capitulo 11: biblioteca

427 42 12
                                    

Nueva España se dirigía a la biblioteca, ya que esperaba encontrarse con Francia para discutir algunas cosas.

Los pasillos del palacio de España se encontraban tan solitarios y silenciosos como siempre, Nueva España no estaba acostumbrado a esto, ya que aunque viviera ahí, siempre estaba acompañado de sus hermanos, sirvientes, o en muy raras ocasiones de su padre.

España les ha hecho creer que su compañía y "cariño" es un premio muy valioso, y para ganarcelo, no solo tienen que portarse "adecuadamente"
Sino que también tienen que entregarle grandes riquezas de su territorio, si no cumplen esto, España los trata como si fueran empleados, no les da esos "privilegios" como le hace llamar a su "atención y orgullo".

Todos sus "hijos" ya estaban acostumbrados a ese trato de su padre, desgraciadamente muchos de sus "tan queridos hijos" no cumplían con sus requisitos, y algunos los cumplían de vez en cuando, el único que lograba mantener los requisitos por un buen tiempo era Nueva España.
Gracias a esto España siempre le prestó mucha más atención a el que a sus otras colonias, y esto se volvió algo muy normal en la "familia" hispana.
Algunos de los hermanos de Nueva España envidiaban a este, ya que veían los privilegios que el poseía, y que según ellos, ellos también lo merecían, tal era el caso de río de plata y de capítania general de Venezuela.
Algunos otros lo admiraban y para ellos el era una gran figura a seguir, tal era el caso de capítania general de Cuba y de capítania general de Guatemala.
Y para los demás el era otro hermano más que también se esforzaba mucho con el único propósito de ser mejor para poder regresar a su territorio, ya que España les prometio que cuando maduraran y aprendieran a ser responsables les Hiba a autorizar regresar a su territorio, estos eran virreinato del Perú, nueva Granada y capitanía general de Chile.

Ya había llegado, Nueva España se detuvo un momento afuera de la puerta para relajarse un poco, ya que el no acostumbraba a hablar con imperios, mucho menos a que estos le pidieran hablar a solas con el, respiro profundo y entro...

- oh Nouvelle Espagne !!, je t'attendais-

-disculpe?-

- oh Pardon, dije que te estaba esperando cher.-

-a, si madam, sobre eso... Por qué me cito aquí?-

- ven siéntate- dijo señalando al sillón donde ella se encontraba, nueva España le hizo caso y se sentó.

-bueno, nouvelle espagne, te cité aquí por qué quiero hablar contigo, de algo sumamente importante y... Confidencial- esto último lo dijo de una manera muy seria y fría, que nunca antes había escuchado nueva España, ni si quiera de su propio padre Maya.

-cl... claro madame, n...no l..le diré a na...nad...nadie- dijo Nueva España tartamudeando.

-muy bien!!- dijo Francia de una manera muy alegre- confío en ti nouvelle espagne- dijo volviendo a un tono serio, Nueva España se quedó impactado de los cambios de humor tan repentinos de Francia.

- bueno, antes de que empesemos... ¿Hay algo que me quieras contar?-

-n...no madame-

-seguro?-

-si...si madame-

-aahhh- suspiro- bueno... Tenía la esperanza de que tú mismo me lo digeras, pero veo que no.- dijo un poco decepcionada.

- n...no se a qué se refiere madame.-

-mmm- Francia empezó a inspeccionar a Nueva España buscando algún indicio de UE estaba mintiendo, después de un rato de buscar y no encontrar nada agrego- mmm veo que tienes razón, no tienes ni idea de lo que hablo... Déjame darte una pista...- dijo empezando a buscar algo en una pequeña bolsa que traía consigo.- aja!! Aquí está!!- dijo Francia sacando un pequeño pañuelo- vez esto?-

Mi Querida Nueva España-TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora