Bulma llegó rápidamente a su trabajo, era una joven de 25 años y tenía puesto de asistente en una prestigiosa empresa. La "Ouji.corp" era la más grande empresa del país.
Y ella era la simple asistente y no una cualquiera, era la asistente de la ASISTENTE del jefe.
Todos los importantes necesitaban uno, pero sin embargo su trabajo era de los más pesados, ella hacía todos los papeleos e informes y su superior sólo los entregaba y se llevaba el crédito por sonreír y llevar café. Vaya mierda de vida.
Bulma era una chica común, bastante inteligente, pero siempre había evitado los problemas y hacía todo lo posible por no llamar la atención.
—¡Briefs!—
El grito de su jefe la sacó de sus pensamientos, nunca la mandaba a llamar y esta era la segunda vez en el día. Corrió hasta la oficina de su jefe y se paró en la puerta.
—Dígame señor...— su voz era frágil.
—¿Dónde está la incompetente de tu compañera?— le dijo en tono burlón con su semblante relajado.
—Me dijo que saldría a tomar café, señor—
—Todos necesitan un descanso, bien. Le daré unas vacaciones ¿Te molesta suplir su puesto unas semanas?— le sonrió a la chica y ella se sonrojó.
—Para nada...a fin de cuentas ella sólo se encarga de comprar café—
Vegeta hizo una mueca de confusión con una sonrisa divertida, Bulma se sonrojó aún más y giró la vista apenada.
—¿Qué quieres decir con eso, Bulma?—
—¿Sabe mi nombre...señor?— estaba sorprendida.
—Claro que sí, llevas 3 años aquí, obviamente sé tu nombre. Pero ese no es el tema...— la miró con picardía.
—No, yo no quiero que piense que Launch es...bueno...perdón, sólo olvidelo...— sus palabras se trababan y no aguantó verlo a los ojos.
—Briefs, necesito saber, si tú haces todo pues tú deberías ganar más y Launch sólo que me traiga el café— se recargó en su silla mordiendo la punta de su bolígrafo.
—Pues sí...yo hago los informes, papeleos y todo...Launch sólo los entrega— se cubrió la cara con la carpeta que tenía en las manos.
El hombre de 28 años la observó detenidamente y sonrió divertido soltando un suspiro.
—Firma aquí— le señaló una hoja de papel en blanco.
Ella sin rechistar firmó aquella hoja y se hizo unos metros atrás del escritorio.
—Bulma Briefs, a partir de hoy eres mi asistente y Launch es tu asistente—
Podrán decir lo que quieran de los jefes, pero Vegeta siempre había sido amable con todos sus empleados. Tenía sus días malos, pero en general la empresa lo adoraba por su carisma, incluso la mayoría de las mujeres había tratado de ganarse su amor.
Pero ninguna lo había logrado, nunca le habían visto una pareja y era algo extraño. Miles de rumores se esparcían por los pasillos de las oficinas.
Bulma había llegado a la conclusión que nadie merecía al hombre, era carismático, amable, inteligente, rico y sumamente atractivo. Simplemente no había alguien a su nivel.
—¿En verdad, señor Ouji?— dijo con entusiasmo.
—Te lo mereces, yo hablaré con la rubia. Mientras ve a seguir con tu trabajo—
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Doble
FanfictionA veces siento que es uno y a veces otro...pero simplemente no quiere decírmelo.