OJOS DE UN ÁNGEL (Calum Hood)

6. Solo quería que terminara

Mali y yo bajamos del coche en dirección hacia las calles donde se encontraban los vestidos de novia, me había convencido para ir a verlos y probarme algunos que me llamaran la atención

-No tienes que comprar ninguno por ahora sí no quieres, pero podrías darte una idea de lo que quieres y comprarlo en Nueva York o San Francisco

Lo único que lamentaba es que mientras yo solo me había puesto un pans y una coleta ella iba vestida como una completa modelo y me hacia querer regresar a la casa para poder ponerme algo mejor.

-Mi madre había dicho que ella quería  estar ahí cuando lo eligiera, pero creo que puedo enviarle unas cuantas fotos de los que me pruebe- ella asintió con una agradable sonrisa mientras entrábamos a las calles pero se detuvo de golpe- ¿Pasa algo?

-Maldita sea, se me ha olvidado mi celular en el coche- maldijo por lo bajo mientras hizo una mueca- mira, ve hacia aquella tienda, una amiga compró ahí su vestido y tienen muy buenos diseños- apuntó a una tienda de una esquina, esta se veía demasiado elegante- ve eligiendo algunos mientras yo vuelvo

-De acuerdo- ella comenzó a regresar hacia la calle de donde habíamos venido

Comencé a caminar hacia la tienda, una pequeña campanita sonó cuando la puerta se abrió llamando la atención de algunas de las clientas o empleadas que estaban ahí. Mis manos comenzaron a sudar mientras veía los vestidos en los maniquíes, los detalles eran verdaderamente bonitos y las telas parecían que iban a desahacerse con solo tocarlas. Llegué a dónde habían anillos de compromiso y anillos de boda, todos muy bonitos pero que nada se parecían al mío. Pasé mis dedos entre algunos y comencé a alejarme hacia donde estaban los tocados

-¿Puedo ayudarla?- salté en mi lugar cuando me habló una mujer a mi espalda, ella me miraba expectante

-Quisiera probarme algunos vestidos- le dije como sí esa fuera la única información que necesitara saber.

-¿Cuál es su presupuesto?- tal vez solo fue mi imaginación y ella no estaba siendo tajante conmigo

-¿Eso importa mucho? solo quiero ver los diseños- ella hizo una mueca y yo alcé mis cejas

-Claro, pase por aquí- ella comenzó a caminar hacia los pasillos donde se veían los vestidos colgados con los nombres de los diseñadores arriba.

Yo no conocía mucho sobre los diseñadores, tal vez Mali supiera más de esto que yo pero realmente todos parecían ser hermosos. Me detuve y comencé a revisar algunos que se veían amplios del tul, se me fue el aliento al notar los pequeños detalles y el escote de uno.

-¿Podría mostrarme este?- le pregunté a la mujer, ella hizo una pequeña mueca y sonrió

-Ese vestido cuesta treinta mil dólares- me quedé quieta, mi cuerpo comenzó a temblar y quería pegarle en la cara ante la cara que cientos de personas me dieron durante toda mi vida. Lástima.

-No es lo que le pregunté- espeté mientras acomodaba mi bolso- le dije que quería ver este vestido para probarmelo- cerré mis manos en puño y comencé a negar- olvidelo, tal parece que en esta tienda son un montón de clasistas

Comencé a caminar hacia la salida sintiendo la ira llenar mi cuerpo, estaba apunto de salir cuando un hombre se puso en frente de mi obstruyendo mi camino

-De hecho, voy a necesitar que me enseñe el interior de su bolso para que pueda salir- dijo el hombre, él me miró de arriba abajo y yo me giré hacia la mujer, ella me miraba con molestia

-¿Están insinuando que me robé algo?- espeté incrédula, ella no movió ni un músculo y yo reí con amargura mientras quitaba el bolso de mi hombro y tire el interior en el suelo frente a mi- Ahí tiene, ¿Qué más tiene que ver, mis calzones para que corrobore que no tomé nada de aquí?

-Sandy llama a la policía- dijo la mujer a una de las empleadas- y cierren la tienda, nadie entra o sale hasta que no revisen a esta señorita

A este punto no estaba asustada, estaba increíblemente furiosa, alcé mi vista en dirección hacia donde se supone que debía venir Mali pero no había rastro de ella. Saqué mi celular y comencé a marcar su número, el hombre frente a mi intentó quitármelo pero me hice a un lado

-No te atrevas a tocarme- le dije dando un manotazo a la suya- sí alguno de ustedes me pone una mano encima voy a demandarlos- él se hizo para atrás y yo miré a la mujer, ella comenzó a caminar hacia donde estaban los anillos y tocados. Marqué el número de Mali, ella contestó a los pocos segundos

-Jeanny, voy en seguida, me quieren poner una multa y estoy intentando negociar con el racista frente a mi- puse los ojos en blanco, tal vez hoy no era nuestro día

-Mali, me están acusando de robo...- hubo un silencio en la línea, creí que se había cortado la llamada hasta que volví a escucharla

-Voy enseguida- se cortó la llamada y la puerta se abrió dejandome ver a un par de oficiales, un hombre y una mujer.

-¿Qué pasa aquí?- preguntó el hombre viendo mis cosas en el suelo, la mujer llegó rápidamente a su lado y comenzó a hablarle

-Mis cámaras grabaron cuando esta chica se robó un anillo- abrí mis labios con sorpresa ante su fingido tono de molestia- no está en su bolso pero sospecho que puede traerlo entre su ropa, yo lo sé, lo tiene ella.

-Eso es ridículo, ¿Para qué quiero un anillo de compromiso sí ya tengo uno?- alcé mi mano dejando a la vista mi anillo, ella miró con una ceja en alto

-¿Por qué otra razón estarías aquí? No creo que tengas el dinero suficiente como para pagar algo de esta tienda- apreté mis manos en puño y la oficial se me acercó

-Señorita, tendremos que revisarla- apreté mis dientes y asentí.

Solo quería que terminara, comenzamos a caminar hacia los probadores y el oficial comenzó a revisar las cosas que estaban en el suelo. Al entrar a los probadores la oficial me indicó que comenzara a desvestirme.

Sentí furia, vergüenza, era como sí nuevamente me estuvieran violando. Sentí ganas de llorar, pero me tragué las lágrimas, no les daría el gusto. Ya sin mi ropa la oficial comenzó a revisar mi ropa mientras que yo sentía mi piel erizarse ante la idea de que esto llegara a oídos de mi familia o de Calum.

-No puede pasar, disculpe...- la cortina se abrió y yo tapé mi cuerpo lo más que pude.

-Vaya, esto si que es excesivo- articuló Mali mientras tomaba fotos de la oficial con mi ropa, volteó a verme- cambiate Jeanny, estas personas van a tener muchos problemas

-¿Quién se cree que es para entrar así en mi tienda?- llegó la mujer con sus mejillas rojas de furia, Mali la miró con una mirada tan letal que solo había visto en Calum, esa misma mirada que le dio a Harold Hunter cuando le confesó que él había pagado para que me lastimaran

-Soy la cuñada de Jeannette Clifford- me apuntó con su dedo, la mujer pareció un poco desconcertada- Jeannette Clifford, prometida de Calum Hood... Hijo de los señores David y Joe Hood, dueños de la mayor línea de joyería y oro- Mali se acercó amenazante hacia ella- también hija y heredera de una de las más reconocidas bienes raíces de Estados Unidos y Europa, y una potencial demandante por acoso y violación a la moral