♤Coroname♤TLC (Alone x Lectora) 》Terminada《

Capítulo 11: En mis pensamientos

El joven de cabellos blancos sólo miraba con cierto brillo a aquella guerrera encubierta, que de tan solo sentir la mirada del chico le hacia sentir incómoda ya que los únicos que la veían eran sus compañeros y la familia real quienes la miraban como un chico nada más, bueno a exepsion de Alone, quien estaba comenzando a ver a T/n de otra manera.

Por otro lado, en su reino de origen, se encontraba Alone mirando las estrellas. Aquel joven rubio solo desviaba su mirada de vez en cuando hacía la arena del lugar de los guerreros. No sabía el por qué lo hacía, pero lo que si sabía era que no podía dejar de pensar en cómo lucía T/n con aquel vestido.

- No sé cómo describirte.- suspiró.- al principio creí que eras un chico que llamó mi atención por su fuerza y valentía tal vez por los relatos de mi padre que me hicieron sentir admiración  por ti como el respetado guerrero llamado "Soul" pero ahora... no sé por qué no puedo sacarte de mi cabeza.

El joven solo lanzó sus pinceles al suelo junto al lienzo que tenía frente a el, se sentía frustrado de tan solo poder pintar el rostro de aquella peli azul y no otra cosa que no fuese esa chica.
Lleno de molestia, tomó una daga que tenía en uno de los cajones y con ira comenzó a rasgar el lienzo que anteriormente había tirado al suelo.

- ¡¿Por qué?!.- clavó la daga.- tu y yo no somos iguales, eres una chica que ama la sangre y yo... ¡detesto eso de ti!

Al ver su obra de arte destruida con sus propias manos, solo se levantó del suelo y limpió su vestimenta para luego dejar de lado la daga y después tirarse sobre la cama viendo hacia el techo.

- Te odio... si... te odio.- frunció el ceño.- por eso no puedo dejar de verte. Por que te odio, y nada más. Jamás seremos nada por tus simples y diferentes ideales...

El joven de un salto solo se puso de pie y un poco más tranquilo, solo levantó sus pinceles y sus pinturas para comenzar a hacer un lienzo nuevo.

Cerrando sus ojos solo dejo que su mano fuese su guía y que su corazón y mente plasmarán lo que tanto anhelaban en esos momentos mientras el aire movía con delicadeza sus cabellos y las estrellas bailaban al rededor de la luna, dando un gran espectáculo nocturno.

Suspiró.- Veamos que es lo que tanto deseo y no veo.- dijo para asimismo y luego limitarse abrir los ojos.- ¡¿QUÉ?!. ¡¿OTRA VEZ TÚ?!

Gritó el chico mientras miraba su lienzo, y en efecto, lo que había pintado era nada más y nada menos que a T/n, pero esta vez estaban sus dos formas: Era la joven T/n y Soul. Tal vez dirán: ¿por qué dos formas?, pues, por que Soul era muy diferente a lo que demostraba T/n cuando no fingía ser varón.

Cambiando de tema, el joven príncipe está vez solo corrió hacia la mesa en la que había puesto la daga y luego la tomó en manos para ponerla sobre su cuello y con frustración gritar:

- ¡Ya no puedo!

Estaba decidido, pero no contó que alguien estaba escuchándolo detrás de la puerta, así que sin dudar un segundo ingresó a la habitación y con rapidez le quitó el arma al chico y lo tumbó al suelo para luego dirigirse hacia la pintura que había hecho recientemente el joven príncipe.

- Disculpe mi osadía y mi descortesía su alteza pero... no debería hablar así de mi compañero.- se cruzo de brazos mientras le mostraba una sonrisa.- ¿o me equivoco?

- ¿Mi.. Minos.?

- Ahora, por que no cierra la puerta de su habitación, yo se que quiere hablar de ese guerrero terco que no puede salir de sus pensamientos.

- ¿Y por que hablaría contigo?.- le pregunto mientras se levantaba del suelo.

- Por que soy el único que conoce el secreto de Soul, además de usted.

- No tengo nada que hablar.

- Y que me dices de esta pintura, Uff, a Soul no le gustará para nada ver que la estás pintando... se molestaría, aún que viendo bien su pintura... tal vez le agradaría por que captaste ambas identidades.- sonriendo levemente.- le va a gustar.

- ¡¿Enserio?!.- pregunto mientras que en sus ojos se reflejaba cierto brillo.

- Jaja, no.- contestó.

Concierta molestia solo se cruzó de brazos y se sentó en su cama para luego mirar al albino.

- Me desharé de esa pintura.

- Que lastima, es muy hermosa.

- Deje de burlarse.

- Estoy hablando enserio.- mencionó con un tono lleno de seriedad.- a T/n le va a gustar, pero...

- ¿Pero?.- aqueó una ceja.

- Pero, esta pintura no me dice que tiene sentimientos negativos hacia ella, ¿o me equivoco, príncipe?

- Claro que sí, yo la odio.- se levantó de la cama.- todo mi ser la odia, incluso me la recuerda a cada momento para aumentar mi odio y desprecio hacia los guerreros como ella.

- Si la odiara, usted la hubiese pintado llorando o incluso lastimada... pero no. En esta pintura solo refleja una sonrisa en ambas partes. Usted es malo para mentir, incluso a si mismo no puede engañarse.

- ¡¿Engañarme?!. ¡¿De qué estas hablando?!

- Tranquilo príncipe, es mejor que baje la voz si no quiere que sus padres vengan y descubran lo que ahora es nuestro secreto sobre Soul.

- T-tiene razón.

- Bueno a lo que iba y venía, usted no odia ni aborrece a mi dulce hermanita, lo que usted tiene es un caso de.. se lo voy a deletrear para que quede más claro... es: E-S-T-Á  E-N-A-M-O-R-A-D-O D-E  T/N.

- ¿Qué?. No es cierto.

- Jajaj, los reyes me dijieron lo que sucedió cuando se desipidio de ella, aún que no supieron que Soul en realidad es una chica.- se encogio de hombros.- en fin, pero ellos me dijieron eso, de que tal vez usted estaba enamorado de Soul y por eso vine aquí para ver si era cierto.

- Si claro, ahora resulta que pensar en T/n y en cada cosa que ella hace y lo que puede estar haciendo y en como luce es estar enamorado.- hizo un puchero.

- Jaja, ya se respondió solo.

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