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Maggi

Al segundo en el que entré, la mezcla de humo de marihuana, alcohol derramado y sudor corporal eran tan fuertes que sentí que iba a vomitar. La mansión se veía ahora completamente irreconocible.

Cuerpos bailando llenaban el salón escasamente amueblado y los pasillos; la cocina se convirtió en una zona de bar donde la gente tomaba tragos espalda con espalda, y un montón de brillantes serpentinas verdes y azules colgaban del techo.

Valerie y yo pasamos algo de tiempo en la enorme sala, vislumbramos a Jimin ,se encontraba sentado en una mesa redonda con varias botellas. Otro chico está a su lado, sus ojos pesados revelan su estado de ebriedad. Val parece enfadada mientras nos acercamos a ellos.

— ¿Por qué mierda lo has dejado beber tanto?— le reprende.

—Val,¿Tu vestido es transparente? — Las palabras del chico salen con dificultad, intenta rodear su brazo en la cintura de la morena y ésta se aleja.

Jimin le resta importancia. 

— Se ha tomado como agua cada trago que he preparado. No soy su maldito niñero.

—Como sea, tengo que ir al baño—anuncia Valerie.

El chico de ojos pesados larga un erupto levantándose de su asiento tambaleándose.

— Iré contigo en un momento.

Intenta avanzar y Jimin le coloca una mano en su pecho deteniendo su paso.

—Quieto.

Val pide a Jimin preparar algo mientras volvemos, él asiente,rodea sus dedos en mi brazo y yo la sigo sin cuestionar. La espero en la puerta del baño mientras dirijo mi atención a la pista para evitar la espera y observo a una chica saltando con los brazos al aire, intentando mantener el balance sobre sus stilettos rosa neón. El tipo con el que está sacude la cabeza hacia ella, riendo. Apartando la mirada me giro algo mareada por el humo y choco con un cuerpo femenino.

—¡Oh, no! ¡Perdona! —digo a la chica.

Ella trata de limpiar la cerveza que traía en sus manos de su top negro.

—¡Mierda! —gruñe—. Ahora voy a oler a cerveza.

—Lo siento, de verdad lo siento mucho.

Ella levanta la mirada, su pelo negro hasta los hombros. Trato de sonreírle, pero ella a cambio se queda mirando mi rostro. 

Sí,es una cicatriz.  Ignórala.

Parpadea, tiene unos bonitos ojos verdes, sus tetas son falsas pero no la hacen menos bonita. 

Ella juega nerviosa con su piercing en la lengua.

—Lo siento, no mire por donde iba.

—No es tu culpa chica. Tenía un poco de prisa también. 

Sonrió.

—Puedo buscarte algo para que te limpies—ofrezco.

—No hace falta.

Quita su pequeña chaqueta y luego el top quedando su sostén de encaje a la vista. Tira el top hacia atrás volviendo
a colocar la chaqueta.
Bueno, al menos me siento menos tonta.

—Ya está listo —chilla—: Será mejor que me dé prisa en buscar otra cerveza, sino mi hombre se pone gruñón. Por cierto,soy Nina.

Valerie abre la puerta acomodándose el vestido, los ojos de la morocha se dirigen a Val, sus labios se curvan en una excesiva sonrisa.

—Valerie, preciosa … tanto tiempo. -- Saluda apartando con su dedo meñique su corto cabello de la frente.

Val aprieta sus ojos, su expresión de disgusto es notoria. Mueve los labios para hablar pero se retracta apretando en una fina línea. Me toma del brazo ignorandola , le ofrezco a la tal Nina una apologética sonrisa antes de tropezar con mis pies mientras intento mantener el paso de Valerie.

D A I M O N    | JJK LIBRO #1 ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora