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—¿Como quieres que se llame nuestro bebé, amor?—Tzuyu le preguntó a Chaeyoung mientras dibujaba líneas sin sentido sobre su abdomen y mantenía recostada la cabeza sobre su pecho.

—Mmmm no lo sé.—Contestó ella mirando el techo. La verdad era que jamás se le cruzó eso por la cabeza, pero ahora que Tzuyu lo mencionaba, le gustó la idea de ponerle un nombre para así llamarlo de esa manera por las noches cuando le habla mientras Tzuyu duerme.

—Deberíamos pensar en dos nombres.—Mencionó la chica—Uno para niña y el otro para niño.—

—Cierto.—Concordó haciendo pequeñas caricias sobre el brazo de Tzuyu con sus dedos.

—Que te parece... Mmmmm... So Hee si es niña.—Emocionada Tzuyu dijo el nombre.

—¿So Hee?—La miró y Tzuyu igual levantando la mirada hacia ella.

—Si—Sus ojos brillaron al igual que su sonrisa—Como la actriz. Es que la amo.—Suspiró.—Chae río de ella. Era verdad, su novia amaba a esa actriz que hasta tenía fotos de ella en su teléfono.

—Mmm no está mal. ¿Y para niño?—Le preguntó

—Mmmmm—Pensó y pensó—Ya sé—Sus ojos se volvieron a iluminar mirando a su novia—Hae in o quizá Chang wook. Me gustan esos nombres.—

—Me gusta Chang Wook. Son Chang Wook. Suena genial.—Sonrió con emoción. De solo pensar en su bebé, su pobre corazón rebosaba de alegría y se llenaba de ilusión. No había deseo más grande para Chaeyoung en esos momentos que ver nacer a su hijo. Poderlo tener en sus brazos y besarlo como lo hizo con Miyeon. Su miedo más grande era no poder conocerlo.

—Bien. Está dicho. So Hee si es niña y Chang Wook si es niño.—

—Perfecto.—Tzuyu su torso abrazó mientras Chaeyoung la estrechó mas a ella y así las dos durmieron felices esa noche.

Afortunadamente el embarazo iba bien. Lo único que tenía que hacer Tzuyu era tener mucho reposo, una buena alimentación y no faltar a ninguna de sus citas médicas.

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SEÚL

—¡¡Mamá!!—Exclamó de pronto Miyeon en la sala. El corazón de Mina se detuvo al igual que su respiración cuando escuchó la puerta principal cerrarse.—¡Mamá, Mamá estás aquí!—Miyeon sonó emocionada, feliz y eso solo significaba una cosa.

—Hola mi bebé.—Y ahí estaba Siyeon, la única que podía emocionar tanto a su hija. Mina soltó el aire que estaba reteniendo mientras estaba sentada frente a la computadora en la oficina que ambas compartían.

—¿Donde estabas mamá?—Miyeon le preguntó. Mina se levantó del sillón y se asomó por la ventana con una cortina colgando. En la sala se encontraba Siyeon de rodillas frente a su hija sosteniendo sus pequeñas manos entre las suyas—¿Por qué no había venido a casa?—Su rostro tomó con sus dos manos—Yo te extrañé mucho...—Dijo la pequeña envolviendo su cuello con sus dos brazos.

—Y-Yo... yo también te extrañé—La japonesa observó como brotaron lágrimas de los ojos de Siyeon sobre el hombro de MiYeon.—Mucho mi amor...—Lloró la rubia estrechando a la pequeña en su pecho.—E-Es solo que t-tenia mucho trabajo en la clínica.—Mintió despegándose de ella para luego pasarse las manos en las mejillas para así limpiarse las lágrimas cuando se separaron.—Lo siento.—

Seis días.

Desde hace casi ya una semana es que Mina vio por última vez a Siyeon.

Casi una semana que desapareció.

Lazo de Amor (MiChaeng)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora