Lazo de Amor (MiChaeng)

3

—¿Cha-Chaeyoung?—Susurró después de volver a la realidad. Ya no era Chaeng o Chaengie ahora era Chaeyoung simplemente.
Con cuidado la alejó de su cuerpo hasta separarla completamente y así asegurarse que en realidad era ella.

—Mina...—Sonrío Chaeyoung al contemplarla frente a sus ojos. Tantos años había soñado con momento y al fin, al fin estaba sucediendo.—Como es que... Tu... Wow... Estás hermosa.—dijo con el corazón acelerado. La emoción y ganas de abrazarla de nuevo eran enormes y lo iba a volver a hacer de no ser porque una voz detras de ella la hizo detenerse.

—¡Mami, Mami!.—La voz que una pequeña niña hizo que Mina desviara su mirada de la coreana y mirara a la pequeña personita que se llegó a toda prisa hasta ella aferrándose a sus dos piernas.—Mami te etlañé.—Pronunció la pequeña Levantando la mirada hacia su madre. Chaeyoung simplemente se había quedado estática observado a las dos. Aún no terminaba de creer que Mina estaba frente a ella y ahora eso...

—Hola bebé.—Entre sus brazos Mina la cargo.—¿Como estas?—Jugueteó con su pequeña nariz.

—Hola Mina.—Una chica llegó después de la pequeña.

—Hola hermanita.—Saludó una segunda mujer. Ambas chicas recién llegadas eran preciosas, una castaña y la otra con el cabello plateado.

—¿Tu eles la doctola que eta culando a mi mamá Siyeon?—Preguntó la pequeña Miyeon a Chaeyoung sacándola de su trance.

—¿Yo?—La niña asintió—N-No pequeña.—Apenas Respondió. "Mi mamá Siyeon" se repitió en la mente de la coreana.  La pequeña era preciosa, sin dudas Mina era su mamá. Entonces cayó en cuenta de la situación de Mina.—Yo... Yo atiendo a otros pacientes.—Un dolor en su pecho se extendió por todos lados. Un nudo subió hasta su garganta.

—Eh... chicas.—Mina habló llamando la atención de las demás—Ella es Chaeyoung una conocida.—La señaló un poco nerviosa—Chaeyoung ella es mi cuñada Yoohyeon, mi hermana Sana y mi hija Miyeon.—Las presentó a todas. Chae tragó. Así no había sido el momento que ella soñaba encontrar a Mina.

—H-Hola. ¿Qué tal.—Pudo decir Chaeyoung con un nudo en la garganta fingiendo estar bien,pero por dentro su alma se estrujaba.

—Hola, mucho gusto.—Saludó Yoohyeon estrechando su mano.

—Hola. Eres doctora, ¿verdad?—Preguntó Sana al verla con su bata blanca también estrechando su mano.

—Así es. Estoy en el área de pediatría.—Dijo tratando de sonar  normal, cuando sus ganas de llorar eran enormes.

—Mina, ¿nos vamos?.—habló Yoohyeon mirándola.—El tiempo está corriendo.—

—¿Mina podemos hablar un momento?—Rápidamente dijo Chaeyoung antes que Mina respondiera a su cuñada.

—Eh... yo...—Mina se puso nerviosa. No sabía que hacer. Era un mal momento para reencontrarse con la persona que pensó jamás volver a ver.—Mmmm creo que si.—Finalmente dijo. Las dos chicas recién llegadas se miraron entre sí, por el extraño comportamiento de la japonesa.
—Chicas adelántense, ahora estoy con ustedes. Hija ve con tus tías a ver a mamá.—dijo entregando a la pequeña en los brazos de Yoohyeon.

—Nos vemos Chaeyoung.—Se despidieron ambas chicas junto a la pequeña niña que con la mano se despidió de Mina y de ella.

—Dime que es una broma todo lo que acabo de oír.—Dijo Chaeyoung cuando las mujeres estuvieron lejos. Sus ojos estaban a punto de derramar lágrimas.

—Yo... No. No es ninguna broma.—

—¿Pero como?—Una lágrima se escapó y luego otra. No le importó si sus colegas y personas la miraran.

—Chaeyoung ahora no puedo hablar, debo irme.—

—¿Tan rápido me olvidaste?—preguntó mientras se limpiaba las lágrimas rebeldes.

—Tu me obligaste a hacerlo.—La miró con dureza

—¿Eh? ¿De que hablas?—preguntó confundida.

—Adios Chaeyoung.—Aprovechando la Distracción de la coreana miró escapó a toda prisa se ella.

—¡Mina!—alzó la voz al reaccionar llamado la atención de todos en la sala de espera.—Lo siento.—Se disculpó con la gente. Quiso seguir a la japonesa, pero esta ya se había perdido entre los pasillos dejando a una Chaeyoung dolida y confundida, preguntándose que fue lo qué pasó con el amor de su vida, Como es que ahora estaba casada quizás y con una hija y por qué dijo que ella la había obligado a olvidarla.

Definitivamente Mina tenía que explicar muchas cosas...

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