Una nueva oportunidad

Una decisión difícil

Al salir de la casa, Armando tomó su mano y se la besó con ternura, pero Betty que aún se sentía descompuesta con la situación, apenas le sonrió. No sabía como iba a encarar la conversación que se debían, y el posible rompimiento de su relación, la mantenían en un estado de angustia constante.

Mientras se encaminaban al carro, Armando la observaba embelesado, pues encontraba a Betty más bella que nunca. Para él superaba a todas las mujeres con las que alguna vez había estado, ya que Betty reunía todo lo que un hombre podría desear en una mujer. Ella poseía belleza exterior e interior, inteligencia, ternura, amabilidad, bondad, sensualidad. Todo lo que nunca pensó podría hallar en una sola mujer, lo reunía la mujer en quién en el pasado jamás hubiese creído poder fijarse, eso era Betty para él, y para su suerte era suya.

Betty incómoda ante su insistente mirada preguntó:
_ ¿Pasa algo doctor?_

Armando la frenó por un momento en la escalinata y recorriéndola con la mirada, contestó;
_ Pasa que está muy, pero muy hermosa mi amor_

Betty hizo una sonrisa por compromiso, entendiendo que él sólo estaba siendo amable, pues aún con "ésos pequeños arreglos" como solía nombrar a su cambio, nunca lograría verse tan bien como las mujeres que le había conocido, mucho menos a Alejandra Sing, a quién no se podía sacar de la cabeza.

Armando notó su expresión e insistió;
_ Es la mujer más bella que he visto aunque no me lo crea, y lo digo porque usted es la mujer más completa que haya conocido._

_ Por favor doctor!_

Él la abrazó por la cintura y agregó:
_ Usted es hermosa por fuera y por dentro, además de ser brillante, tierna, buena..._

_ Sabe que? Mejor vamos!_
Respondió molesta recordando que ese mediodía él también había elogiado a Alejandra.

_ Se lo voy a demostrar si me deja. Es más, apostaremos algo._

_ Ya doctor, por favor vamos._

_ Nos vamos si acepta apostar conmigo. (Betty rodó los ojos) No me haga esa cara, más bien acepte la apuesta._

_ Deje de jugar doctor! Se hace tarde!_

Armando se plantó ahí sin soltarla, entonces ella con fastidia, consultó:
_ Bueno a ver, que es lo que quiere apostar?_

Armando sonrió y contestó:
_ Le apuesto que esta noche cuando lleguemos al cóctel, todo el mundo se volteará a verla, pues su belleza atraerá las miradas de todos._

Betty hizo una expresión de molestia y respondió;
_ Póngase serio doctor, no necesita decirme mentiras, yo sé bien cómo me veo!_

_ Pues si está tan segura, entonces apostemos algo._
Dijo con sonrisa pícara.

_ Es suficiente doctor, mejor vamos que nos cogió la noche._

Armando sin rendirse la retuvo por la cintura diciendo:
_ Si está tan segura de lo que dice, entonces apostemos algo. ¿O es que tiene temor a perder?_

Entonces ella harta de ese juego, contestó:
_ Está bien doctor, que propone?_

Armando sonriendo dijo;
_ Si tengo razón, y todos voltean a verla, usted deberá venir a mi apartamento después del cóctel, y estaremos juntos. Pero si pierdo, haremos lo que usted quiera._

Betty estaba segura de que él sería quién perdería esa apuesta, y que posiblemente perderían ambos, así que sin darle importancia al asunto, aceptó. Él le tendió la mano con una sonrisa, y ella sin muchas ganas cerró el trato dándole un apretón.

Bajaron a la acera y se dirigían al carro cuando se encontraron con Román y sus amigos de frente.
_ ¡Ah no pues! ¿Qué es ésta aparición?_
Dijo Román mirando a Betty de arriba abajo.