Estúpido, espontáneo y doloroso amor

Capítulo 43

<<Narra Aidan>>

Verla despertar estando en este contexto fue inexplicable.

Como arrugaba su diminuta nariz al dormir, es... ¡DIOS!

Ese día tenía planeado lugares donde ir, para ya sabes... aprovechar el tiempo.

Esta vez iríamos al acantilado conocido de Rumania a observar un monumento y pasar el día en el lugar.

Preparé el desayuno, mientras T/N se daba una ducha.

Estaba preocupado.

Me puse en el caso hipotético de que si T/N y yo dormiríamos todos estos días restantes juntos, no estaba seguro si podría contenerme, no se imaginan el esfuerzo que hice anoche, teniendola tan cerca de mí.

Suspiré.

Preparé unas tostadas, huevos y algo de café.

T/N salió con el cabello húmedo.

-¿Te ayudo a secarlo?-pregunté amablemente.

-Déjalo así-respondió dirigiéndose al desayuno.

-¡Gracias! Moría de hambre-agradeció.

Desayunamos tranquilamente.

Eran alrededor de las 10 de la mañana.

-Prepararé la merienda-dije, levantándome de mi asiento.

-¿Tan temprano?-dijiste extrañada.

-Haremos un tipo de picnic afuera-respondí.

-Oh, está bien, déjame ayudarte-ofreciste amablemente con la tostada en la boca.

-No es necesario-admití.

-Cocinemos juntos-insististe.

Acepté y comencé a sacar algunos vegetales, cuando siento tus brazos entrelazarse a mi cintura, formando un cálido abrazo.

Me giré y besé tu frente, que era en donde llegaban mis labios.

Suspiraste.

-No quiero que esto acabe-dijiste de pronto.

Acaricié tu cabello.

-No tiene porqué acabar-respondí seguro.

Ambos nos miramos con tristeza, supongo que... pensando en la idea de separarnos.

Cerraste tus ojos fuertemente y me abrazaste nuevamente con furia.

-No lo permitiré

-¿Queda claro?-completaste.

Reí.

Reíste.

-¿Me está amenazando señorita t/a?-dije con voz grave.

-Si-respondiste.

Tardamos alrededor de 45 minutos en preparar el picnic, preparamos sándwiches livianos y alguna que otra fruta.

Le aconsejé a T/N que usara calzado más cómodo.

Salimos del hostal y tomamos un Uber que pedí anteriormente.

Llegamos al cabo de 20-25 minutos.

-Woooow-dijiste sorprendida al ver la vista.

-Son 2 horas de caminata-desafié.

-¿Es chiste?-dijiste algo confundida.

-No-respondí sonriendo.

-Ah, claro... calzado "cómodo"