♤Coroname♤TLC (Alone x Lectora) 》Terminada《

Capítulo 1: La llegada de las tropas

Sus cabellos celestes de su flequillo bailaban al ritmo del aire del atardecer, descubriendo esos orbes celestes que estaban posados en el el bello atardecer que los acompañaba en su travesía. Estaba un poco inquieta al ver que la niña aún no despertaba pero aún así debía ocultar sus sentimientos de preocupación ya que eso no era muy bien visto por sus compañeros y mucho menos por sus enemigos quienes los tomaban por los guerreros sanguinarios de los reyes del reino inframundo.

Al ver a la lejanía el castillo, con un brazo sujetó con fuerza el cuerpo inconsciente de la niña para después con su mano libre tomar la rienda del caballo y ordenarle que corriera lo más rápido posible, provocando que sus compañeros le siguieran al mismo ritmo.

- Soul, ¿por que tanta prisa?.-  interrogó Minos al estar al lado de la peli celeste.

- Minos, debo llegar lo más rápido posible.- miró a la niña.- si no la revisa un doctor... puede que...

- Lo entiendo Soul, pero debes mantener tu compostura, recuerda que si nuestras tu lado sensible pueden echarte de la tropa aún sin que sepan de lo tuyo...

- Lo sé, pero no quiero perder a alguien más entre mis brazos.- frunció el ceño.- no otra vez.

- Esta bien...- suspiró.- ¡Vamos mis soldados, debemos mantener con vida a estos aldeanos para hacer más grande el imperio de nuestro señor!.- ordenó a toda la tropa.

Los guerreros al unísono solo gritaron un simple "si" ante la orden y sin detener a sus caballos, siguieron su camino hasta llegar a las puertas del castillo donde unos metros antes, Minos solo gritó:

"A un lado, tenemos heridos"

Aquel grito les hizo quitarse del camino a todo quien se encontraba en el camino que daba al castillo. Al estar a unos metros cerca de su destino final, el andar de los caballos fue disminuyendo hasta detenerse en su totalidad. Los animales de detuvieron y sus jinetes solo bajaron cada uno con una persona herida entre sus brazos para llevarlas corriendo hacia el área donde se encontraban los curanderos.

Soul solo tomó a la niña en brazos y la llevó hacia aquel lugar designado para dejarla en una de las camas. Con un pequeño malestar en su pecho, solo caminó hacia el lado sur del castillo donde se encontraban los territorios en los cuales los guerreros tenían sus propias casas y un coliseo.

Estaba tan sumida en sus pensamientos hasta que sin pensarlo solo caminó hacia el coliseo donde subió a las gradas para ir hasta arriba para poder admirar los terrenos y la bella puesta del sol. Sin pensarlo solo se quitó el casco y dejó que su cabello corto bailara al ritmo del viento que le causaba tranquilidad.

Cerrando los ojos solo respiró aquel aire fresco y trató de dejar de pensar en la niña y su jornada de vigilancia nocturna, simplemente esas cosas le mantenían preocupada, pero aquel momento de tranquilidad alejada de todos sus compañeros le llenaban de paz a su corazón lleno de preocupación y culpa al no poder hacer nada respecto a las guerras.

- Una hermosa vista después de una misión... es lo más reconfortante que puedo hacer.- habló para si misma.

-Ahhh~.....

Ese simple suspiro le hizo entrar en alerta y con rapidez desenvainó su espada apuntando a quien se encontraba detrás de ella, provocando que el contrario solo se asustará mientras que T/n solo tomó un poco de aire para volver a su papel de guerrero.

- ¿Qué hace por estos lugares?, ¿no debería estar con los médicos?.- habló con un semblante serio.

- Emm, yo... emm.. eh.. ¡perdón!.- se arrodilló.- no quise asustarlo.

- En descanso.- ordenó la peli celeste fingiendo su voz.

El joven solo siguió arrodillado y con una clara expresión que denotaba confusión, causando que T/n solo soltara un suspiro y le pidiera que se levantara.

- Eres un novato, ¿no es así?.- guardó su espada.

Desviando la mirada.- No.... no soy un guerrero como usted.

- Si no eres uno de las tropas, debes retirarte de aquí.- le dio la espalda.- estos lugares no son muy seguros.

- Lo sé, mi padre me advirtió, pero aún así...- trató de sonreír.- la vista que brinda la cima del Coliseo es única.

Al escuchar las palabras del joven, solo dirigió nuevamente su mirada hacia el para ver aquellos orbes que transmitían calidez y ternura. Aún sin ponerse su casco, solo se acercó a el para mirarlo de cerca, causando que el de orbes celestes solo se ruborizara.

- Emm, ¿sucede algo malo?.

- No, pero me parece haberte visto antes.- cruzada de brazos.- ¿ya nos conocíamos?

- No señor, no nos conocemos.- trató de sonreír.

- Bueno, entonces me presento... yo soy Soul espectro mano derecha del juez y comandante de tropas Minos de Grifo, un placer conocerlo... joven....

- Alone, mi nombre es Alone.- sonrió.- un placer conocerlo joven Soul.

Al escuchar aquel nombre, solo se exaltó y con rapidez solo se arrodilló para tomarle la mano y besarle el anillo que llevaba.

- Disculpe mi osadía por haber levantado mi arma en su contra.

Habló sin importarle fingir su voz, dejando salir su dulce y delicada voz, causando que el rubio solo se sorprendiera.

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