Capítulo 24

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<<Narra T/N>>

Jenna, como ya saben, no regresaba aún de sus vacaciones y realmente me sentía sola.

Ben no era una opción en este momento.

Tenía 2 horas libres y aproveché para ir a la biblioteca por unos libros, ya que se acercaban los exámenes finales.

Al salir de la biblioteca, me dirigí como siempre al ascensor.

Pulsé el botón y me coloqué los audífonos como de costumbre.

Solté un suspiro.

Las puertas se abrieron y para mi mala suerte, Aidan estaba dentro.


Pensé: 

¿Y si mejor bajo por las escaleras?

No espera, creerá que estoy molesta.

No quiero que sospeche.

MIERDA.

¿O finjo normalidad?


-T/N-dijo irrumpiendo mis pensamientos.

-¿Vas a bajar?-completó.

-Si, lo siento-dije, mientras me dirigía hacia el interior.


Hubo un silencio totalmente incómodo en ese momento.

Realmente sentía que el ascensor tardaba más de lo normal.


-T/N yo...-dijo, rompiendo el hielo

-¿Por qué fingiste que no me conocías?-completó.

-¿Habría cambiado algo?

-Decidiste irte sin más

-Te comportaste como si hubiera sido una completa desconocida para ti

-Creí que éramos amigos-completé alterada.

-Mierda T/N, tuve mis razones-contestó.

-No quiero hablar contigo

-¡MALDITO ASCENSOR DE PORQUERÍA!-maldije mientras apretaba los botones.


Las luces se apagaron y el ascensor se detuvo bruscamente.

Aidan evitó que me golpeara contra el suelo.


-¡MIERDA! Creí que esto solo pasaba en las películas-dije nerviosa

-Tranquila, llamemos por el botón de emergencias-dijo tranquilizándome

-Sé que tienes claustrofobia, lo solucionaremos rápido-dijo.


Comenzó a pulsar el botón de emergencias.

-¿Hola? ¿Hay alguien allí? El ascensor... dejó de funcionar y nos quedamos encerrados-dijo esperando una respuesta.

Yo no paraba de dar vueltas, realmente odio estar encerrada y para peor con el chico que me acababa de romper el corazón.

-Aidan, no es por nada, pero son las 7 PM, es Viernes... sabes que la seguridad aquí es una mierda, dudo que alguien venga a ayudarnos-contesté.

-Lo sé, pero al menos lo intenté...

Estúpido, espontáneo y doloroso amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora