Make Out

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Lo vi acercase hacia mi, mientras cerraba sus ojos.  Sus suaves labios tocaron los míos y fue cuando perdí conciencia del resto del mundo. Por primera vez había encontrado otro escape que no incluyera dormir para olvidar lo que sucedía y como todo se iba a la mierda.

Por primera vez en días soñaba despierta. Por primera vez en meses volvía a sentir esa cálida sensación en mi interior. Casi había olvidado que se sentía estar tan cerca de alguien y poder sentir otra calidez que no fuera la propia. Volvía a sentir algo.

Tomo mi rostro en sus manos e instintivamente pose mis manos en su cuello ejerciendo algo de presión para profundizar un poco el beso. Su mano derecha paso a situarse sobre mi cintura y con un solo brazo me posiciono sobre él en el asiento. Ahora ambas manos estaban en el borde de mis pantalones. Mientras que las mías, se mantenían en sus hombros para luego subir hacia su pelo y jugar con él. Nos separamos unos segundos para volver a tomar aire y volvimos a juntar nuestros labios. Pude sentir como lentamente descendía sus manos por mis piernas que se encontraban al lado de las suyas, mientras que mis manos se encargaban de recorrer sus musculosos brazos, su pecho y su cuello para luego quitarle su chaqueta. Tome el final de su camiseta y la jalé hacia arriba. No estaba muy segura de a donde llevaba esto, pero no quería que parara.

Estábamos en un auto. Solos. En el medio de la nada, rodeados de infectados, a punto de tener sexo en un Jeep. Sus manos fueron desde mis piernas hacia mi abdomen, levantando mi remera, al igual que lo había hecho yo con la suya y siguieron hacia mis pechos. Mi piel se había erizado debido a las frías brisas que ingresaban al auto y pude notar con mis manos posadas sobre sus hombros, que la suya también.

Baje mis manos hacia su cinturón desabrochando la hebilla del mismo, dejando a Calum solo con sus bóxers.

-Te-te quier...- “¿Qué?” pensé mientras me alejaba de él. Lo miré con una mueca de extrañez. ¿Por qué lo había dicho?

-¿Qué? –Dije por fin.- ¿Qué dijiste? –Pero no obtuve respuestas. Solo una mueca de sorpresa de parte de él.

-Yo...eh… - No le deje terminar su oración que volví a besarlo. Segundos después me separe. -Shh…- Dije colocando un dedo sobre sus labios. No importaba de verdad.

Seguimos así unos 20 minutos hasta que él se separo y me hizo una pregunta.

-¿Estás segura? –No respondí, solo asentí.

Dicho eso, comenzó a besar mi cuello siguiendo hasta la parte baja del mismo, dejando algunas marcas. Paso sus manos por detrás de mi espalda desprendiendo mi sostén.

The Last of Us- c.hDonde viven las historias. Descúbrelo ahora