Ese beso en la mejilla y esa despedida después de un día tan especial me habían dejado como en las nubes. Hacía mucho que nadie hacía algo así de lindo, dedicado solamente a mí. Aunque pensándolo bien, todo fue para que yo accediera al favor que me iba a pedir pero...en el fondo noté algo, una chispa, una vibra, algo entre nosotros.
Al día siguiente del paseo con Piero fui a trabajar, pero sorprendentemente Vittoria me dijo que podía tomarme toda la semana libre para poder dedicarme por entero a darle el toque final a mis cuadros para la expo. Así que regresé a casa y me puse a terminar todo lo que tenía pendiente, cuando a mediados de la tarde comenzó a vibrar mi celular. Me fijé en la pantalla y la llamada venía de un número que no tenía registrado, deslicé el dedo y contesté:
–Buongiorno...
–Hola...soy Gianluca– se presentó. Levanté el labio superior en una mueca pero dejé que continuara– Te envié una ubicación en un mensaje, chécalo, te espero allí en treinta minutos– ni siquiera me dio chance para decir SÍ o NO, solo colgó sin más.
Me quité el delantal blanco que tenía puesto para evitar manchas de pintura en la ropa y quedé con lo que tenía debajo: unos pantalones negros de hilo, una blusa corta blanca de una sola manga y unas sandalias también negras. Me recogí el pelo en una coleta y fui a la dirección que me había dicho Gianluca. Me coloqué unos audífonos y me dispuse a escuchar música por el camino. La primera canción fue "Quédate lejos" de Ha - Ash, le siguió "Hawai" de Maluma y después ... Dimmi che mai / che non mi lasciarei mai/ dimmi che sei respiro dei giorni miei d'amore / Dimmi che stai / che non mi sveglerei mai / dimmi che sei / che sei mi unico GRANDE AMORE... Me puse en movimento.
No me hacía ni pizca de gracia que ese estúpido interrumpiera mi rutina y que con ese tono autoritario me citara en cualquier lugar pero tenía que comportarme dulcemente como lo haría "una novia amorosa". Dejando todo listo en casa, salí y tomé un bus porque quedaba un poco lejos de mi hogar.
Cuando llegué a ese sitio había una mansión gigantesca, parecía un palacio de cristal. Todo era de cristales resplandecientes y había un patio enorme que cercaba todo el espacio que circundaba semejante casa. A esto le llamo yo hogar dulce hogar. En la verja habían un hombre mayor vestido de custodio y a su lado otro, con un uniforme de guardaespaldas y unas gafas de sol oscuras, su expresión corporal era de una persona que se encuentra siempre a la defensiva. Parecía una muralla infranqueable con las manos colocadas al frente en un puño.
–Buongirno, signorina, il signore le aspetta– abrió la verja, permitiéndome el paso.
–Grazie mille– caminé por un sendero de piedras que conducía a la entrada de la casa.
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¿Y tú quién eres?[COMPLETO✓]
FanfictionLa vida de Malena cambió luego de conocer a Piero Barone. Apasionada, algo aburrida, amante del arte y de la música de sus raíces (latinas), Malena desconocía completamente el universo de la música de concierto y por tanto, a sus mayores y más jóve...