Propósito [COMPLETADO]

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Los campeones, Eria y la princesa fueron al palco real rodeado del resto del pueblo; Zelda se sentó a un lado de su padre, los demás se sentaron en sillas más chicas. Presenciaron combate por combate, a veces Urbosa intercambiaba palabra con Daruk acerca de la técnica de algunos.

Aquel torneo se realizaba en una plataforma grande de madera con forma hexagonal frente a ellos, daba suficiente espacio para los contrincantes de hacer lo que quisieran en aquel lugar.

-¿Ese tipo que está haciendo con el arco? ¡Es un arma no un arpa!- gritaba Eria en la emoción del combate, Revali rió; Link miraba emocionado los combates, tantas variedades y técnicas, festejaba cuando ganaba algún favorito suyo aunque tenía todas sus esperanzas de que Mipha ganara.

Revali miró a Link de reojo, se veía tan emocionado, era el único al borde de su asiento, sonrió un poco; Recordó cuando todos entrenaban en el bosque perdido y prestaba atención a los combates que hubieron en ese entrenamiento.

Sintió alguien tocar su hombrera, al voltear estaba Eria quien le susurró "Y dime, ¿Qué fue esa cara roja que tenía Link cuando llegó al comedor?" , el orni rió un tanto presuntuoso mientras guiñaba el ojo, la rubia hizo un gesto de sorpresa -¿De verdad?-

-Así es y necesitaré tu ayuda- susurró.

Ya era hora del último combate en el día, la siguiente decisiva sería entre Mipha y un capitán hyliano; Zelda notó algo en el cuello que brillaba en aquella combatiente zora.

-Esta usando...Mi collar- susurró en voz baja tapando su boca mientras un leve rubor pintaba sus mejillas, Mipha puso firme su tridente y miró a Zelda desde la plataforma antes de fijarse en su contrincante -¡Que suerte la mía! La participante más pequeña y flacucha de todos me toca a mi - empezaba a fanfarronear el capitán mientras ponía en posición su mandoble.

Impa se paró entre ellos e hizo sonar un silbato -¡A la derecha, El capitán Digoh y a la izquierda, La campeona zora, Mipha ! ¡Comiencen!- ordenó bajando su mano, desapareciendo de un segundo a otro dejando iniciar la pelea; Digoh corrió hacia Mipha quien hizo lo mismo mas enterró el tridente en el piso para poder dar un salto arriba de su contrincante, volviendo a tomar su arma en medio del aire dió un giro que le quitó el casco al capitán para aterrizar del otro lado de la plataforma.

El capitán lanzó un gruñido -¡Ni si quiera eres digna de su alteza, eres sólo un pescado, un pescado pequeño y escuálido!- gruñía -¡Falta verbal! ¡Tiene una falta capitán Digoh!- exclamó Impa ahora desde fuera de la plataforma.

-¿Su estrategia es insultarme o va a pelear caballero?- preguntó la zora, cuando Digoh se acercó por segunda vez esta se inclinó para barrer sus piernas con el tridente haciendo que cayera al suelo, rápidamente se levantó y apuntó al cuello del capitán quien se quejaba.

-10! 9! 8! 7! 6! 5! 4! 3! 2! 1!...¡La ganadora es Mipha, campeona de los zora!- exclamó Impa haciendo sonar un silbato; Mipha se acercó al borde de la plataforma que daba en vista al palco real, enderezó su tridente y puso el pecho en alto -Dedicó la primera victoria de muchas a usted princesa, espero ser digna de usted si la Diosa me sonríe en los combates venideros- decía, Zelda le miraba con seriedad, pero sus mejillas se habían sonrojado, la combatiente sonrió ante aquello antes de bajar de la plataforma.

Los ciudadanos aplaudieron de manera amena ante aquella victoria tan rápida y ágil de Mipha incluyendo a los presentes en los asientos reales; Link alzaba sus brazos victorioso mientras gritaba en un rasposo y desarmonioso -¡SI, ESO!- y Revali por igual exclamaba -¡Ve por más victorias Mipha!- .

Zelda soltó un suspiró relajando los hombros, llevó una mano al pecho; Lo sentía latir como loco. -Debes admitir que eso fue un gesto muy romántico, Rayo de sol - le susurró Urbosa, la rubia respiró hondo antes de adoptar aquella postura seria -El torneo sigue en pie, n-no voy a dejarme llevar por eso- decía mientras cerraba los ojos y apretaba los labios.

-Vamos a cenar al comedor real todo mundo- invitó Rhoam a los presentes en el palco mientras se paraba de su asiento para tomar la mano de su hija y ayudarle a pararse; Todos los campeones asintieron, fueron a un comedor entre los pisos altos, Revali se desvió un poco con la excusa de tener que estirar sus alas.

Voló por la llanura, ahora que había oscurecido era más difícil llevar a cabo su tarea, pero pudo encontrar la ubicación que Eria le había susurrado al oído, al pie de un árbol florecían un par de princesas de la calma, en floriografía hyliana significaban amor sincero y puro. -Nada más me llevaré unas cuantas de ustedes- susurró mientras empezaba a escarbar.
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Revali llegó justo a tiempo en que sirvieron la cena.

El salón estuvo lleno de comentarios acerca de los contendientes y sus estilos de pelea, pero todos concordaban en que Mipha había sido la más rápida en derrotar a su oponente.

Zelda comía sonrojada en expresión confundida ante la mención de aquella princesa zora, Terrak por su parte, corría por el comedor de forma inquieta.

Después de la cena todos se retiraron, Daruk se fue directamente a su cuarto, Urbosa fue a ver si Mipha estaba en su habitación para ofrecerle algo de comer, como ambos se adelantaron; Link caminaba a un lado de Revali mientras miraban a lados opuestos -Fue una...Buena cena- comentó el rubio un tanto nervioso -Si, no estuvo mal- concordó aquel arquero.

Al llegar a sus habitaciones, se vieron una última vez, Link notaba como algunas plumas del orni estaban esponjadas, él en cambio tenía las mejillas sonrojadas -¿Quieres...Pa- Revali negó con la cabeza -Empezar a cortejar, no significa meterse a la cama de quien cortejas inmediatamente- decía con una sonrisa, se acercó al menor para ver si aun tenía colgada su cuenta esmeralda -Quiero conocer esta nueva versión de ti, y que tú conozcas esta nueva versión de mi- susurró.

Link aprovechó la poca distancia para besar la mejilla de Revali quien se quedó en una especie de shock, entró rápidamente a su cuarto, encontró en su escritorio un florero de cristal ancho con tierra donde se asomaban unas raíces, juntas estaban dos princesas de la calma sosteniendo algo.

Era una nota: "Para el caballerito más inquieto de Hyrule; Linky. - Revali"

(TRIGÉSIMO NOVENO CAPÍTULO; Our two couples están en la cúspide de sus enamoramientos o eso parece, Zelda se está debatiendo entre perdonar o no a Mipha, Revali va de lleno en demostrar que no sólo es un patán con pequeños detalles, ya casi terminamos, muchachos)