Stay || Bradley Simpson

29. (Tris)

Después de que Connor revolviese el salón para encontrar sus pantalones, nos pusimos rumbo a casa de Brad.

Si el enano ese se creía que podría escaparse de esto así como así lo llevaba claro, a mi hermana nadie la dejaba con una maldita carta, a los Evans se nos dicen las cosas a la cara.

Me coloqué mis gafas de sol y saqué otras del bolsillo para Connor, el que me miró confuso.

-¿Siempre llevas gafas de sol encima o qué?

-Cállate y póntelas.

Llamé a la puerta y poco después apareció Brad tras ella. Tenía el pelo revuelto y un poco más largo de lo normal se podría decir que las ojeras le llegaban hasta el suelo y hasta se había dejado bigote. La verdad es que daba un poco de pena.

-Vaya, estás horrible -dije atravesando la puerta.

-Como en tu casa, tranquilo -dijo tirándose en el sofá y dándole un sorbo a una de las muchas latas de cerveza que tenía en la mesa. -¿Qué queréis?

Estaba dispuesto a hablar cuando un enfurecido Connor se adelantó.

-¿Que qué queremos? ¿Tu eres tonto o te caíste de la cuna cuando eras un bebé?

-Wow, eso sí que no me lo esperaba -dije sorprendido.

-¿Así que te vas? Eres un cobarde, eso es lo que eres. -Brad lo miraba sin darle mucha importancia mientras seguía bebiendo su cerveza, lo que pareció enfadar aún más a Connor. -Encima de ser un cobarde eres un amigo de mierda.

-¿Has venido aquí para algo más que insultarme?

De la nada vi un zapato volando a la cara de Brad, la verdad esto se estaba poniendo entretenido.

-¿Te has vuelvo loco? -soltó levantándose por fin del sofá.

-Te juro que te daría una paliza ahora mismo pero la verdad es que ya das bastante pena.

-Pues hazlo.

Cuando pude darme cuenta ya estaban los dos rodando por el suelo pegándose puñetazos, definitivamente el único con cordura aquí era yo.

Suspiré y me metí entre ellos para parar la pelea, jamás me hubiese imaginado a estos dos tan cabreados.

-A ver, ¿queréis parar de una vez? Parecéis cavernícolas.

Los observé y no pude evitar reírme al ver a ambos con un ojo morado y todo el pelo revuelto, a lo que recibí una miradita amenazadora de los dos.

Cuando por fin se calmaron me senté en el sillón y cogí una de las cervezas que había sin abrir en la mesa.

-Vamos a hacer esto como los niños pequeños, ¿vale? - hice una pausa para dar un trago de la lata y volví a dejarla en su sitio. -Connor, vas a decirle a Bradley por qué estás enfadado y él tendrá que escucharte, luego él tendrá que responderte y tendrás que escucharle tú. ¿Está bien?

Ambos asintieron, así que me acomodé en el sofá con mi cerveza esperando que no intentasen matarse de nuevo.

-Estoy enfadado porque Bradley es un idiota -soltó Connor cruzándose de brazos.

-Connor -dije con un tono amenazador, lo que pareció funcionar.

-Está bien. -suspiró - Lo que pasa es que en todo el verano no he sabido nada de él y ahora tengo que enterarme de que se va por una carta que ni si quiera es para mi, creo que es un buen motivo.

-Lo es -añadí - ¿qué tienes que decir sobre eso Brad?

-La verdad es que no tengo excusa -dijo tras unos minutos en silencio - sabía que no me dejarías tomar esa decisión, no ha estado bien y lo siento, pero tengo que irme.

-¿Tienes que irte? Te vas porque te da la gana, me dejas a mi que soy tu mejor amigo y dejas a Kelly, ¿sabes cómo le sentará esto Bradley?

-No creo que le importe, ella se fue primero.

-Maldito orgulloso de mierda, es que no te enteras de nada -dijo Connor estresado. -¿Es que no entiendes que te quiere? Cada vez que llama pregunta por ti, Brad, por ti, aunque no tenga nada que decirle lo sigue haciendo. Se fue porque necesitaba un tiempo para aclarar sus dudas y es más que obvio que no había mucho que aclarar solo que eres demasiado tonto para verlo. Estoy muy cabreado contigo porque cuando se entere de que te has ido y probablemente no vuelva a verte se le caerá el mundo encima, se le va a romper el corazón y yo estaré ahí día tras día intentando ayudarla, porque yo nunca me voy a ir de su lado. No sabes valorarla pero yo lo hago Bradley y te acabarás arrepintiendo si te vas porque nunca encontrarás a nadie como ella.

Me quedé boquiabierto tras el discurso que había soltado Connor, el que me quitó la cerveza de la mano y terminó de beberla en un solo trago, nunca lo había visto así.

Brad seguía en silencio, ya no tenía esa expresión de ''todo me importa una mierda'', más bien parecía que empezaba a sentirse culpable, pero era demasiado orgulloso para decir algo al respecto.

-No creo que consigamos nada aquí, vámonos. -Dije harto de la situación.

-¿Es que no vas a decir nada? -dijo Connor mirando a Brad. -¿Tu la quieres?

-Por supuesto que la quiero Connor.

-Iremos a buscarla -solté sin darle más vueltas al asunto. Ambos me miraron confusos. -Soy su hermano, a ver si os pensáis que sois los únicos que la echáis de menos. ¿Te vienes o no? -Esperé una respuesta y lo único que obtuve fue silencio. -Esto es ridículo.

Me dirigí a la puerta con Connor tras de mi, parecía decepcionado y no voy a mentir, una parte de mi también lo estaba.

-Todavía tengo la esperanza de que hagas las cosas bien -dijo Connor antes de salir de allí.