23. Me estoy volviendo loca

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Miriam estaba tumbada en el sofá, había tenido un día realmente agotador, uno de sus pacientes empeoró y tuvieron que intervenir en el quirófano. Después de tres horas y media, habiendo estabilizado al paciente salieron de quirófano y siguió atendiendo otras urgencias. Al llegar a casa Miriam estaba reventada, pidió una hamburguesa con patatas y se puso a ver una peli que había visto al menos diez veces. 

Cuando la película iba por la mitad Miriam se sorprendió a sí misma, no había estado prestando atención a lo que pasaba en la pantalla, llevaba todo el rato pensando en Carlos y en lo bien que lo pasaron el domingo anterior. Miriam no había ido nunca al museo de cera y eso a el le parecía poco mas que un sacrilegio.

 Hacía tiempo que no se reía tanto, aquellas figuras, más que una representación de los personajes eran unas caricaturas mal hechas, Miriam había podido reconocer algunos por el letrero que tenían delante porque por sus caras podrían haber sido cualquiera. 

- Madre mía, me estoy volviendo loca. 

Miriam cogió el móvil, el grupo de whatsapp que tenía con sus hermanos y sus cuñadas estaba bastante activo en ese momento. Necesitaba hablar con alguien pero no quería hacerlo con sus hermanos, esos temas mejor dejarlos. Así que abrió el chat privado con Alicia, la novia de su hermano Jose, llevaban 10 años juntos y ellas dos eran como hermanas.

-Aliii 

-¡Miri! ¿que tal, estás currando? me parecía raro no verte hablar en el grupo con la que están liando tus hermanos.

- No, ya estoy en casa. Necesito hablar contigo pero que no se entere mi hermano que no estoy para sus coñas.

- Vale tranqui, está en el otro sofá y yo llevo los auriculares.

Miriam le mandó un audio resumiendo lo que le estaba pasando, si se le puede llamar resumir a un audio de 7 minutos.

- Vamos que te gusta ese chico, sientes algo por el pero no te atreves ni a pensarlo. - contestó su cuñada.

- Es que no me puede gustar, si hasta hace nada nos tirábamos de los pelos. Además somos amigos y ahora que Alma está atontada con su relación es el único con el que puedo hablar.

- Y crees que si intentas algo el te va a rechazar y se irá a la mierda la amistad.

- No se si me rechazaría, hasta donde yo sé, se acuesta con todo lo que tenga tetas. - comentó Miriam resignada.

- Habla con el, el no ya lo tienes.

- Ya y luego tengo que verlo a diario en el hospital...

Alicia no sabía que aconsejarle, estaba claro que su cuñada estaba enamorada de ese hombre y hacía mucho tiempo que Miriam no sentía algo así. Pero también entendía que no quisiera arriesgarse y perder a un amigo. Ella se arriesgó, Jose y ella eran amigos desde hacía un año cuando Alicia se lanzó y le dijo que estaba enamorada de el, y le salió bien.

-Pues no se nena...

- Bueno, gracias por escucharme, al menos me he desahogado.

- No hay que darlas, te quiero cuñi.

- Y yo a ti. Hablamos mañana.

Miriam dejó el teléfono y se fue directa a la cama, necesitaba descansar. Tenía libre los dos próximos días así que le serviría para darle vueltas al tema y decidir que hacer.

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