||•Jisung•||
Suspiré al ver como Minho se iba de la habitación.
No pensaba que iba a ser tan difícil de tener sexo con él. En dos días ya tendría que haber cogido con él más de siete veces y lo único que conseguí fue un oral mal hecho.
Me recosté en su cama y miré alrededor.
No había decorado su habitación, seguía igual de apagada como cuando se la entregué.
¿Qué debía hacer para que me perdone? Creo que ya se que hacer.
(...)
Avisé a los empleados encargados de la cocina que no preparen mi almuerzo ya que no estaría en casa esta tarde.
Ahora mismo me encontraba en una tienda comprando un reloj muy caro pero no tanto como el mío, para Minho como disculpa.
Decidí pasar a comprar una caja de chocolates de Ferrero Rocher, eran chocolates de calidad, muy ricos y caros.
Al llegar a mi casa bajé de el auto y me dirigí al interior de la anterior nombrada.
Los empleados hacían el aseo correspondiente en silencio como a mi me gustaba.
Subí en dirección a la habitación de Minho y di un par de toques en la puerta esperando a que abra.
||•Minho•||
- No te acerques a mi chico -Habló la muchacha de cabello castaño claro.
- ¿Te refieres a Jisung? No se si ustedes son algo pero si lo son mejor dile a él que deje de ir detrás mío porque es muy molesto -Suspiré.
La chica con la que me encontraba hablando era la empleada que se acostaba con Jisung.
- Si me sigues quitando a Jisung te aseguro que las cosas terminarán muy mal para ti niñito -Me miró con asco y se retiró del pasillo en dirección a quien sabe donde.
Que gente tan molesta que existe en esta casa.
En la tarde me avisaron que el "jefe han" había salido de compras y no volvería en algunas horas así que me sentí feliz de eso.
Me encerré en mi habitación y saqué mi celular.
Miré el número de teléfono que me había dado el jardinero y decidí llamarlo.
- ¿Hola? -se escuchó de la otra línea.
- Hola Bangchan, soy Minho, el nuevo empleado -sonreí a pesar de que el no podía verme
- Oh Minho, me alegro de volver a intercambiar palabras contigo. ¿El jefe te hizo algo más? Te juro que si te lastimó le daré una paliza sin importar que me deje sin trabajo.
Solté una leve risita amable al escuchar sus palabras.
- No hace falta, el no volvió a lastimarme -Me recosté en mi cama y seguimos hablando.
Pasamos horas y horas hablando. Chan era muy entretenido y me hacía reír constantemente con sus anécdotas.
- ¿Cuántos años tienes? -Pregunté.
- Yo tengo veintidós -Respondió- ¿Tu cuántos años tienes?
Me puse nervioso al escuchar la pregunta.
Nadie podía saber que mi edad verdadera era diecisiete.
- Y-yo igual -Tartamudeé un poco- ¿Cuando cumples años? Estoy seguro de que deberas llamarme hyung -Reí.
- Cumplo en octubre pero ni pienses que serás mi hyung -también soltó una risa- yo soy tu hyung.
- ¿en serio cumples en octubre? ¡yo igual! -La sonrisa se mantenía en mi rostro desde que comenzamos a hablar hasta ahora- pero es más que obvio que yo soy tu hyung sin saber la fecha exacta de tu cumpleaños.
- Tres de octubre, ¿Y tú?
- Diablos -Fingí "quejarme"- yo cumplo el veinticinco -hice un leve puchero.
- Soy tu hyung, respetame -Rió en la otra línea- oye, ya llevamos tres horas hablando por teléfono y no me haz dicho nada sobre tu familia.
Apreté mis labios con nerviosismo.
- Creo que no es el momento, mi familia... -Solté un suspiro y retomé mis palabras- Es muy grande -Mentí.
Todo se había quedado en silencio y yo esperaba su respuesta.
- ¡eso es lo que me dicen todas! -Levantó el tono de su voz para luego reír a carcajadas.
No pude resistirme y terminé riendo también.
- Eres un tonto bang-... -La puerta de mi habitación siendo abierta me interrumpió.
||•Jisung•||
Minho no abría la puerta. Escuché su risa y supuse que estaba hablando con alguien.
Entre a su habitación sin permiso y vi que estaba hablando por teléfono.
- ¿Con quién hablas tan felizmente? -Hablé con seriedad parado a los pies de su cama.
- llegó mi fastidioso jefe. Te llamo luego "Hyung" -Se despidió de ese chico con una sonrisa y la cambió cuando dirigió su mirada hacia mi- ¿No te enseñaron a esperar? Estaba ocupado.
- Minho, no quiero discutir contigo, solo quiero pedirte disculpas -Me senté en la orilla de la cama- te traje esto -Le dejé la caja de chocolates y la caja en la que venía el reloj justo a su lado.
Noté la mirada que le dio a mis regalos para luego dirigirla a mi de nuevo.
- Jisung, a mi no me vas a comprar con un par de chocolates y lo que sea eso -señaló con su vista en empaque de el reloj- Mejor dale eso a tu novia -se levantó de la cama.
¿Mi novia? No entiendo de qué me estaba hablando.
- No tengo novia -Hablé levantándome de la cama también para acercarme a él- no se de qué hablas.
- Jisung, esa chica dijo que me aleje de ti porque eras suyo -Soltó una risita burlona- al parecer no sabe que yo no quiero nisiquiera intercambiar palabras contigo.
- ¿Te refieres a Yuqi? Por Dios, nosotros solo somos amig-... -me interrumpió.
- Jisung, si vas a andar en algo serio con alguien al menos toma en cuenta los sentimientos que esa persona siente por ti -Habló con enojo- y tus regalos no me importan ni un poco. Con mi pago mensual puedo comprarme lo que a mi me gusta y quiero pero con mi propio dinero sin depender de alguien que cree que puede comprar mi perdón con cosas inútiles.
Sin duda endulzar un poco sus oídos y darle un par de regalos no iba a ser suficiente para tenerlo en mi cama por unas horas.
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Jefe Han | Hanknow
Acak- Desvístete. - ¡N-no haré eso! - Estás aquí sólo para recibir ordenes. en donde Minho no tiene trabajo y consigue uno como sirviente en la gran mansión Han. Aviso: En esta historia hay mucha diferencia de edad y maltratos. si sos débil con ese tema...
