Una historia donde bakugou le expresa abiertamente a kirishima que no sabe como se siente. Siendo el resultado de el concepto erróneo que tiene del amor.
()Los personajes le pertenecen a Horikoshi.
()Esta historia es de mi total autoría
()No se p...
Antes que nada me gustaría dedicarle este hermoso capítulo a Hiro0707 por su cumpleaños. Felicidades mi vida♡
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Estaban en la cafetería, en la hora de merienda, Sero no se ha despegado un minuto de Bakugou y Shoto parece un chicle mal pegado en una butaca en el bakusquad.
-- Venga bro, ¡solo dame de tu comida! --
-- ¡Que te dije que no crema colgate! ¡Déjame comer! --
-- Bakugou, tu comida se está enfriando... ¿la caliento? -- señalando la comida del rubio.
--.... solo un poco... -- dijo con un disimulado y diminuto puchero. Eso descolocó a Sero y a Midoriya que no estaba tan lejos quejándose de como el rival a muerte del explosivo se podía sentar como si nada a su lado y él no.
De un momento a otro salió Eijirou haciendo aparición de una cajita pequeña envuelta en papel rojo. Sentándose al frente de Bakugou deslizó la caja y este la atrapó mirándolo a los ojos tratando de adivinar el pensamiento del pelirrojo. Dejó su comida calentando y abrió la envoltura.
-- Hijo de puta.. -- susurro con media sonrisa que solo 4 personas pudieron degustar, 2 con satisfacción, una preocupada y otra alterada.
Chocolates de jengibre, nadie sabía el gusto de Katsuki por los dulces pero que supiera su gusto por el dulce picante era inesperado.
-- No existen los dulces picantes pero... se que el jengibre da ese picor que a ti te encantaría, ¿me equivoco? -- directo como Todoroki hablo el oji-rojo.
Todos fijaron su atención en el cenizo, el cual sin decir palabra destapó la caja para hincarle el diente, pero fue interrumpido por una mano atrevida que le arrebató la caja dejándolo sosteniendo nada en el aire.
-- ¿De verdad te gustan estas cosas blasty? --
-- ¡Dame eso maldito cara de suape! -- Bakugou sin perder tiempo arremetió hacia el oji-negro con una mano tratando de sostener la caja con la otra.
Sero esquivaba mientras se burlaba de Katsuki y sus dulces a lo que Shoto y Eijirou los miraban atentamente, uno calentando la comida del cenizo y el otro reanimando en su cabeza la media sonrisa que el cenizo le dedicó.
-- No creo que sean delicioso bro, a parte si dijo que tienen jengibre van a saber salad- -- de pronto bakugou le explotó la cara tomando la caja y pateando el cuerpo atontado del molesto compañero de clases.
-- Si son deliciosos -- se llevó uno a la boca saboreandolo -- y no es salado, es picante -- y siguió comiendo sin reparar en las miradas que estaban sobre él. Solo una le importaba y esta estaba más que satisfecha.
-- Tengo buen gusto, ¿no Katsuki? --
-- Amm... Kirishima-Kun no creo que a kacchan le guste que- --
-- Puedo llamarte Katsuki, ¿no? -- el pelirrojo por un lado le miraba muy risueño y por el otro lado parecía que competía con una bestia.
-- Si digo que no, lo harías igualmente -- dijo sin prestarle un ápice de antencion, nadie le quitaba su concentración hacia los chocolates.
-- Correcto Katsuki --
Cada vez que decía Katsuki se sentía una casi imaginaria tensión en el aire, pues Izuku y Sero sabían que estába recalcando el hecho de que puede llamarlo por su nombre y no por un apodo o apellido.
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Mientras tanto un bicolor se preguntaba si podía llamar al cenizo Baku o comerse la comida que este se ofreció a calentar.
