Blanco & Negro

CAPITULO 30. Un intruso.

Habia estado todo el dia con Oscar, habíamos platicado sobre infinidad de cosas, nos habíamos reido y divertido por horas, lo había extrañado mucho.

Eran las 7:00 pm y yo ya estaba lista, los papas de Estela me habían llamado esa mañana para invitarme a su casa donde habían organizado una cena por el cumpleaños de la señora, me había puesto el mismo vestido que mi amiga me había comprado tiempo atrás y las zapatillas, el collar y preciosos aretes que me había regalado Victoria, deje mi cabello suelto y solo me había maquillado un poco. Le había pedido a Oscar que me acompañara esta noche para no ir sola pero menciono que tenia otras cosas que hacer.

Las demás personas de esta casa no habían llegado a pesar de la hora que era y todo estaba muy tranquilo.

La casa estaba en silencio completamente, no se escuchaba ni un solo ruido y todo estaba oscuro, solo la luz del comedor estaba encendida, ya era tarde y tenia que ir a buscar un taxi que me llevara hasta allá, tome mis cosas y me dirigí directamente a la puerta, cuando de repente.

¡Pum!

Un ruido fuerte me hizo brincar del susto.

Comencé a imaginarme mil cosas.

¿Y si se había metido alguien a robar? ¿Qué estaba pasando?.

¡Traz!

Otro ruido.

Mi corazón comenzó a latir con rapidez, le puse seguro a la puerta y me aleje enseguida de ella , me quede mirando hacia esta esperando ver algo o a alguien pero fue inútil, la casa volvió a estar en completo silencio por unos segundos hasta que..

¡Pum!

Esta vez no era la puerta era...

El segundo piso.

Mis manos estaban sudadas y no sabia que hacer, quería salir corriendo de ahí, pero ¿y si era en alguna habitación? Tenia tiempo queriendo saber que ocultaba Victoria ahí y nunca me había atrevido, ella decía que no había nada pero entonces, ¿Por qué tanto misterio? ¿Quién o que estaba detrás de esa puerta? ¿será que el ruido de hace unos momento venia de ese lugar?

No vayas Nicole. No vayas.

Mis manos temblaban pensando si alejarme o arriesgarme y fue ahí cuando me arme de valor, corri a la cocina por un cuchillo largo y comencé a subir las escaleras lentamente.

Que no sea nadie por favor.

Mi corazón latia tan rápidamente que sentía que se me saldría del pecho, no estaba asustada, estaba aterrada.

¿Qué acaso nadie mas lo había escuchado? ¿O donde estaba Oscar? ¿Y si era el?.

Subia las escaleras con el cuchillo por delante de mi, sin siquiera saber que haría si me encontraba con alguien, no seria capaz de enterrarle un cuchillo en el pecho a una persona ¿o si?, al llegar al ultimo escalon me percate que todas las habitaciones estaban cerradas, casi no había claridad y solo me alumbraba el camino la luz de la luna que se asomaba por un ventanal , deseaba con todas mis fuerzas que Oscar llegara a mi rescate o cualquier otra persona pero al parecer estaba solo yo.

No veía a nadie, y eso no sabia si me asustaba mas o me tranquilizaba, tarde algunos segundos ahí parada en medio de la oscuridad cuando me percate de otro ruido, sin embargo, este era casi inaudible, era como si algo se estuviera arrastrando, segui el ruido en silencio, intentaba que no se escucharan mis pasos para poder seguir escuchando.

¿Qué mierda es esto?.

Pegue mi oído a la puerta de una de las habitaciones por donde veia a victoria entrar y salir silenciosamente, todo estaba tan silencioso que solo podia escuchar mi respiración agitada.

1...2...3...4..5...

Pasaban los segundos y yo no me separaba de ahí esperando alguna otra prueba de que no me estaba volviendo loca.

Comence a escuchar unos pasos dentro de la habitación, había alguien ahí pero ¿Quién? Si todos se habían ido y solo me había quedado yo en casa.

Estaba muy confundida, no podia comprender que es lo que estaba pasando , no sabia como alguien había llegado a esa habitación y yo no había escuchado la puerta abrirse, quizás Victoria había llegado y no la escuche pero si abria la puerta y me veia ahí me iba a matar.

-Shhh .- Alguien dijo dentro de la habitación de una manera casi inaudible.

Sin esperar mas corri al cuarto de Victoria donde me puse a buscar cajón por cajón esperando encontrar las llaves, estaba llena de adrenalina, no pensaba con claridad.

Mierda no están.

Busque por todos lados, debajo de la cama, del colchón, en sus cajones, sus alajeros y cualquier mueble que me pudiera encontrar, cuando movi una de las lámparas de su buro un portarretrato con marco metalizado cayó al piso haciendo un fuerte ruido.

¡Que estúpida Nicole!

Me agache para recogerlo de inmediato y cuando me levante del suelo unas grandes y fuertes manos me tocaron los hombros por atrás , sentí que me iba a desmayar del susto, abri la boca para gritar pero esas mismas manos me sostuvieron con fuerza la boca ahogando mis gritos.

Me movia con desesperación y fuerza intentando safarme, muerta del miedo.

La persona que estaba detrás de mi me tiro al piso junto con ella como ¿escondiéndome?.

-Shh.- Escuche que me susurro al oído.

Gire la cabeza rápidamente para ver quien era esa persona.

Adan me sostenia aun con fuerza cubriéndome la boca para que no hiciera ningún ruido, mi pecho subia y bajaba rápidamente sin entender que estaba pasando.

-Te voy a soltar.- Susurro.- No te muevas ni hagas ruido, hay alguien aq...

La puerta de una de las habitaciones se abrió y los dos nos agachamos enseguida, Adan no dejaba de sostenerme con fuerza de forma protectora, nos metimos debajo de la cama intentando no hacer ningún ruido, lo miraba aterrada y el me miraba de la misma manera a mi, los dos no entendíamos absolutamente nada.

Se escucharon los pasos de la persona que estaba saliendo de la habitación.

¿Un ladron?

¿Victoria?

Me asome solo un poco aun debajo de la cama para poder ver mejor y me quede helada.

Oscar.

Senti tantas nauseas que queria vomitar ahí mismo.

¿Qué estaba pasando? El sabia de toda la curiosidad que yo sentía por esas habitación y nunca me había mencionado nada, jamas le había preguntado si el sabia algo pero aun asi pensaba que debía decírmelo, no sabia que el si tenia acceso a ellas, ¿Por qué tanto misterio? ¿ que había dentro? Sin duda se lo preguntaría pero, ¿y si no me queria decir? No sabia que pensar, tenia muchas dudas en mi cabeza, estaba mareada y solo queria salir de ahí.

Mire a Adan y tenia la misma cara que yo hace un momento, también el lo había visto y se había sorprendido, entonces me di cuenta que Adan no mentia cuando decía que el no tenia idea sobre esas habitaciones y que había dentro, ya se lo había preguntado una vez y no le crei hasta ahora que me daba cuenta que era verdad lo que me había dicho.

Gire mi vista solo un poco por encima del cuerpo de Adan y las vi.

Las llaves estaban escondidas entre el colchón y la base de la cama, me sentí victoriosa pero ahora no sabia si las queria tener o no.

-¿Qué chingados fue todo eso?.- Susurro Adan a mi lado, aun con la boca entre abierta.

-¿Qué hora es?.- Susurre mirándolo.

-¿Qué?.- Me miro confundido sin entender nada.

Tome su muñeca y mire su costoso reloj.

7:37 pm .

Diablos, la cena.

-Ponteun traje.- Susurre.