||•Minho•||
Abrí mis ojos, sintiendo instantáneamente un fuerte dolor de cabeza.
- Demonios -insulté para mi mismo mientras me sentaba en la cama, haciendo mi mayor esfuerzo.
Mis ojos se cerraban solos, al parecer mi cuerpo no tenia tantas ganas de despertarse.
- ¡El desayuno! -recordé que debía llevarle a Jisung su bandeja con comida a la misma hora de siempre.
- shhh, no seas tan chillón, me duele la cabeza -Respondió una voz de forma lenta, parecía recién despertarse.
Entonces Minho observó todo más detalladamente. Estaba en la cama de su jefe, en boxers y acompañado de éste mismo, semidesnudo como él también lo estaba.
- ¡¿Qué me hiciste?! -interrogué con desespero levantándome de la cama de un solo golpe.
- No te hice nada, Minho.
- ¡Explícame porqué estoy solo en boxers y compartiendo la misma cama contigo!
- anoche estuvimos en el bar, idiota, nos emborrachamos y...
Se notó aturdido, tampoco parecía recordar mucho.
- ¿Y qué? -insistí.
Solamente pensar que había perdido su preciada virginidad, borracho y con su jefe, era totalmente desagradable.
- llegamos a casa, te desnudaste y también hice lo mismo porque tenia calor.
Gruñí molesto, no le creía nada de lo que decía, pero era creer o reventar ya que nadie más estaba para decir lo contrario.
- tranquilo, no soy del tipo que se emborracha y se aprovecha de los demás.
- está bien -Murmuré- Al menos la salida sirvió para despejarme.
- ¿no recuerdas nada de lo que pasó en el bar?
- no, solo recuerdo hasta... creo que hasta cuando me choqué con la puerta, ¿por qué preguntas? ¿Paso algo importante?
Jisung negó desilusionado.
- no, nada. ve a traerme el desayuno -Habló de forma frívola.
Fruncí el ceño al escucharlo más no acote nada sobre el tema y cumplí sus órdenes.
Me vestí, me peiné un poco y bajé al primer piso.
Rápidamente me dieron lo necesario y subi las escaleras para luego ir a la habitación de Jisung nuevamente.
Toqué la puerta y cuando me dijo que podía pasar, lo hice.
Se notaba serio, parecía molesto.
- ¿Quieres algo m-....
- no -Me interrumpió.
Levanté una ceja al escucharlo.
Bueno, quizás solo quería comer tranquilo.
- Los encargados de la cocina dijeron que como estabas a dieta sirvieron algo más liviano, pero si no estabas satisfecho podías decirles y sin problemas prepararian algo nue-...
- Está bien, ahora vete.
Iba a responderle pero recordé mi lugar.
Soy un simple sirviente, sin ningún tipo de valor especial en esta casa, vine por mi propia cuenta para obtener dinero, mi jefe es un desgraciado y si le respondía solo iba a recibir más golpes que antes.
Además no me sentía ofendido, sólo se estaba comportando como siempre.
Si me exigía demasiado, se metía conmigo o con mi familia, claro que le respondería, sin dudarlo.
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Jefe Han | Hanknow
De Todo- Desvístete. - ¡N-no haré eso! - Estás aquí sólo para recibir ordenes. en donde Minho no tiene trabajo y consigue uno como sirviente en la gran mansión Han. Aviso: En esta historia hay mucha diferencia de edad y maltratos. si sos débil con ese tema...
