Monstruo

222 17 1
                                    

POV Rukawa------

Cuando subiste las escaleras te encontraste al Sr Makoto frente a la puerta de Yumi, te acercaste justo cuando el rubio la abría con la cadena puesta, el padre de Yumi te hizo una señal de que te quedases al margen.

John - Hola suegro, a qué debo su visita

Makoto - Bueno pasaba por aqui...

John - Me encantaría que pasase pero su hija está descansando y claro...

El rubio estaba algo pálido y sudado, tartamudeaba y escondía la mayor parte de su cuerpo tras la puerta.

Makoto - Quiero ver a mi hija...

El hombre sonaba autoritario y notaste como le temblaba levemente el bigote, pero no bajaba su sonrisa.

John - Ya le he dicho que su hija no se encuentra bien...

El rubio fue a cerrar la puerta pero el hombre la mantuvo abierta y endureció el tomo.

Makoto - Muchacho...
John - Váyase! No de lo voy a repetir!

Rukawa - Aparta imbécil!

Te lanzaste contra la puerta con el hombro, la endeble cadena se partió y John cayó al suelo, notaste como un líquido caliente y espeso te salpicaba.

Rukawa - Que cojones? Sangre?!

El rubio estaba tirado en el suelo, tenía una enorme herida en el brazo y la camisa hecha jirones, te lanzaste a sacudirme del cuello de la camisa.

Rukawa - Tu!! Donde esta Yumi!!? Que le has hecho monstruo?!!

Golpeaste varias veces al rubio contra el suelo, torpemente intentó defenderse pero lo dejaste k.o de un puñetazo en la mandíbula.

Empezaste a mirar alrededor aterrorizado, miraste atrás y tras el Sr Makoto entraban unos hombres con pinta de guardaespaldas, él te devolvió la mirada con los ojos como platos, la escena reflejaba vuestra peor pesadilla, corriste por las habitaciones siguiendo el rastro de sangre, gritando el nombre de tu amada sin recibir respuesta.

Empezaste a recordar, las manos del rubio, los nudillos de Yumi, había sido él? Todo este tiempo le había estado haciendo esto y tú no lo sabías?

*********

Yumi - Va para ya! No quiero!

Rukawa - Ahora te da vergüenza desnudarte delante mío?

Querías asomar la cabeza al probador de ropa mientras le pasabas un vestido.

Yumi - No... Es que aquí vengo a menudo, y si alguien te ve podría sospechar...

Rukawa - Va... Un vistacito...

Yumi - Noo!

******
Estuvo varios días sin desnudarse frente a ti... Tendría algún moratón?

Al entrar en la habitación de matrimonio se te heló la sangre en las venas, las gotas color carmesí inundaba la moqueta, en un lateral una mesita estaba rota y salpicada de sangre, de ahí un rastro de haberte arrastrado hasta el baño y la puerta rota como si hubiera atacado un animal salvaje.

Rukawa - Que ha pasado aquí...

Miraste la cama, horas antes habíais estado entrelazados los dos, ajenos a esta locura.

***********

Rukawa - A veces pienso que me despertaré y sólo habré soñado todo esto

Yumi - Porque dices eso?

La estrujaste entre tus brazos y acariciaste sus hombros desnudos mientras pensabas.

Rukawa - Porque pienso que no puede ser real tanta felicidad contigo

Yumi - Vaya me estás asustando...

Rukawa - Mira! Para una vez que me pongo romántico! Ven aquí

Rodasteis sobre la cama mientras ella fingía escapar y reía, acabaste acurrucado en su pecho y su risa resonaba en tu oído.

Yumi - Me encantaría estar así para siempre...

Rukawa - A mi también

*********

Lentamente te acercaste, antes de atravesar la puerta notaste el suelo encharcado, un grifo estaba abierto, mírate al suelo y el agua en vez de ser transparente, era de color escarlata.

Rukawa - Porfavor...

Al entrar había muebles tirados, el espejo hecho añicos por el suelo, restregones de sangre por el lavamanos y un cuchillo ensangrentado en el suelo, el agua se escucha a salir del grifo de la bañera, que estaba tapada con una cortina.

*Bum bum*

Notabas que te latía el corazón en los oídos

*Bum bum*

Un pitido ensordecedor te nublaba la razón

*Bum bum*

Estiraste el brazo tembloroso para agarrar la cortina

*Bum bum*

Se escuchaban gritos desde la sala, pero estaba aturdidos por tu propio cerebro

*Bum bum*

Porfavor no...

Abriste la cortina.

Mi vecino deportistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora