Cuidé de tu vida más que la mía,
porque sin la tuya la mía no sería vida.
¿Que por qué te había soltado?
Vida mía, tu cortaste nuestros hilos
y el tejido de cada sentimiento.
Si me dices cómo olvidarte
te diré cómo es que te amé tanto.
Quería que te aferraras a mí
no a tu pasado
ni a los límites de tus bordes.
No entendía como pude echarte de menos
sí siempre me restaste latidos.
Dejé mi vida a la suerte
por seguir la suerte que me depararía tu caos,
no podía esperar oro de ruinas, pero lo hice.
¿Qué hacía si necesitaba verte?
Te necesitaba hasta para respirar.
Quería volverme y ver tus miradas,
regresar y darle vida a los lugares que matamos.
Sólo me faltabas tú.
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A ratos, tú.
PoesíaNo es que se me hayan cruzado los cables, es que te me has cruzado tú.