-Enséñame a amar♡-

▪Flor de Cerezo▪

Ya llevaba un buen rato acostado en su cuarto, tenía los brazos vendados hasta su mano, ya no le dolía tanto como ayer, aún si no recuerda que pasó después. Solo sabe lo que le dijeron, se desmayó sobre Red Riot, lo llevó a la enfermería y en ningún momento lo soltó u dejó solo. Recovery girl le atendió, le vendó y Eijirou le trajo a su habitación, le cambió la vestimenta y lo acomodó. Nada más.

Pero aún se sentía pésimo, herir a alguien que quieres mucho -- Eso no es nada varonil, ¿cierto Kiri? -- susurró para si mismo con un brazo sobre sus ojos y otro en su abdomen.

"Debo agradecérselo" y con esa convicción se paró de su cama listo para ir a la sala común, ¿qué iba hacer? Lo mejor que sabe hacer... cocinar.

Ya estaba en la cocina pero no sabia que hacer realmente... comer pesado en el desayuno estaba bien pero, no carne por la mañana, así que... ¿qué mejor que prepararle el almuerzo?

Y se dispuso a hacerle Arroz blanco con carne de pollo guisada con un poco de picante, sin duda le gustaría, más aún porque le hechó la pechuga.

Lo guardó y esperó a que fuera la hora del almuerzo, no iba a tomar clases por sus brazos, no tenía la fuerza necesaria para dar un golpe así que prefería descansar para recuperarse por completo.

-- Oye bro, ¿sabes qué pasó con blasty? No lo vemos desde ayer y estoy preocupado -- habló Sero con el semblante un poco caído.

-- Tiene razón, también hizo falta el día de hoy, ¡lo extraño! -- Kaminari gritó con los brazos en la mesa tirando su cabeza, Don dramas le llaman.

-- No se preocupen chicos, el estará bien, igual anoche ya se encontraba mejor -- dijo el oji-rubí para calmar a sus amigos.

-- ¡Oye tú! -- un grito fue dirigido a ellos seguido de una cantina, la cual fue posada frente al pelirrojo.

-- Escúchame bien, no vine aquí en vano en mi día de descanso, o te lo comes o te lo comes -- le dijo bastante serio el ceniza, parado frente a todos llamando la atención, como siempre.

-- Esta bien, lo comeré, igual nunca dejaría que algo preparado por tus manos se desechara, no señor -- Eijirou dejó de comer su merienda y babeó al ver lo que contenía el envase.

Tomó bocado, que terminó en comérselo rápidamente sin darse un respiro, hasta a mí me dolía la mandíbula de verlo.

-- Oye más despacio, te vas a añugar --

-- No puedo evitarlo, tu me preparaste esto y eso ya lo hace especial, no puedo dejar de comerlo, eres un dios griego y no solo por tu belleza --

Los demás quedaron asombrados por sus palabras, incluso el mismo Bakugou, cuando el se acostumbraba un poco a la actitud de Kirishima, este subía más el nivel, siempre sorprendiendolo.

"Maldito carnívoro", fue lo que pensó antes de volver a tomar el camino de regreso, dándole una última mirada al pelirrojo atragantándose con su comida. 

Más tarde, todos estaban en sus habitaciones, el toque de queda había llegado y mañana tendrían otro ajetreado día y tenían que dormir, el pelirrojo estaba sentado en su cama hasta que un pedazo de papel se deslizó debajo de su puerta. Algo sospechoso si me lo preguntan.

Con cuidado se acercó, temiendo que fuera alguna broma de sus amigos como la vez que le tiraron una carta por debajo y al otro lado tenía una araña pegada, jodido susto más grande se llevó y desde entonces no confía en papeles deslizantes.

Estaba perfectamente doblado aunque con algunos dobleces mal hechos notables, parecía que alguien se había desesperado doblándolo bien que se equivocó en ello.

Maldigo tu estúpido pelo de mierda,
Maldigo tu estúpida insistencia,
Maldigo también tu estúpida existencia,
Pero sobre todo maldigo que me protejas.

Maldigo tu sonrisa que me deja ciego,
Maldigo tu quirk que te acerca a mí,
Maldigo tu capacidad para enfrentarte a mí
Y maldigo lo protegido que me haces sentir.
Att: D.M

No se lo esperaba, definitivamente no se lo esperaba, quería gritar pero era muy noche para ello, dejó la carta y se hecho en su cama, agarró su almohada y se desahogó.

Y definitivamente no había un Katsuki pegado de la pared de su cuarto sonrojado pero feliz de que su mensaje haya llegado y provocado una reacción que lo dejara satisfecho.

🌟730 palabras🌟

Ya era hora de que sacara cap, me siento mal cada vez que lo subo equivocado o con retraso, pero hago lo mejor que puedo gente, todo por mi y por ustedes.

Ya era momento de que nuestro rubio favorito diera un poco de su amor, aunque sea disfrazado, pero directo. Nunca había hecho un poema literalmente con maldiciones pero creo que no me quedó tan mal.

Reitero que cada uno de los poemas que están en este fic, son creador por mi, porfa no robar, sobretodo los hago para que ustedes los disfruten.