Propósito [COMPLETADO]

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Ante ellos, usando una capucha desgastada, una túnica común de color pastoso con diferentes cortadas y manchas de sangre como un pantalón incluso deshilado estaba él...Link.

Era unos centímetros más alto, ¿Estaría en sus 25-26?, pero sus rasgos parecían seguir igual, aunque algunas heridas adornaban su rostro, sobre todo una que marcaba su ojo derecho; Parecía no poderlo abrir, aún tenía una complexión delgada. Revali en cambio había ganado más altura y musculatura.

-Torus, será mejor que vayas de vuelta al castillo, Rev y yo debemos atender... Un asunto- comentó Eria ayudando al soldado a pararse. -¿Podrías informar a la princesa, que la hermana del campeón Link le verá mañana por la mañana?-le pidió, el muchacho asintió presurosamente -Nos vemos, yo...Buena suerte Eria- dicho esto se fue.

Revali aún estaba hincado, viendo a Link fijamente, sintió su corazón latir aceleradamente, en todos aquellos años intentó olvidar lo que sentía por él, hacerse con la idea de que probablemente se ausentó por más tiempo porque tenía familia nueva, una hermosa esposa o un esposo perfecto; Pero ahí estaba.

Eria le devolvió a la realidad le tomó de las hombreras para ayudarlo a pararse -Rev, lleva al cabeza hueca dentro, iré a la tienda de ropa para conseguirle algo decente- ordenó la chica sin antes abrazar rápidamente a Link susurrando "apestas a perro muerto" al oído e irse.

El campeón orni se acercó al espadachín -V-Ven... es por a- ¡Por Hylia! Debes darte un baño- exclamó un poco en más de confianza -Es el aroma ...de...la aventura- respondía Link en el momento que Revali le jalaba del brazo para meterlo a la casa, lo sentó donde antes leía su libro -Iré a llenar la bañera, no te muevas- ordenó para luego irse,fue a un pasillo y se escuchó cómo subía unas escaleras.

Link se paró de inmediato desobedeciendo al orni para explorar la casa, a veces visitó a su hermana pero jamás había ...pasado; Una parte para el mostrador, un estante con diferentes cosas raras; Sonrió, su hermanita había logrado mucho, buscó en su alforja y dejó tres grandes bolsas de tela sobre una de las mesas con su mano derecha donde ahora resplandecía la trifuerza del valor.

-Por lo que escucho, tu voz se está restaurando- escuchó desde arriba -Ya puedo... Hablar mejor- respondió Link viendo ahora el mapa, recorrió todo; Hasta las islas que estaban alejadas de la tierra firme y descubrió otras. -Eso es bueno, significa que ya no necesitarás tanto tus manos- decía el otro desde arriba.

-Puedo hablar pero...No mucho- decía Link tomando de su alforja una pócima de hada para darle un trago, vió el libro tirado a lado de la silla y se acercó para recogerlo, miró la portada "Con vista al mar" hojeó un par de hojas para ver de qué iba, era la historia de un soldado hyliano de la época del crepúsculo enamorándose de un zora, no sabía que Eria leía contenido cursi.

Escuchó alguien bajando las escaleras, volteó aún con aquel libro en manos -Ya está la bañ- Hey! Ese libro es mío- señaló Revali caminando hacia él para arrebatarlo. Link abrió aún más los ojos en sorpresa.

Pero tu... ¿No te quejabas de la literatura homoromántica cuando le dijiste "eso" a Mipha?

Revali llevó un ala a la frente -Link, creo que no debe sorprenderte saber esto, pero lo diré de una vez... Soy gay- Link, quien parecía ser la versión más experimentada parecía hacer un rostro entre comprendiendo pareciendo hacer un "ohhhhh ya veo" mientras que aquel plumífero se limitó a pensar "Hylia, dame fuerzas MUCHAS por favor".

-¿Sabes qué? Sólo ve a bañarte, hueles a vómito de moldora- indicó señalando con su ala el pasillo que llevaba a las escaleras, Link asintió e inmediatamente subió. -Hablando de Mipha, debemos ponerte al corriente con algo importante después de que te pongas descente- añadió.

Se abrió la puerta principal, Eria tenía una túnica hyliana a color vino, una camisa gris y pantalones negros -Es lo único que tenían- decía mientras se dirigía al cuarto de baño, tocó la puerta, Revali escuchó la conversación.

-Toma, es ropa descente, incluso calzoncillos-

-No era necesario... Pero...Gracias-

-Sólo báñate, quieres algo de comer en especial?-

-... Tarta de ...frambuesas-

Con aquello escuchado Revali fue a su alforja ya desgastada y sacó un pequeño contenedor de barro con frambuesas que siempre llevaba consigo, donde hacía su lectura, era una pequeña sala con un librero o cajas inventariadas, pasando aquello estaba la cocina, prendió la madera bajo la olla.

Eria bajó las escaleras y se acercó para buscar el trigo, el orni le enseñó las frambuesas -Al parecer cocinaremos juntos de nuevo, ¿Habrá aprendido a comer como persona descente estos años?- preguntó, este negó -Seguro aprendió a comer como salvaje- decía con sorna mientras preparaban la tarta.

Link mientras tanto se tomó su tiempo, era una especie de tina adherida a la pared, dobló sus piernas y relajó sus músculos para hundir lo más posible su torso lleno de cicatrices, cerró los ojos; En muchos años no se había sentido tan satisfecho como ahora, sonrió.

Hasta que entreabrió los ojos encontrándose con su alforja donde se asomaba pulcra la bufanda orni que Revali le había dado hasta volverse a encontrar, miró a otro lado con un leve sonrojo.

Tuvo experiencias en el amor durante sus viajes, con una hyliana trabajadora de una granja en Hyrule occidental, relación que no duró mucho más de dos años pues ella quería quedarse ahí, formar una familia mientras él deseaba seguir su viaje; Con un soldado zora, una relación muy lasciva a sus 23 pero lo dejó a los seis meses  porque no podía seguir su ritmo al explorar por Hyrule; Luego a los 24, duró un mes con un mercader orni que le explicó muchas cosas acerca de la expresividad en su especie, lo dejó casi después de enterarse que las plumas esponjadas en Revali significaban que le gustaba, se sintió cual idiota al no haberlo notado mucho menos al momento que aquel guerrero TAN orgulloso le dió su bufanda más preciada y una cuenta de sus trenzas.

Recordó que cuando se sentía nostálgico, aspiraba el aroma de la bufanda... frambuesas y pino. Llevó una mano al pecho ¿Que sentía él?...¿Por qué no intentó nada Revali? Sólo lo dejó ir. ¿Aún se sentiría atraído por él? Pasó una mano por su rostro, lleno de cicatrices, ya no era un niño de cara tierna.

Cuando se hundió hasta que el agua tapó sus labios sopló provocando burbujas sintió su estómago rugir, se apresuró por bañarse y cambiarse; Al bajar percibió el rico aroma de la tarta recién hecha.

Isha y Revali estaban en una pequeña mesa de la cocina con té de fresas y una sonrisa -Bienvenido a casa Linky- se limitó a decir Revali con una leve sonrisa.

(TRIGÉSIMO PRIMER CAPÍTULO; Linky ha vuelto a casa, tuvo amantes a lo largo de sus viajes mientras descubría amistades, pero sigue la intriga de la justa, que habrá pasado con Zelda y Mipha todo este tiempo? Haré un fanfic-spin off de eso? TAL VEZ USTEDES DIGANMEN LA VERDAD YA CASI LLEGAMOS AL FINAL Y NO SÉ QUÉ SEGUIRÁ *Screeeech*)