente y me quede perpleja al ver a Rebeka con una estaca en el pecho.
—Princesa... puedo explicarte— Klaus se acercó hacia mi.
—¿Tu la mataste?— pregunté seria.
—No es lo que parece, discutimos y se estaba entrometiendo en mis asuntos así que no me quedó otra opción— se justificó Klaus.
El híbrido caminó lentamente hacia mi con la intención de darme un abrazo. Me alejé de su lado y miré hacia el techo para no llorar.
—Supongo que Elijah te ayudó—
—Lo hicimos ambos, pero no te preocupes, en cuanto termine con mis híbridos la traeremos devuelta— dijo mientras tomaba mi mentón.
—Todo es sobre tus malditos híbridos— dije bastante molesta —¿Y que si yo me interpongo en tu plan? ¿También me vas a clavar una estaca?—
—Por favor Catalina, sabes que yo jamás te haría daño princesa— volvió a tomarme del mentón.
Klaus no me iba a dejar ir molesta, siempre que algo me molestaba el movía cielo, mar y tierra para hacerme feliz.
—Niklaus mataste a mi mejor amiga, mataste a tu propia hermana— dije con la voz cortada.
—No está muerta, solo esta... dormida—
Sentía como si nuestra "relación" fuera una mentira, si Klaus había sido capaz de clavarle una estaca a su hermana de que más sería capaz.
Rodé los ojos sin pensar y salí corriendo de la casa del híbrido, subí a mi auto y conducí lo más rápido que daba. En menos de 10 minutos ya tenía más de 30 llamadas perdidas de Klaus.
[...]
Continuaba en la carretera, le había dejado un mensaje a Damon diciéndole que estaría fuera de Mystic Falls este fin de semana.
No tenía ni idea de a donde ir, primero pensé en Nuevo Orleans, pero eso me traería demasiados recuerdos de mi pasado. Así que decidí ir a Nueva York, ahí abría muchas cosas en cuales distraerme.
Una figura se interpuso en mi camino, hizo que la parte trasera de mi auto se levantara violentamente. No pude maniobrar así que mi auto voló por los aires conmigo adentro.
Al salir de mi auto solo estaba esperando que no hubiera ningún espectador del accidente, no había forma humana de que saliera viva de tan aparatoso accidente.
—Lo lamento, pero no sabía cómo detenerte—
—¿Elijah que demonios haces aquí?—
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Cᴀᴛᴀʟɪɴᴀ | Klaus Mikaelson
Vampire-¿Qué pensarán Stefan y Damon si se enteran que me enamoré de su hermanita?-