Morgan H. Stark, después de 18 años no podía seguir escuchando solamente las historias de su padre. Decide hacer algo para recuperar todo el tiempo perdido, pero el objetivo se complica cuando conoce a quien podría ser el amor de su vida, y otras pe...
Peter: —Hey, Morgan, woah te ves muy bonita— Una tímida voz con una suave sonrisa.
Morgan: Arrugué mi nariz y sonreí. —Hey Pet, gracias corazón, también tú— Bebí un poco de mi trago.
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Peter: —Gra-Gracias— Dijo nervioso.
Morgan: —Como vas con aquella chica que me dijiste la otra vez, MJ no?—
Peter: —Uhm sí, no le he dicho nada aún— Dijo alterado y triste.
Morgan: —Deberías hacerlo—
En la actualidad pude recordar que Peter estaba soltero dado que había perdido a la chica que le gustaba por poco jugado. Me aseguraría que no le volviera a pasar.
Peter: —Sí lo sé, solo estoy buscando el momento indicado, ¿tienes algún consejo? digo una dama tan bonita como tú, o sea hermosa digo... — Se puso nervioso y yo sonreí. —Me refiero a que debes tener a muchos chicos conquistándote entonces que es lo que te llama la atención—
Morgan: —No tantos cómo crees pero, yo creo que deberías ser tú mismo Peter— Sonreí.
Peter: —Tal vez no alcancé con eso, te gustaría alguien como yo? Torpe y nervioso— En la actualidad Peter me llamaba mucho la atención.
Morgan: —Ahora no, porque me gusta otra persona— Reí. —Pero sí, eres una persona muy tierna y dedicada además muy inteligente— Bajo la mirada avergonzado. Pensé unos segundos. —Qué te parece si la invitas a pasar unos días en Miami? Tony te invito no?—
Peter: —Oh sí, pero no quiero aprovecharme del señor Stark— Sonrió tímido.
Morgan: —De eso yo me ocupo, tu invítala—
Pasamos el tiempo, bailando, bebiendo, Tony cada un segundo subía al escenario a pegarse un momento del cual mañana estaría muy arrepentido, Pepper lo bajaba a cada rato. Mientras yo bailaba con Thor, bueno básicamente dábamos pasos al azar porque cual de los dos bailaba peor. En un momento ya agotados riendo nos fuimos a sentar.
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