Una nueva oportunidad

Amarte no es suficiente

Armando bebió el último sorbo de whisky, y se dirigió al cuarto para ver cómo se encontraba Betty, pero cuando salió de la terraza e hizo unos pasos hacia allí, la encontró en el pasillo sentada en el piso y llorando.
_¡Mi amor! ¡¿Qué haces en el piso?!_
Dijo poniéndose en cuclillas e intentando levantarla. Pero Betty que intentaba calmarse, mantuvo las manos cubriendose el rostro, sin decir palabra alguna.

Él intentando nuevamente levantarla agregó:
_ Por favor Beatriz, está haciendo frío y te puedes enfermar! _

Pero ella con la voz entrecortada contestó:
_ ¿Qué puede hacerme una gripa, comparado con lo que me estás haciendo?_

Armando entonces viendo la maleta preguntó:
_ ¿Es que pensabas irte sin hablar conmigo?!_

Betty se quitó las manos del rostro, y entre lágrimas respondió:
_ ¿Acaso cambiaría en algo que hablemos? Ya está todo decidido, verdad?_

Él agachó la mirada y respondió:
_ Sé que nada de lo que diga cambiará lo que piensas de mí, pero al menos dejá que me quede por ésta noche contigo, mañana si es lo que quieres, no tendrás que volver a verme. _

Betty se puso de pie molesta, y cogiendo la maleta respondió:
_ ¿Lo que yo quiero?
(Armando la miró confundido, y Betty continuó diciendo)
No te preocupes Armando que no tienes que esperar hasta mañana, pues cómo ya tienes todo decidido, voy a facilitarte las cosas para que comiences ahora mismo con tu vida._

Armando imaginaba que Betty aún creía que él estaba enamorado de Alejandra, así que se mantuvo en silencio pensando que aunque lo negara, ella no creería en él. Pero Betty que esperaba que él dijese la verdad, al ver que no había ninguna respuesta de su parte, se dirigió hacia la puerta en medio de un mar de lágrimas.

_ Por favor Beatriz, no hagas ésto!_
Dijo tomándola por la cintura.

Ella entonces volteandose a verlo contestó:
_ ¿Acaso no me quieres lejos?¿No es eso lo que estás buscando?_

Armando agachó la mirada, y sólo se limitó a decir:
_ Yo no... no sé de qué hablas. Sólo te ruego que por ésta noche dejes que me quede contigo, y mañana puedes hacer lo que creas mejor para ti_

Betty al oírlo preguntó:
_ ¿Y lo mejor para mí es alejarme de tu lado, verdad?_

Armando agachó la mirada y respondió:
_ Mejor hablemos mañana, ahora necesitas descansar._

_ ¡No Armando, hablemos ahora! ¡Mírame a los ojos y dime la verdad! ¡¿Crees o no, que lo mejor para mí es estar lejos de ti?!._

Armando la observó por un momento a los ojos y luego agachó la mirada sin responder nada, entonces Betty decepcionada dijo:
_ Yo sí creo que lo mejor es que me vaya, pues tienes razón, debo alejarme de ti porque sigues siendo el mismo que conocí en el pasado, el Armando que nunca dejará de mentir!_

Abrió la puerta llorando, pero Armando empujando la puerta por detrás la cerró, luego volteandola suavemente, la puso frente a él, y dijo:
_ Sabes que no soy el mismo, pues por ti he cambiado radicalmente, y aunque sé que es difícil creer en mí, te aseguro que no te he mentido sobre lo que siento, ¡Juro por lo más sagrado de mi vida que eres tú, que no siento nada más que amistad por Alejandra!_

Betty lo miró a los ojos, contestando:
_ ¡No estoy hablando de tus sentimientos por Alejandra, estoy hablando de tus promesas! ¡¿Acaso ya no recuerdas ninguna de ellas?! ¡¿Olvidaste que has prometido no volver a engañarme?!_

_ ¡Y no te engañé! ¡No ha pasado nada entre Alejandra y yo! ¡Lo juro!_

_ ¡Si me has engañado Armando! ¡Me has dicho que siempre hablaríamos con la verdad sin importar las consecuencias, pero sin embargo mentiste al decir que te quedabas en Caracas! ¡Yo sé bien que piensas volver a Bogotá para luego volarte muy lejos!_