Camisetas Mojadas

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Lauren abrió la puerta principal con su llave y permitió que Camila entrara a la casa.
Lo primero que Camila notó era que todo estaba en silencio. Muy silencioso.

—¿Donde está todo el mundo?—Preguntó.

La ojiverde cerró la puerta principal detrás de si y arrojó su mochila cerca de un sofá.

—Umm...Taylor y Chris mencionaron ir a la casa de un amigo después de la escuela, papá está trabajando y mamá probablemente salió a hacer compras.

—Oh...

Camila asintió tranquilamente, pero por dentro de repente se sintió nerviosa. En realidad, nunca había estado con Lauren, a solas.

Siempre había alguien más alrededor. Y con Lauren actuando de manera tan diferente, no sabia que esperar.

—¿Quieres tomar algo?—Preguntó Lauren.

—Si, agua está bien.

Lauren asintió y se dirigió a la cocina.

—Puedes ver la televisión mientras tanto, si quieres.—dijo por encima del hombro.

Dinah estaría orgullosa de ella.

Al menos estaba tratando de ser hospitalaria con Camila. De hecho, había sido agradable hablar con la castaña y aprender algo nuevo sobre ella. Aunque a Lauren se le hizo un nudo en el estómago todo el tiempo y Camila se veía completamente confundida...había sido agradable. Esto hizo que la ojiverde pensara en lo que le había dicho Camila en la heladería la semana pasada.

¿Y si hubiera hablado con la castaña en lugar de acosarla? ¿Serían amigas hoy? ¿Estarían saliendo?

Ella nunca lo sabría y eso era culpa suya.

Este era el resultado de que ella fuera una cobarde. Lauren negó con la cabeza, avergonzada de sus fechorías pasadas hacia Camila. Al darse cuenta de que había estado mirando el refrigerador durante casi dos minutos seguidos, Lauren lo abrió rápidamente y tomó una botella de agua. Cuando llegó al pasillo no vio a Camila parada allí.

Fue en dirección a la sala y nada.

Ninguna señal de Camila.

¿Se había ido la castaña porque estaba tan asustada por la actitud de Lauren hacia ella?

De repente, se escuchó un fuerte ruido.

BOOM

—¡Lauren! ¡Lauren! ¡Ayuda! ¡Deprisa!

Escuchó a Camila gritar.

—¡¿Camila?! ¡¿Dónde estás ?!—Lauren gritó en respuesta, tratando de determinar de donde provenía la voz de Camila.

—¡En el baño! ¡Ven rápido!

Lauren tiró la botella de agua que tenía en la mano y corrió por el pasillo, llegando a la puerta abierta del baño.

Sus ojos se agrandaron ante lo que vio.

—¡Whoa!

Había una fuente de agua, brotando del lavabo del baño. Camila ya estaba empapada de la cabeza a los pies, luchando contra la imperdonable presión del agua. Lauren entró rápidamente al baño.

—¡No puedo detenerlo!—Camila exclamó, desesperada.

—¡Lo tengo! ¡Lo tengo!—Lauren gritó, apresurándose a ayudarla.

Camila retiró las manos de la tubería y Lauren se hizo cargo, intentando apretar los tubos.

Sin embargo, el agua no se detenía, seguía saliendo a chorros.

Bully in Love (Camren) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora