Calum intentaba ignorar el fastidioso olor a antiséptico en el aire, su pierna se movía con ferocidad ante la ansiedad pero sin nadie esta vez que pudiera darle un apretón para que pensara en alguna otra cosa que no fuera en el hecho de que Annie ahora estaba en peligro junto con sus hijas.
-Puede pasar- no dejó que dijera nada más antes de que su cuerpo se levantara con estruendo y caminara a través de los pasillos del hospital. Mismo hospital donde había enfermado su Nana.
Detente, Ella estará bien. Tenía qué estarlo o de lo contrario estaría perdido.
Intentó hacerlo lo más rápido posible cuando vio la sangre saliendo por los pantalones de Annie, ella había empezado a sollozar hasta que finalmente se desmayó a mitad del camino hacia el hospital. Ella no llevaba su inhalador, podría darle un ataque al corazón y él no tendría forma de ayudarla.
-¿Se pondrá bien?- le habría preguntado al doctor en cuanto él empezó a dar instrucciones a sus compañeros médicos. Él simplemente le dedicó una mueca antes de pasar a urgencias y que lo dejaran a él esperando con un nudo en el pecho.
Al llegar a la habitación sus manos ya estaban al borde del colapso junto con sus piernas. Dudó solo un segundo antes de abrir la puerta, no se había percatado que el enfermero detrás de él lo veía impaciente. Finalmente adentro miró a Annie ya despierta con una intravenosa en su mano izquierda mientras que el médico seguía escribiendo en su tableta, el aire salió de sus pulmones mientras sintió sus ojos llenarse de lágrimas traicioneras
-Pase- lo animó el enfermero detrás de su cuerpo y asintió sin decir nada. Sus pasos fueron torpes mientras caminaba hacia ella.
Annie lo miró con serenidad y una pequeña sonrisa triste salió de sus labios. Cuando él llegó a su lado le tendió su mano y la estrechó fuerte contra la suya.
-Estamos en una cuerda floja, Jeannette- dijo el médico y él volteó a verlo con atención- estuviste no solo apunto de perder el embarazo, pudiste perder la vida tú también
Annie pasó la mano con la intravenosa por su vientre mientras un escalofrío pasaba por todo su cuerpo. Calum lo sintió y pasó su mano por su mejilla sintiendo cómo una cálida lágrima cayó por su mejilla ante el toque.
-¿Qué debemos hacer?- a pesar de que su cuerpo entero estaba temblando su voz no dudó al hablar
-Mantendremos a Annie en observación por un par de días y después podrá ir a casa, pero tendrá qué pasar el resto del embarazo en cama y lo más seguro es que no haya posibilidad de un parto natural- él les dedicó una mirada severa antes de que ambos asintieran con la cabeza- de acuerdo, porque por los dos días no podrá tener visitas
Con eso se fue dejándolos en un profundo silencio antes de que los sollozos de Annie comenzaran a escucharse por la habitación
-No... No Annie- susurró contra sus mejillas mientras ella intentaba respirar con normalidad- recuerda que tienes que estar tranquila- ella asintió y él besó su frente
-Tal parece que casi no la libro- una risa nerviosa salió de sus labios mientras miraba un punto fijo en la nada
-¿Qué pasa?- le preguntó y ella negó levemente con la cabeza
-Hubieron tantas veces en las que...- se quedó en silencio por un momento- hubieron tantas veces en las que yo sentí que sería mejor sí muriera, tantas veces en las que decidí correr lo suficiente como para poder asfixiarme y morir por no tener el inhalador... Y ahora que estuve a punto de morir me sentí tan aterrada- ella lo miró y él se sintió desfallecer por el dolor en sus ojos
-lo siento mucho, Annie- dijo apenas audible, ella negó y se aferró al agarre de su mano
-Esto no es culpa tuya ni mía- Calum no pudo evitarlo y las lágrimas comenzaron a salir de sus ojos- la persona que estuvo detrás de cada mala experiencia aquí en Londres es Jackeline- Annie comenzó a limpiar los rastros de las lágrimas en sus mejillas y él se recostó en su pecho
-Pude ver cuando le quebraste la nariz... Es una imagen demasiado sexy en mi cabeza- ella rió levemente y él no pudo evitar sonreír
-Necesito quitar de mis manos la sensación de su sangre en mi mano- Calum alzó la vista hacia ella y tomó su mano para dar un beso en esta. El color subió a sus mejillas- creo que eso es suficiente
Pasaron los minutos así, él recostado en su pecho mientras compartían respiraciones, besos silenciosos y pequeñas caricias hasta que ambos se sumieron en un profundo sueño.
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-¿Se puede?- la puerta se abrió y mis ojos se abrieron de golpe al notar la pequeña bola de pelos en los brazos de Kendra.
-¿Kendra?- ella sonrió y entró a la habitación dejando a Duke en la cama. Este corrió hacia mí olfateandome y dando pequeñas lamidas en mis mejillas
-¿Qué hacen aquí?- Kendra, con su habitual uniforme comenzó a acomodar mis cojines con sus ojos cristalizados mientras veía mi barriga abultada
-Quería que te sintieras más en casa- Calum pasó por el umbral de la habitación, con sus pantalones de mezclilla y camisetas que habían sustituído a los trajes por la última semana en que él había decidido dejar el trabajo
-Me merezco unas vacaciones así como también merezco pasar tiempo con mis chicas especiales- había dicho una mañana cuando lo descubrí aún recostado a mi lado en lugar de estar alistandose para ir a trabajar.
Capturé de nuevo la mirada de Kendra, ella no me había visto en todo mi tiempo de embarazo así cómo Duke o cualquier otro trabajador en la casa de Nueva York. Muchos se llevarían la sorpresa al vernos regresar con ambas niñas. Le estiré mi mano y ella la aceptó dudosa, cuando su mano tocó mi vientre ella sonrió al sentir cómo dentro de mi Marie y Artemis hacían su propia fiesta.
-¿Me dejaran cuidarlas también?- había anhelo en su voz
-Claro que si, necesitaremos el doble de ayuda- le respondí y ella dió una suave caricia antes de seguir con su trabajo de acomodar el montón de cojines en mi espalda
Sentí el peso de Calum a mi lado y Duke se acurrucó en mi de modo que quedó a la altura de mi vientre. Él se alzó de golpe cuando sintió o tal vez escuchó algo dentro y comenzó a olerme nuevamente. Mordí mi labio inferior antes de pasar mi mano por su pelaje, Duke relamió sus labios antes de volver a acomodarse en su lugar
-Eso ha ido bien- dijo Calum y yo reí
-Espero les tenga un poco de paciencia

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OJOS DE UN ÁNGEL (Calum Hood)
FanficLa historia de Annie la conocemos, ¿Pero y Calum? Nuestros protagonistas en labios rojos están de vuelta para que seamos participes de una nueva etapa en su relación, pero antes que cualquier otra cosa suceda el pasado de él regresa para poner su a...