Desde que Draco Malfoy tiene uso de razón es un licántropo, Greyback se había encargado de ello cuando apenas era un chiquillo. Las veces en las cuales no se encontraba en su hogar solía pasar las frías y húmedas noches de luna llena completamente s...
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⊹ El vals de los enamorados.✧*｡
Harry fue el primero en despertar y luego de ponerse los lentes pensó que sus ojos jamás habían visto algo tan hermoso como lo que actualmente estaba presenciando, tenía el placer de ver a Draco completamente dormido, con el cabello desordenado, aquella imagen que se había generado difícilmente saldría de su cabeza por el resto del día.
-- Si alguien más despertara a tu lado y estuvieras así de concentrado en quién sabe qué pensaría que estás viendo cuál almohada es más factible para asesinarlo. -- Harry salió de su trance al escuchar la voz matutina de Draco.
-- Buenos días. -- Saludó mientras acariciaba juguetonamente la cabellera del otro.
-- Buenos días, ¿Cómo te sientes? -- Comenzó a acomodarse en la cama y dio un largo bostezo.
--Mucho mejor. -- Sonrió sutilmente. -- Gracias por ya sabes, vine a caer a tu habitación sin más y me dejaste quedarme.
-- No tienes nada que agradecer y me alegro que estés mejor.
-- ¿Nos queda mucho tiempo para el desayuno?
-- Mmh, una hora. -- La cara de Harry se iluminó.
-- Podríamos dormir un poco más. -- Dijo mientras se metía entre las sábanas y cerraba los ojos con los lentes aún puestos.
-- Suena tentador. -- Respondió mientras le sacaba con sumo cuidado los redondos lentes y los depositaba en su mesita. Luego con sumo cuidado se acomodó junto a Harry quien casi de inmediato tomó lugar en su pecho. -- Si llegamos tarde al desayuno por tu culpa y tu flojera- nada ya estás dormido.
Draco comenzó a relajarse otra vez, así que cerró los ojos por un momento, nada malo podía pasar por una pacífica siesta.
Atrasados, completamente atrasados, se despertaron con los gritos de Pansy desde fuera de la habitación, rápidamente se cambiaron y se pusieron su uniforme, Harry fue el primero en salir con la excusa de que tenía que buscar sus libros en la sala común de Gryffindor, Draco solo asintió mientras se ponía los zapatos y la corbata que tenía en sobre su cama, grave fue el error al no ver los colores que ambos traían colgando del cuello.
El moreno se encontró minutos después de salir de las mazmorras con Hermione y Ron, quienes quedaron en silencio al verlo.
-- ¿Qué? -- Preguntó confundido.
-- Harry, tu corbata. -- Señaló la chica mientras reía junto a el pelirrojo.
El mencionado tomó entre sus manos la punta de su corbata y vio el notorio verde que había en lugar del rojo de su casa, jadeó frustrado mientras miraba a sus amigos.
-- Ven, quizás Malfoy ya está en el gran comedor. -- Hermione tomó su mano y lo guio rápidamente, sentía la presente mirada de todos, algunos Ravenclaw se reían de él y otros Slytherin lo miraban con cierto asco.
