Un año después de su ruptura el gran alfa Min Yoongi regresa a reclamar lo que por derecho le pertenece y nadie impedirá que arrastre de vuelta a su destinado, aunque lo destruya en el proceso.
"Te marqué como mi propiedad desde el primer momento e...
Llevó su mano a la unión entre su cuello y su hombro, justo en la zona donde la cicatriz blanquecina de su marca le recordaba que seguía unido a Yoongi. Su mirada apagada por el cansancio reposó a través del espejo en su aspecto; su cabello castaño, opaco y enmarañado, su piel reseca y las bolsas debajo de sus ojos eran prueba visible de lo mal que la estaba pasando, estaba deteriorado, física y mentalmente, desde ese día en el que Yoongi se fue todo se desmoronó ante sus ojos y cuando creyó que no podía ser peor, que su dolor no podría incrementar su alfa tomó a alguien más importándole poco su sufrimiento al haber un lazo y una marca de por medio.
El tiempo seguía pasando y con ello sus esperanzas poco a poco desaparecían, pero pese a las circunstancias seguía vivo, no había muerto después de todo, aunque el estado en el que se encontraba asemejaba a un muerto en vida. Su día a día consistía en estar en casa, en una especie de letargo mental, a penas probaba bocado y solamente salía unas cuantas horas al día para trabajar medio tiempo para poder sobrevivir, aún no comprendía como es que no había muerto todavía o peor aún como es que había resistido la tentación de acabar con su vida.
Estaba desmejorado, demasiado para ser real, su omega raras veces se mostraba y cuando lo hacía era únicamente para rogar por su alfa incrementando su desgracia. Había perdido la conexión con su parte animal y eso era bueno y malo a la vez.
Por una parte el no tener a su omega a cada segundo martirizándolo le ayudaba a pensar de manera racional sobre lo que estaba pasando, pero aún así era innegable el hecho de que a pesar de todo seguía amando a ese estúpido alfa, no podía sacarlo de su mente pese a lo que le había hecho y eso no hacía mas que enfurecerlo más, porque era tan idiota como para seguir esperando una mínima señal que le devolviera la esperanza perdida, aunque en el fondo de su alma aún pensaba que regresaría, porque él prometió volver y Yoongi siempre cumplía sus promesas.
Sin embargo y pese a saber que lo seguía queriendo aún así había tanta ira y rencor hacia él que no sabía cómo reaccionaría cuando se reencontraran, Jimin pensaba que Yoongi lo único que quería era hacerlo sufrir por esa misma razón siguió manteniendo su lazo, por eso no marcó a la persona con la que lo traicionó porque era tan malditamente egoísta que a pesar de todo lo seguía considerando de su propiedad, porque para él era una simple adquisición de la cual se desharía hasta estar completamente satisfecho y eso le dolía tan mal, el saber que quizá su alfa nunca lo amó como dijo alguna vez.
Eso lo hacía sentir tan iluso e idiota al haber pensado que por ser destinados deberían amarse por siempre, pero es que Yoongi nunca se comportó como un alfa común, en realidad se hizo ideas por cuenta propia. Nunca debió haber aceptado salir con él, nunca debió haber permitido que lo marcara y en primer lugar nunca debió entregarle su corazón si en el fondo sabía que no lo cuidaría como el cuidaba el suyo.
Sí, Jimin fue un iluso enamorado que no midió las consecuencias de sus decisiones.
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