Capítulo 7

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En todo el día no hizo más estar inquieto, sin saber que ponerse para recibir a Jungkook, nunca se había puesto tan nervioso y ansioso en que llegara la noche.

Se había bañado por un largo rato y puesto unas ropas comodas para no exagerar ante la visita. Quería verse bien pero sin ser notable. Ni siquiera sabía bien para que iba Jungkook, pero solo por las dudas.

La noche se había hecho presente, alertandole que en cualquier momento llegaría el castaño y quería asegurarse de que todo estaba en orden en su casa. El sonido del timbre lo hizo saltar en su lugar, quería golpearse con algo ante sus nervios innecesarios.

Abrió la puerta viendo del otro lado a Jungkook, soltó un suspiro casi enamoradizo al ver lo bien que se veía el castaño. Notó que este llevaba una pequeña bolsa en sus manos.

— Pasa— Le dijo haciendose a un lado para luego cerrar la puerta una vez adentro.

— Todo bien Jiminie?— Preguntó Jungkook, dandose paso a la sala, dejando la pequeña bolsa en la mesa ratona.

— S-si.. A que viniste?— Quise saber al notar extraño a Jungkook y más luego de la llamada de anoche.

— No puedo venir a ver a mi mejor amigo?— Inquirió levantando una ceja y cruzandose de brazos viendose más intimante. Jimin bajó la mirada sonrojado.

— S-si claro.. Que es eso?— Señaló la bolsa tratando de cambiar de tema.

— Ah, conseguí el videojuego que queriamos probar la otra vez, recuerdas?— Dijo mientras sacaba el juego de la bolsa. Jimin suspiró casi con un puchero, solo era para jugar videojuegos. — Enciende la play—

Hizo caso mientras se dirigia al equipo y encendía todo.
Se cuestionó la manera en que estaban actuando, si bien le daba un poco de vergüenza tocar el tema de que habían tenido sexo, al menos quería saber que pasaba por la mente de Jungkook.

Un par de horas pasaron amenas mientras se olvidaban un poco de lo que tenían en mente y jugaban varias partidas del videojuego que de vez en cuando lanzaban maldiciones ante lo difícil que era.

— Estas siendo un maldito tramposo Jeon Jungkook!— Se quejó tiernamente mientras intentaba ganar la partida.

— No soy ningún tramposo, estas jugando mal— Se excusó frunciendo en ceño mientras tecleaba en el mando y mordía su labio desesperado por ganar el juego.

— No estoy jugando mal, estabas haciendo trampa— Dijo empujando un poco el cuerpo de Jungkook y este de igual manera le devolvió.

— Si esa es tu excusa para no admitir que estas jugando mal, entonces está bien!— Se quejó al ver que en realidad si estaba haciendo unas maniobras trampa en el juego pero tampoco lo iba a admitir.

— Como si fueras bueno.. Idiota— Dijo susurrando lo último sin ser escuchado, se estaba molestando aunque disfrutaba estar de esa manera con Jungkook, al menos así.

— Soy bueno en todo, que te puedo decir— Dijo con una sonrisa de lado de maners ególatra.

— Ah si? No lo creo— Contradijo para luego ver que ambos perdieron la partida.

— Pero hay algo en lo que soy mejor— Dijo haciendo la voz más grave dejando el mando en la mesa, para luego mirar fijamente a Jimin.

— E-en que?— Preguntó sin animarse a mirar s Jungkook y más sabiendo que este lo veía así.

— Umm.. Realmente quieres saber?— Se acercó hasta estar cerca del oido de Jimin y así susurrar sensualmente. — Porque puedo demostrartelo con acciones..—

Por la noche [Kookmin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora