Olivia observó cómo uno a uno los estudiantes abandonaban Cobra Kai, yendo detrás de Daniel LaRusso. Sintió la culpa apoderarse de ella cuando el dojo quedó a la mitad, Johnny parecía afectado, pero Kreese se mantenía inexpresivo, su mirada alternándose entre la adolescente y Hawk.
Ahí inició la tortura, porque cuando el sensei Lawrence preguntó quién lo había hecho y nadie contestó, no hubo quien lo detuviera. La pelirroja apenas podía sentir sus piernas tras la primera hora y media, pero sentía temor de decir la verdad, ¿la echarían de Cobra Kai si confesaba? ¿Pero acaso no era peor permitir que todos pagaran por sus errores?
Suponía que Hawk debía estar en una situación similar, pero se negaba a devolverle la mirada, siempre había creído que si le mentía se sentiría extremadamente enojada, pero no era así, estaba absolutamente decepcionada. Y quizás eso era peor.
–Podría parar de inmediato, la decisión es suya, ¿quién destruyó Miyagi-Do?
La pelirroja tragó saliva y sintió nuevamente la mirada del de cresta sobre ella, pero lo ignoró. Ante el silencio reinante, Johnny volvió a hablar.
–Saben que no me agrada LaRusso, pero aquí no enseñamos esa mierda. Al menos, ya no.
El rubio le dirigió una mirada significativa a su antiguo sensei, lo que no pasó desapercibido por la adolescente.
–Les preguntaré de nuevo, ¿quién destruyó el Miyagi-Do?
–Yo no fui, sensei, nunca le faltaría el respeto a un dojo...
–Cierra la boca, gordo. No busco excusas, quiero respuestas.
–Sensei, en serio, no sabemos nada –dijo Miguel, el cansancio muy presente en su voz.
Incluso después de la intervención de su alumno favorito, el sensei se negó a ceder.
–Alguien sabe algo, la pregunta es... ¿quién va a quebrarse?
Kreese observó a Olivia y Hawk, ambos en la primera fila, los dos continuaron sus ejercicios con pesar, pero apenas Johnny fue a contestar el teléfono y dieron un descanso, ambos se acercaron a él con la misma idea.
–Debería decirle al sensei Lawrence que fui yo –dijo Hawk, la pelirroja frunció el ceño.
–Fuimos los dos, no vas a tomar toda la culpa.
–Tú no querías hacerlo, Liv, es mi culpa.
–¿Acaso crees que lo hice por ti? –el de cresta la vio confundido, pero ambos fueron interrumpidos antes de que su intercambio pudiera continuar.
–Ninguno dirá nada, yo me encargo.
–Sí, sensei –dijo Eli, retirándose, pero la pelirroja permaneció en su sitio, aún dubitativa.
–Sensei, con todo respeto, me parece que un Cobra Kai no debería esconderse.
El mayor se mantuvo imperturbable, asintiendo levemente antes de volver a dirigirse a ella, con una mirada incluso más fría a la normal.
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𝕹𝖔𝖙 𝖆𝖓 𝖔𝖕𝖙𝖎𝖔𝖓 - 𝑯𝒂𝒘𝒌 /𝑪𝒐𝒃𝒓𝒂 𝑲𝒂𝒊
FanfictionOlivia Haydes no tiene interés en enamorarse, sabe perfectamente las consecuencias de un corazón roto y, sinceramente, tras pasarse años consolando a su madre por relaciones fallidas, prefiere ahorrarse problemas. Además, no la pasa tan mal, tiene u...