Una nueva oportunidad

En Caracas

_ Me siento feliz en tus brazos, princesa... Siento paz, plenitud, algo que no creí existiera para mí, siento como si encontrase mi lugar en el mundo a tu lado, y no quiero separarme de ti, no quiero que esto se termine..._

Betty acariciando su cabello respondió:
_ Yo tampoco quiero que se termine, pues siento lo mismo, es que hasta parece uno más de mis sueños escucharlo hablar así! _

Armando saliendo de su pecho, se recostó a su lado, para luego de besar dulcemente sus labios, tomarla por el rostro, y verla a los ojos.
_ Lo que parece un sueño es que alguien como yo, haya logrado conquistar un corazoncito como el tuyo, mí vida... un angelito dulce, tierno, hermoso como tú, enamorándose de alguien como yo? Eso sí es increíble, y me siento tan agradecido con quién sea, que me haya bendecido con este regalo!._

Betty sonrió tímidamente, y viéndolo a los ojos, contestó:
_ Yo también estoy agradecida por poder estar con usted, pero debe saber que..._

_ "Contigo" mi amor, "contigo"._
La corrigió Armando.

Betty se puso seria, y fingiendo enojo, continuó diciendo:
_ Bueno, pero no me interrumpa doctor! (Armando fingió una mirada triste, y ella rió divertida) ajsajsajs bien "Armando" (Betty acaricia sus mejillas) yo me enamoré de ti, porque desde un principio noté que una parte de ti, era este Armando que tengo frente a mí, un hombre dulce, tierno, de buen corazón... (Armando la vé con ternura) Claro que también ví a un hombre muy, pero muy guapo. (Ambos sonríen) Pero lo que más amé de ti, son ésas cualidades, pues a pesar de tu disfraz, siempre las percibí._

Armando la miró confundido...
_ ¿Ah qué te refieres, mi amor? ¿Un disfraz?_

Betty hizo una mueca con la boca, y con timidez respondió:
_ Bueno, no me refiero al de la princesa Lili, si es lo que cree... _

Armando pellizcó su cintura, fingiendo sentirse ofendido, mientras ella reía divertida.
_ Ja - ja - ja - ¡Muy graciosa doctora monstruo! ¡Muy graciosa!_

Betty rió divertida por un momento, y luego respirando profundo, como tomando coraje, se quedó seria, y agregó:
_ Bueno mi amor, yo siempre creí que tú usabas un disfraz de hombre despreocupado, severo, y muje..._

Agachó la mirada guardando silencio, entonces él, preguntó:
_ ¿Mujeriego? ¿Eso quisiste decir?_

Betty asintió con timidez, diciendo:
_ Si, perdón mi amor, pero es la verdad, yo siempre creí que ese era un disfraz para ocultar lo que en realidad sentías por dentro, pues siempre pensé que se sentía solo, inseguro, necesitado de amor, que actuaba de esa forma, para ocultarlo._

Armando agachó la cabeza, y luego viéndola a los ojos, preguntó:
_ ¿En verdad creías eso de mí?_

Betty se encogió de hombros, y con timidez, respondió:
_ Sí, yo siempre creí que us, que tú te esforzabas en ocultar todo ello actuando en la forma en que lo hacías, pero que en ese esfuerzo por ocultar sus sentimientos, también se ocultaba su bondad, su ternura, su corazón...
No niego que tiene un problemita de carácter, que aún necesita controlar... pero la verdad es que la mayor parte de lo que hay aquí (toca su pecho) es bueno..._

Armando sonrió con algo de tristeza, y preguntó:
_ ¿Después de todo lo que hice, sigues creyendo eso?._

Betty asintió con la cabeza, respondiendo:
_ Sí, lo creo... Sé que hubo un momento en que dejé de creerlo... pero ahora pienso que no me equivoque..._

Armando sostuvo parte de su rostro y cuello con la mano, y acercándose a sus labios, la besó con dulzura, con amor. Luego viéndola a los ojos con ternura, dijo:
_ Yo no sé si como dices, había algo bueno en mí antes de conocerte, sólo sé que después de ti, ya no soy el mismo, he cambiado. Que después de estar contigo... de perder tu amor... de haberte lastimado, y lastimado a tanta gente, todo cambió para mí..._