Fuerza y Valor [Finalizada]

31- Complicaciones y un punto débil

La mirada de Velse se volvió en ira y odio contra la saiyajin que le estaba golpeando con mucha fuerza. A cada momento el guerrero se iba debilitando, los continuos ataques de Caulifla molestaban al de cuernos y lo hacían enfadar muchísimo.

—Ya te lo dijo Vegeta... Tú cometiste un error — vociferó la saiyajin sin dejarlo de golpear —, nadie más que ella puede dominar ese poder que tienes tú — le recriminó la saiyajin cargando un Crush Cannon y mandándolo contra su oponente.

Velse salió disparado hacia unas montañas estrellándose en ellas con su cuerpo empezando a deformarse, pero Caulifla no estaba mejor, el uso del Kaioken le está pasando factura en aquel momento de la batalla.
Su cuerpo empezaba a a mostrarse musculoso hasta que termina cayendo sin energías al suelo.
Son Goku tomó el lugar de la chica dándole continuos golpes al extraterrestre, Velse está a punto de perder la batalla decisiva, y todos lo saben.

—Son Goku... — vociferó el cornudo con fuerza —¡Este orbe maldito quedará en el recuerdo! — finalizó muy enojado

—Kakarotto — exclamó Vegeta —, ¡derrota ya a ese sujeto! — gritó el príncipe saiyajin —¡Piensa destruir la tierra! — añadió el saiyajin muy furioso.

—¡Ya lo haré! — gritó cargando un kamehameha de poder colosal.

A la tierra ya habían llegado el ángel Whis y el dios destructor, Bills; observaron a Goku quien estaba utilizando la señal del ultra instinto, el de tez azul celeste sonrió un poco. 

Dos inmensos poderes chocaron provocando una inmensa corriente de viento, la tierra empezó a temblar con fiereza. Mientras que con dificultades la joven saiyajin Kale se levantaba del piso.

Observó a su hermana tirada en el suelo retorciéndose de dolor a consecuencia del abuso del kaioken; se transformó en súper saiyajin regresando al campo de batalla, no obstante quién se quedó sorprendido por la actitud tan sorpresiva de la morena era Gohan.

—Kale — gritó el saiyajin híbrido tratando de detenerla.

—Observen en silencio — ordenó Bills  observando a Kale alejarse.

La chica llegó a la espalda de Velse y comenzó a lanzar un sinfín de ataques de ki que no le hacían el menor daño pero sí que lo molestaban.

—Mocosa del demonio, ¡vete a estorbar a otro lado! — le gritó Velse a Kale, sin embargo ésta sonreía.

—Te confiaste, maldito granuja — espetó Caulifla lanzándole un Crush Cannon.

Fueron milisegundos en los que Velse se había distraído por la saiyajin de pelo alborotado, la presión del kamehameha de Goku se acrecentó ganando terreno contra el potente ataque del cornudo.
Caulifla nuevamente lanzó varias esferas de ki de color rojizo a su enemigo molestando a este aún más acompañadas de ráfagas verdes por parte de su hermana menor.

Bills y Whis veían con seriedad el combate de proporciones épicas que Son Goku estaba librando ayudado por Kale y Caulifla, el dios destructor sonrió para sí mismo mientras se elevaba en el aire.

—Whis — habló con voz grave el dios destructor —, ¿es posible que Goku utilice la forma completa del ultra instinto? — indagó el dios a su ángel.

—Señor Bills... — intervino Gohan —, ¿eso puede ser posible?

—Niño, hay cosas que aún no entiendes — le respondió el dios —, Whis no has respondido mi pregunta.

—Lo más seguro es que Goku sea capaz de activar el ultra instinto — confesó en ángel.

El Kamehameha desapareció de la vista de todos al igual que Goku, todos buscaban al saiyajin terrícola pero no le veían por ninguna parte; los únicos que sabían dónde estaba eran Whis y Bills.

Se oyó un enorme grito en todo el lugar mientas un aura en forma de dragón emerge de Goku, Velse nuevamente lanzó un ataque hacia él; cuando estuvo a milímetros de recibir el golpe desapareció del sitio envuelto en una luz solidificada.

—¿A dónde te fuiste? — indagó furioso el cornudo buscando al saiyajin.

—Velse — llamó Goku —la verdadera batalla comienza ahora — desapareció de la vista de todos golpeando a su rival.

En la montaña desde la que los guerreros Z ven la pelea, el ángel Whis observó con una sonrisa al saiyajin, su alumno ha sido cubierto por una luz blanca muy brillante que no lo dejaba ver su rostro.

—Whis volvemos a ver el poder del ultra instinto — musitó Bills completamente serio.

A dicho lugar llegaron Krillin, Tenshinhan, Yamcha, Chaoz y Kyabe; el de tres ojos y el mejor amigo de la infancia de Goku se dieron cuenta que el saiyajin estaba utilizando la forma completa del ultra instinto.

—Krillin, ¿Qué significa eso? — murmuró Kyabe con nervios.

—¿Eso fue de lo que hablaron luego del torneo de la fuerza? — indagó Yamcha —, por más que intente no puedo sentir su ki — finalizó el terrícola asustado.

—¿Eso? — cuestionó Krillin —, sólo se trata del ultra instinto.

De inmediato y sin mediar palabras, Goku se abalanzó contra el cornudo para impactarle un potentísimo golpe en el rostro que se convirtieron en muchos dada la velocidad tan descomunal con la que el Son mayor luchaba. Velse intentaba por cualquier medio golpear al saiyajin pero resultaba en vano, éste evadía cada uno de los golpes que le lanzaba el villano. El saiyajin observó en un instante como su rival bajó la guardia descubriendo su pecho, milésimas de segundo bastaron para que el puño del peli palmera golpeara esa zona con muchísima fuerza, Velse salió disparado hacia una formación rocosa que, al este impactar con ella, se desmoronó.

—Maldito saiyajin — vociferó el cornudo golpeando el suelo.

—Debo admitir que eres muy fuerte — murmuró Goku —y muy resistente. Jamás había conocido a alguien con tu perseverancia.

Velse estaba furioso, se lanzó nuevamente contra Goku golpeando su torso provocándose el mismo la ruptura de su brazo.

—No tiene caso que sigamos peleando — increpó el saiyajin.

—Miserable gusano — el cornudo se sentía humillado por aquel guerrero de la tierra.

Desde la montaña en la que los guerreros Z observaban la batalla, Bills contemplaba bastante molesto la situación a tal punto de querer intervenir. El gato morado gruñó furioso por la actitud tan permisiva de Son Goku.

—¡¡Goku, acaba con él ahora mismo!! — ordenó furioso el dios destructor.

—Sí, ya no perderé el tiempo — musitó el saiyajin cargando una esfera de ki.

La misma fue disparada contra el individuo generando una enorme luz brillante que hizo que todos perdieran la vista por varios segundos.

—¿Lo logró? — preguntó Bills serio.

—Lo dudo mucho — añadió el ángel.

El cuerpo que supuestamente había sido destruido por el saiyajin, comenzó a regenerarse gracias a las habilidades de Piccolo; no obstante, se hizo inmenso y con una figura desproporcionada además de que su poder se había vuelto inestable.

—¡No puede ser! — exclamó Goku con sorpresa.

El cetro de Whis empezó a sonar justo cuando todos observaban la nueva forma de Velse desapareció del lado de Bills para acercarse a su discípulo a decirle algo.

—Una manera de derrotarlo es hacer que su cuerpo se sobrecargue de energía — dijo el ángel caminando —, o destruir sus cuernos ya que poco los ha usado — añadió Whis  —, pero ahora tenemos que ir el señor Bills y yo a una reunión con el Gran Sacerdote — dicho lo anterior, el de tez azul regresó al lado de su dios de la destrucción.