FORMALIDAD

9.6K 666 129
                                    

-|Niklaus|-

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.







-|Niklaus|-

Bastaba con una sola sonrisa, un solo "te amo", un solo beso para alegrarme el día. Jamás me había sentido así y nunca antes me había preocupado tanto por el bienestar de una persona.

Si bien Catalina era independiente, inteligente y audaz, sabía que había cosas de las que yo la tenía que proteger. Como ese maldito cazador que seguía suelto en el pueblo, debía protegerla de sus problemas de ira y constantes peleas con sus hermanos.

Catalina me recordaba demasiado a mi mismo hace unos siglos. Su hambre de comerse el mundo, hacer lo que se le diera la gana y no recibir castigo alguno.

Esa misma belleza inmortal que la hacía un depredador peligroso la hacía una vampiresa vulnerable ante los ojos de los demás. Quien imaginaría que una chica que mide 1.60 sería tan peligrosa.

—¿Debería de hacerlo más formal?— le pregunté a Rebekah con algo de pena.

—¿A que te refieres?— pregunto extrañada ante mi pregunta.

—Hablo de Catalina, pienso que debería hacerlo más formal pero no se si es algo que ella quiera—

El rostro de mi hermana se iluminó de inmediato, sonrió levemente y me tomó del hombro con fuerza.

—¿Hablas de pedirle matrimonio?—

—Si Rebekah, hablo de eso, solo que no se si es algo que ella deseé—

—Su sueño siempre ha sido casarse vestida de negro y que el novio se vista de blanco— la sonrisa de mi hermana se hizo aún más grande.

—Es bueno escuchar eso, tengo que comprar el anillo y dárselo esta noche— dije algo entusiasmado.

—Espera ¿no piensas dárselo aquí o si?— preguntó Rebekah con un tono mandón.

Creo que no había pensado en muchos detalles, si bien había sido una decisión apresurada eso no era lo importante, lo que en verdad me importaba era no ser muy egoísta al pedirle que pasara el resto de la eternidad conmigo.

—Debe de ser un lugar especial, como Nueva Orleans por ejemplo—

Si bien la sugerencia de Rebekah era una buena opción, aún debía de visitar Nueva Orleans yo solo para ver si era un lugar adecuado para mi Catalina.

Desde hacía unos siglos que Marcel había hecho de las suyas en ese lugar y lo había convertido en un lugar de mala muerte para cualquiera que no le agradara.

Gracias al cielo que Catalina era un vampiro, si fuera un licántropo o una bruja estoy segura que no correría con muy buena suerte.

—Marcel sigue ahí, no se si sea...—

—Marcel no tendrá de otra más que aceptar a la futura esposa del hombre que lo crió— dijo Rebekah muy optimista.

Asentí con la cabeza y no pude evitar sonreír al imaginarme la cara que pondría al verme de rodillas y con el anillo en la mano.

Mi sonrisa se borro de inmediato al recordar un pequeño detalle.

—La escuela...— dije preocupado mientras tomaba las llaves de mi auto.

—¿Escuela? Tu ni terminaste la universidad—

—Quede en pasar por Catalina después de la escuela, me va a matar cuando me vea, ya voy 10 minutos tarde—

Salí disparado hacia mi auto y arranqué por el camino que llevaba a la preparatoria.

-|Catalina|-

—Klaus se va a molestar cuando se entere que estoy de nuevo en detención— le dije a Jeremy en voz baja.

—No debe de molestarse contigo, no fue tu culpa— dijo Jeremy disgustado.

—No se va a enfadar conmigo, si no con el maestro, ya es la tercera vez en el mes—

Jeremy no aguanto la risa y se le salió una pequeña carcajada que llamó la atención de todos en la sala de castigo.

—¿Por que no usas la hipnosis?— me preguntó Jeremy en voz baja.

—Todos los maestros de aquí toman verbena—

Antes que Jeremy pudiera responderme la puerta se abrió con un gran estruendo. De inmediato supe de quién se trataba.

Escuché su caminata enfurecida a lo largo del pasillo, parecía que hoy no había tenido un buen día lo cual me preocupó un poco.

—Maestro me llevaré a Catalina Salvatore, tiene una cita importante— Klaus se dirigió hacia el maestro.

—Necesita autorización de..—

Antes que el profesor terminara corrí hasta donde estaba Klaus, lo tome del brazo y salimos corriendo juntos por el largo pasillo.

Estaba harta de la escuela y sus estúpidas reglas, yo solo quería divertirme con mi novio. Wow eso sonaba muy lindo... mi novio, aún no podía creer que en realidad estábamos haciendo esto.

Cᴀᴛᴀʟɪɴᴀ | Klaus MikaelsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora