Después de Ti ✔️

Capitulo 13

Damián

Miro el teléfono en mi mano por más minutos de los que quiero, pero antes de marcar aquel numero decido que solo fue el hecho de que esa chica nombrara a una persona con el mismo nombre. Si creo que el mundo es pequeño, pero nunca tanto la verdad.

Resignado me levanto de la silla donde tengo que esperar a la década, ya que el culpable de que mi teléfono no sonara fui yo mismo, se me fue imposible pegar un ojo anoche y el poner una alarma no estuvo en mi lista de pensamientos.

El portazo que escuche en la mañana me hizo pegar un golpe y darme cuenta que me quede mas que dormido para la que se supone que era mi primera clase, trate de llamar a Stefan pero como no me contesto supuse que debía de ir mas que tarde.

—Tu debes de ser Damián

Levanto la vista y me encuentro con una señorita muy guapa, tiene su pelo rubio amarrado a una linda coleta, un maquillaje nada provocativo dándole esa sutileza de belleza.

—Si —me pongo de pie y extiendo mi mano — Disculpe por molestarla, pero no me voy a excusar. No coloque mi alarma para las clases y a mi defensa estoy aquí de igual modo porque no me mandaron a mi correo el mapa de la universidad y mis clases, solo cuento con la primera de hoy.

—Oh... dame un segundo.

Se acerca a la secretaria de decirle algo y antes de siquiera que pasara un leve segundo mi teléfono vibra en mi pantalón.

Mely: ¿Cariño? Es que ahora ya te has olvidado de mí, de verdad que te extraño Dami.

Hago una mueca de desagrado al ver ese mote de cariño que me dice, le doy a ignorar e irse directo a los archivos.

—Listo — la decana se me acerca con una hoja en la mano — No es fácil guiarse la verdad, pero en estos puntos que están marcados aquí sabrás que camino tomar — suelta una risa, pero yo solo la miro — Bien, además me gusta que hayas venido, porque me estaba diciendo mi secretaria es que tu beca fue rechazada por ti mismo.

Así es y fue una de las cosas mas duras que me toco hacer, el tiempo que estuve en nueva York fue el peor, en donde tomé decisiones las cuales me llevaron a hacer esta maldita estupidez de no poder ocupar una de mis becas, la razón es fácil...

Me estoy escapando.

—Si, lo que pasa es que... ya sabe problemas con la familia, entonces también soy consciente que si repruebo algún ramo me afectaría mucho — ella me mira atenta y mi cabeza solo trata de crear algo creíble — Así que por eso decidí estudiar así por ahora, soy una persona que me afectan mucho los problemas familiares.

Es casi verdad, porque solo debo decir que me preocupa lo que a mi madre pueda llegar a pasarle, porque de que me sirve calentarme la cabeza con los verdaderos problemas de mi familia. Porque de ser así tendría que estar en terapia.

—Oh entiendo perfectamente Damián, pero también sabes que tenemos apoyo para los estudiantes con buen rendimiento — asiento y ella me regala una sonrisa — Infórmate de eso con tus compañeros y luego me comentas que decides, ahora ve a clases.

Sin decir más, se da media vuelta y yo decido que mejor me voy a mis clases. Salgo del edificio de administración y miro el mapa, no entiendo ni una mierda, pero me iré guiando por los nombres de los pasillos.

—Hola

Detengo mis pasos mirando para todos lados, se que alguien me saludo tampoco es que este tan loco, cuando no veo a nadie decido seguir mi camino, viendo esto dice que en unos cuarenta minutos tengo otra clase.