(Missing) Puzzle Piece | | NORENMIN

Flood

Otra vez era mi reflejo quien me juzgaba. Esta vez en el espejo del baño del cuarto piso.

Después de salir huyendo así de Jeno, fue un milagro no toparme con nadie en el extenso corredor así que agradecía en voz baja al cielo. De haber sido de esa forma estoy seguro de que habrían notado que algo andaba mal: Cabello completamente desordenado, labios algo hinchados (tal parece que a Jeno le gustaba morder), ropa desaliñada y camisa fuera de lugar, además de un bulto peculiar dentro de mis pantalones.

Recargando mis brazos sobre el lavabo abrí la llave del agua y la dejé correr libremente. Con suerte mojarme la cara con algo de agua fresca me ayudaría a tranquilizarme y a aligerar la presión en mi parte baja.

Aún sentía un cosquilleo en los labios y recorriendo mi torso entero, justo donde el chico de anteojos y chaqueta de cuero había dejado sus huellas invisibles, también agradecí no haber terminado con un chupetón o algo parecido. Al igual que el agua, los pensamientos que se habían acumulado en mi mente comenzaron a fluir.

—¿En serio quieres hacer esto, Renjun? ¿En serio eres así? ¿En serio podrías vivir de esta forma? —decía esto a mi reflejo y mi reflejo me lo decía a mí, pero mi cerebro no daba señales de entenderlo, de modo que lo repetía una y otra vez mientras el agua seguía corriendo.

Yo había iniciado el beso esta vez, eso me hacía tan culpable como Jeno. Cada vez que pensaba en Jaemin me remordía la consciencia ¿cómo pudimos hacerle eso? Lo peor es que una parte de mí no deseaba parar a la vez que la otra pedía a gritos que me olvidara de lo que acababa de hacer. De pronto pensé que era el típico caso del jefe engañando a su pareja con un pobre iluso donde claramente el iluso era yo ¿debía creer todas las palabras de Jeno o simplemente quería seducirme? ¿Y si no era la primera vez que lo hacía y Nana tenía razón en sus celos?

Todo era tan abrumador, ya ni siquiera el sonido del chorro de agua podía ayudarme a ordenar el cúmulo de pensamientos que se arremolinaban en mi pobre cabeza. Lo único que podía hacer era continuar como si nada, rogando para que no se repitiera, y para eso era evidente que no podía quedarme sólo con Jeno de nuevo. Ya que el razonar no nos funcionó.

De pronto estuve resuelto. No era mi mejor opción pero era la que no incluía arriesgar todo por lo que había luchado, es decir, mi carrera.

Salí del baño sobrio otra vez y justo encontré a los pequeños mejores dolores de cabeza que se hacían llamar Jisung y Chenle.

—Hyung, acompáñanos a la sala de prácticas, te ves cansado —Jisung puso una mano en mi brazo y me dejé guiar por ambos chicos, era cierto que estaba más cansado de lo usual, mentalmente, más que nada. Llegar y ver a otras personas que no fuesen Jeno y Jaemin en la sala de prácticas se sintió mejor de lo que hubiera podido describir.

—¿Cómo vas con tu sencillo, Renjun? A mí me tocó un inútil que no sabe hacer nada así que estamos estancados —escuché sin pausas de por medio desde una esquina de la sala donde Donghyuck sentado en el suelo contra la gran pared espejo bebía agua agitado después de ensayar. Decir que eso fue una indirecta no sería muy acertado, contando la mirada helada que acompañó la frase hasta llegar a su destinatario, Mark, en la otra esquina de la habitación.

—Hoy no voy a discutir contigo, Hyuck —fue el terminante veredicto del afectado, aunque su cara revelaba cierta angustia más que molestia.

—¿Siguen peleados? —señalé la situación. A pesar de que no me divertía su mala posición, era un alivio no tener que lidiar con la mía por un rato.

—Ajá, y seguimos sin saber por qué —Chenle se encogió de hombros ya acostumbrado al caos de la relación entre esos dos.

—Pregúntale a ese, a ver si sabe responder otra cosa que no sea 'ni siquiera sé porqué estás molesto' —el chico moreno de cabello casi lavanda agregó poniéndose en pie y viniendo hacia nosotros—. Pero, bueno ¿qué importa? La pregunta iba en serio.

—Supongo que bien, aunque todavía no he grabado la canción y esta no tiene nombre... —quizá debí agregar algo más pero nada se me ocurrió.

—¿Seguro? —Donghyuck tenía los brazos cruzados sobre su pecho, obviamente no se la tragaba.

—Claro.

—No, claro que no. Pero, bueno, no te obligaremos a decir o hacer algo que no quieras ¿no es así, Mark? —Donghyuck echó la cabeza para atrás levemente a la vez que subía la voz enfatizando la última pregunta.

—Ya te dije que no voy a pelear contigo, incluso nuestro fandom ya sospecha que algo anda mal.

—Eso creí... Tú sabes, Renjun. Cuentas con nuestro apoyo —el chico de cabello morado y camiseta over-sized gris extendió su puño hacia mí mientras Jisung y Chenle asentían en aprobación, devolví el gesto chocando el mío contra el suyo. También asentí tímidamente. Me seguía intrigando qué habría sucedido entre Mark y Donghyuck y si era tan serio como con lo que yo tenia que lidiar ahora ¿podría terminar odiando así a Jeno, o, Jaemin a mí?