En Seúl para cumplir su sueño: Ser cantante.
La oportunidad de su vida: Los productores Jeno y Jaemin de la empresa estrella emergente del entretenimiento necesitan un solista.
El problema: J & J Entertainment parece más un total caos que la empresa...
-¿No es obvio? ¡Tienes que ir a buscarlos! ¡Ya mismo! -Donghyuck se puso de pie como impulsado por un resorte casi dispuesto a hacer mi maleta si era necesario.
-Pero él no sabe dónde están. Es como buscar una... -comenzó a replicar el castaño, siendo inmediatamente interrumpido por el moreno.
-Ay, Dios. Cállate, Mark. Eres un aguafiestas. Jeno la cagó, se portó como un idiota y ahora tiene que hacer algo al respecto... Así como Renjun que fue a buscar a Jaemin para arreglar las cosas con él.
-¿Cómo sabes qué pensaba Renjun? -de nuevo dudó Mark intentando mantener el lado racional del asunto.
-Duh, yo le di la idea, baboso. Pero no se me ocurrió que pudieran gustarse. Pensé que simplemente se sentía horrible por lo que había hecho -Donghyuck volvió a responder con cierto fastidio, aunque la verdad era que su trato hacia su ex se había suavizado de unos días para acá. Raro, pero no venía a tema.
-Pero ¿crees que lo haya encontrado? -el chico de ojos redondeados miró con duda a los que estábamos alrededor. El moreno de camisa holgada se encogió de hombros, Jungwoo apartó una mirada extraña que daba la impresión de saber algo más, pero no supe qué.
Mark tenía un punto ¿Cómo podríamos saber siquiera si estaban juntos? ¿Cómo pudieron haberse encontrado en un país extranjero? Cuando la intención de Jaemin era perderse, era imposible que alguien le hallara. Lo digo por experiencia. Negué por lo bajo, no había manera.
-Ya vas a empezar a dudar. De todas formas, no tienes opción si en serio "amas" a esos dos como dices -Donghyuck literalmente hizo comillas con sus dedos al pronunciar aquella palabra, con la clara intención de provocarme. Sí, obviamente sí funcionó.
-Carajo, alguien llame a mi hermano, tengo que hacer maletas.
-¡Dios, al fin! -exclamó el Hyuck con emoción tendiendo las manos al cielo por finalmente darme la iluminación y acto seguido se colgó del brazo de Mark contagiándole ese sentimiento -Te acompañamos ¿Jungwoo, vienes? - se dirigió al rubio que había dejado de prestar atención cuando un mensaje hizo vibrar su teléfono celular.
-Ah, claro. Jeno, date prisa y baja.
-¿Por?
-Ya verás, vamos -Jungwoo me atajó del brazo sin dejar que respondiera y me jaló hasta el ascensor con Mark y Hyuck siguiéndonos de cerca, el elevador nos llevó pronto a los cuatro hasta la planta baja.
-¿Tienes pasaporte, cierto? No olvides empacar suficiente ropa interior, no sabes cuánto tiempo te irás...
-Sí, y no te preocupes por Doyoung y la empresa nosotros nos encargamos, hermano -el castaño y el peli-lavanda me atiborraban de consejos y recomendaciones sin dejar espacio entre uno y otro. Hasta que llegamos a la puerta frontal de cristal transparente y creí ver una aparición.
No, era real, ambos pares de ojos se cruzaron con los míos haciéndoles quedar inmóviles como yo, aún del otro lado de la entrada. Mi alma dejó mi cuerpo y regresó en cuestión de un segundo. Quise gritar sus nombres, pero simplemente corrí hacia ellos.
No me importaba si no correspondían mis sentimientos, sólo quería abrazarlos y asegurarme de que eran reales y estaban a salvo. Luego me disculparía por ello si era necesario.
Mi sorpresa fue increíblemente mayor cuando ambos me recibieron con la misma emoción y los brazos abiertos.
Por fin, por fin estábamos los tres juntos y se sentía tan bien. Me sentía tan feliz y lleno.
-No saben lo tonto que he sido. Un estúpido, patán, un idiota que...
-Sí, sí, podrás completar tu lista luego, antes de que los asesine ambos. Sólo abrázanos Lee Jeno -acaté la orden de Jaemin, que ahora llevaba cabello oscuro y Renjun asintió como diciendo que todo estaría bien. Simplemente decidí creer eso.
Ahí estábamos, tres chicos patéticos abrazándonos en la acera cual niños pequeños. Así me sentía, y así quería sentirme siempre. Locamente enamorado de ese par de hermosos chicos aunque todos lo vieran como locura. Ahora tenía que decírselo a ellos.
-Nana, Renjun, yo...
-Shhh, en serio cállate, no arruines el momento -esta vez Renjun me paró en seco depositando un beso en mi mejilla seguido de Nana dejándome descolocado ¿Qué fue eso? ¿Qué estaba pasando? ¿Mis plegarias eran al fin contestadas? Ambos quisieron reírse de mi reacción confundida.
-Está bien, vayamos a un lugar más privado. Tenemos que aclarar varias cosas -la expresión del pelinegro adquirió más seriedad, y Renjun y yo ejecutamos su orden al instante. Con evidente nerviosismo.
Hola!
Perdónenme por esta miseria después de días sin actualizar 😔
Tengo una migraña muy fea y me mareo fácilmente si estoy pegado mucho tiempo al teléfono.
Por eso son cortitos estos dos capítulos, ojalá les gusten de todos modos 😌.
Acabo de empezar un OS y una historia corta (aunque según yo esta iba a ser u a historia corta). Pero bueno, para que sepan que en seguida de que termine este fic habrá nuevo contenido.
Lxs dejo, trataré de actualizar lo más pronto posible. Besitos y una fotito, byeee.
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