Yo soy amor de verdad

CAPÍTULO 1

Me acabo de despertar y ya tengo diez mil llamadas en el teléfono. Comienzo a mirar y veo que es Rose a lo que devuelvo la llamada

—Hola Rose, ¿Qué pasa?

—Hola Glow, perdóname ¿Te desperté?— dijo entre risas

—Que tarada eres— dije riéndonos al unísono —¿Qué es lo que pasa?—

—Gloria acaban de llamar de Televisa, quieren que vayas y hablen acerca de un contrato, la cita es el miércoles— dijo emocionada

—¿Un contrato?— dije confundida —Okey, avísame y vienes conmigo— dije un poco seria, ya que no entendía bien que pasaba.

Luego de tontear un rato en el teléfono, me levanté de la cama, desayune algo rápido, me alisté y salí para el estudio; debíamos ensayar con los chicos, el inicio de gira se aproximaba y debíamos terminar coreografías y asuntos de sonido.

El ensayo estuvo rápido, mañana tendría que ir a la Ciudad de México a hablar con los de Televisa, esto me mantenía un poco pensativa, aunque no me disgustaba, quería cambiar de aires y si esta era la manera, no estaba mal.

 México

Luego de un no tan largo viaje, me encontraba aquí en mi hermosa capirucha, la reunión era en dos horas, a Rose la encontraría en el Hotel así que todo estaba bien.

Llegué al hotel, me encontré con Rose y fuimos a almorzar, en el restaurante me tope con un grupo pequeño de fans nos tomamos fotos y luego de mil besos y abrazos salimos del lugar. ¡Como los amo!

Nos encontrábamos en una pequeña sala de juntas, luego de unos minutos empezaron a hablar

—Gloria, queremos tu participación en un programa de talento, como coach esta vez— siguieron hablando y explicando las dinámicas hasta que después me preguntaron si aceptaría.

No lo pensé y en unos segundos contesté, soy un poco impulsiva y la idea me agradaba —Claro, donde firmo— Luego de un largo papeleo, me empezaron a explicar fechas y demás y me contaron quienes serian mis compañeros: Alejandro Sanz, Los tigres del Norte y J Balvin. Este ultimo me había quedado sonando, sabía quien era pero no había tenido la oportunidad de conocerlo en persona, había escuchado su música y me parecía buena, pero nada más.

Según los productores la convocatoria para el programa habían iniciado hace más de un mes, por lo que las grabaciones y todo el equipo debíamos estar reunidos en la ciudad en dos semanas.

Luego de platicas y más platicas salimos de allí, me dirigí al hotel sola, ya que Rose se había ido a caminar por la ciudad, no me molestaba quería un tiempo para mí. Las cosas con Armando iban mejorando un poco aunque no del todo, su indiferencia ya no me molestaba, me fastidiaba y al decirle y enfrentarlo por ello lo único que respondía era un vago "Te prometo que cambiaré", y yo, aceptaba eso.

Cuando llegué al hotel cené con Rose un chocolate caliente y dos rebanadas de pan, luego subí a mi habitación y me recosté en la cama ya que me sentía un poco exhausta, al siguiente día quería volver a McAllen a casa con los chicos.

McAllen

Al llegar a casa Lola me saluda con emoción, Miguel se encuentra en casa por lo que jugamos algunos videojuegos y al anochecer esperamos la llegada de Ángel mientras horneamos algunos cupcakes de una receta que vimos en internet. Sin duda pasar tiempo de calidad con mis hijos es lo que me llena en la vida.

En las siguientes semanas sigue el arduo trabajo en los ensayos, entre más pasa el tiempo, mayor es la exigencia tanto de los bailarines como mía. Los shows debían salir perfectos por lo que los ensayos iniciaban muy temprano y terminaban a altas horas de la noche.

Dos semanas después

Las grabaciones del programa inician hoy y me siento muy emocionada ya que podre compartir con mis nuevos compañeros de trabajo e incluso conocer a algunos de ellos.Llegamos al estudio y todos nos saludamos

—Hola bella, ¿Cómo estás?— Me saludó Jorge, vocalista de los tigres, seguido de sus otros compañeros

—Hola chicos, ¿Cómo les ha ido?- Les di un beso a cada uno, luego vino Alejandro e hice lo mismo y por ultimo, detrás de todos estaba él,  joven, alto, delgado, se me hizo guapísimo, pero lo normal, ¿no?

—Hola, soy Gloria— dije con alegría

—Un gusto Gloria, José —estrechamos nuestras manos y él se acercó un poco indicando involuntariamente que nos fuéramos un beso en la mejilla, sonreí y fui a mi lugar.

Después de unos minutos de platicas y bromas desde nuestros sillones iniciamos las grabaciones, siguieron las risas hasta que por fin habíamos terminado el día.

Estaba a punto de salir de mi camerino para volver al hotel, cuando  alguien tocó la puerta

—¿Puedo pasar? —Preguntó una voz conocida, era José 

—¡Pasa! —Exclame en un mini chillido, se me hizo algo extraño, sin embargo algo dentro de mi quería conocerlo  

—¿Ya vas a salir? —Preguntó con una expresión alegre en su rostro

—Sí, estoy un poco exhausta —dije soltando un suspiro luego de una pequeña sonrisa

—Okey, te llevo al hotel —Respondió con una sonrisa en el rostro, me confundí y en mi rostro se notó la confusión que me generó pues no había preguntado, estaba exclamando que iba a llevar al hotel

—Claro, voy contigo entonces —Solté una risa al final, él simplemente arqueo una ceja.

Luego de unos minutos ya estábamos cerca del hotel, en el auto no habíamos cruzado palabra, llevábamos música un poco alto debido al tráfico, cuando de repente dijo

—Sabes que, primero vamos a ir a comer y luego te llevaré al hotel ¿Te parece? —miró mis ojos con una gran sonrisa, y en ese momento me fijé en lo guapo que era. Me sentía extraña, como una adolescente que se había escabullido para ir por ahí y salir con algun chico ¿Por qué siento esto? Si no es más que mi compañero de trabajo, mi mente intentaba arrebatarme el momento mostrando imágenes de mi marido, por lo que me quedé divagando en mis pensamientos si aquello contaría como algun tipo de ¿Infidelidad? pero no estaba haciendo nada malo, así que accedí 

—Este... Claro, entonces te acompaño—Dije devolviéndole la sonrisa.