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Al día siguiente Chaeyoung había desaparecido por completo. No hubo ni una sola llamada, ni mensaje para Mina, qué en su interior se negaba a aceptar la sorpresiva noticia que había recibido anteriormente, pero la desaparición de Chaeyoung durante el día le indicaban que las palabras de Tzuyu eran ciertas. "Chaeyoung estaría celebrado el embarazo de su novia." Se le pasó una y otra vez por la cabeza haciendo que pase un terrible y doloroso día. ¿Como pudo creer que Chaeyoung aún la amaba? ¿Como pudo ser tan idiota en creer en sus palabras?
Gracias al cielo que Siyeon se había llevado a Miyeon a visitar a "sus abuelos" si no tendría que explicar el porqué de su miserable estado. "Chaeyoung únicamente quería acostarse con ella". Aquello dolía, pero dolía más porque Mina aún la amaba y estaba dispuesta a dejar a Siyeon por ella. A Siyeon, ¡por todos los cielos! Una maravillosa mujer. Estaba dispuesta a abandonarla por una persona que solo le estaba viendo la cara de estupida.

La Llamada de Chayeoung llegó al siguiente día, sin que Mina lo separara. Su teléfono sonó sobre la mesa de noche esa mañana gris ya que estaba nublado. A través de la pantalla Mina leyó el nombre "Hospital" y supo que era Chaeyoung, obviamente no iba a poner su nombre exacto, hospital fue lo único que se le había ese día para saber cuando la llamaba.

—¡Amor, tu teléfono está sonando!—Desde la ducha Siyeon gritó al oír el teléfono que seguía timbrando. Era la tercera llamada que estaba recibiendo y ella solo se había quedado mirando la pantalla perdida en sus pensamientos.—¡Amor!—La ducha se cerró.

—¡Ahí voy! Estaba afuera.—Mintió apagando su teléfono posteriormente salir de la cama y de la habitación. No estaba dispuesta a seguir oyendo mentiras.

El día que Chaeyoung se iría del país llegó. Mina no sabía si alegrarse o entristecerse, o quizá las dos cosas. Alegrarse porque así ella seguiría su vida con Siyeon como antes y entristecerse porque la extrañaría después de todo lo qué pasó esas semanas.
"Ojalá nunca hubieses aparecido." Murmuró dejando la taza de café sobre mediana isla que tenía en la cocina.

—¿Amor?—Siyeon la llamó por segunda vez desde el umbral de la puerta. La primera vez Mina no la había escuchado Gracias a que su mente estaba lejos de ahí.

—Eh..—Levantó la mirada hacia su novia sacudiendo un poco la cabeza. La chica la veía fijamente acercándose hasta el otro lado de la isla.

—¿Puedo saber por qué llevas un par de días sin usar tu anillo de compromiso?—preguntó haciendo que Mina entrara en pánico. Chayeoung no le había devuelto el anillo ese día gracias a su discusión con Sana. En su interior se maldijo y de paso maldijo el doble a la coreana por no acordarse en devolvérselo.

—Yo... eh... yo...—Balbuceó intentando encontrar alguna respuesta creíble.

—¿Acaso lo perdiste?—

—Me temo que si...—Mintió bajando la mirada a sus manos—Yo no recuerdo donde lo puse cuando limpié las plantas del balcón.—Escuchó que Siyeon suspiró antes de caminar hacia la cafetera detrás de ella. Ese anillo era muy especial ya que marcaba un paso importante para la relación de ambas y ahora le había dicho que lo perdió.

—Ojalá lo encuentres.—A su espalda dijo mientras abría el refrigerador. Mina sabía que el haberle dicho que perdió el anillo la había decepcionado e incluso enojado y tenía toda la razón.—Oye,—Siyeon volvió frente a ella con un vaso de jugo después de un momento encontrándola otra vez con la mirada perdida—Chaeyoung dice que vendrá a despedirse de Miyeon en una hora.—Agitó su teléfono.

—¿Ch-Chaeyoung?—Tragó

—Si.—Respondió con naturalidad ignorando lo que Mina sintió en ese momento.

Lazo de Amor (MiChaeng)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora