Azula: El Fuego y La Sombra■CANCELADA■

9: "PERSECUCIÓN" PARTE 1

Habían pasado unas cuantas semanas tras la batalla ocurrida anteriormente en la ciudad de Omashu ahora llamada Nuevo Ozai, durante este tiempo la princesa Azula había hecho de todo para seguirle la pista al Avatar y su grupo, poniendo a James a cargo de una misión de exploración junto con un grupo de hombres para tratar de encontrar una posible ubicación del equipo Avatar, mientras ella reportaba por medio de una carta a su padre en donde le era descrito todo lo acontecido, pero en ese momento la chica sería interrumpida por una voz.

- ¡Azula!, ¿ya han encontrado algo?, preguntaba Ty lee la cual como de costumbre hacía gala de su gran flexibilidad haciendo una pirueta en el aire para acercarse a su amiga, mientras Mai le seguía a su propio estilo uno más calmado y poco llamativo a primera vista y con un gesto serio en su rostro.

-No Ty lee, parece ser que el escuadrón de búsqueda aún sigue sin ningún indicio que indique la ubicación del nuevo objetivo, odio admitirlo, pero la criatura voladora del avatar es una gran molestia, dijo algo frustrada la chica de ojos dorados, se giraba para responderle a su amiga.

- ¿Y tú nuevo amigo aún no encuentran nada?, ¿Creo que el escuadrón de búsqueda ya a tardado demasiado? diría Mai la cual estaría ya algo aburrida por la falta de movimiento y acción en las semanas transcurridas.

Azula simplemente arqueo la ceja ignorado el comentario de Mai, para continuar con su respuesta general de la situación.

-A menos que el equipo de búsqueda pueda volar veo muy difícil que encuentren algo pronto, ¡creo que tendré que investigar por cuenta propia!, si quiero que esto se haga bien y rápido tendré que empezar a moverme por mi cuenta, dijo la princesa de manera seria, tratando de mantener la calma en esa situación algo complicada.

En eso una voz irrumpió en la conversación de las chicas.

- ¡Buenos días!, princesa Azula, le informamos que ya tenemos un rastro y una posible ubicación del avatar y su grupo, dijo James quien venía junto a uno de los rastreadores de la nación del fuego.

El grupo de chicas voltearon a verlos.

- ¡Muy bien! ¿Cuál es la pista?, ¡necesito información!, dijo Azula mientras se cruzaba de brazos y miraba al rastreador.

- ¡Está bien princesa!, le parece si empieza a explicarle lo que encontramos señor, diría James al hombre parado junto a él mientras con su mano le hacía un ademán para dar un paso al frente y explicarle a su "majestad" lo que exigía saber, pues él era el más indicado para expresar el hallazgo.

El hombre dio un paso al frente, era un hombre de una gran estatura solo un que un poco más bajo que la escolta de la princesa, con un maquillaje en su cara asiendo un énfasis en sus ojos los cuales eran resaltados por unos bordes oscuros, sin embargo, de inmediato el hombre se sintió intimidado por la mirada fría y penetrante de la princesa de llamas azules, la cual se encontraba impaciente y molesta.

- ¡Su majestad!, hace no más de dos horas el comandante James y yo encontramos a unos 15 kilómetros de aquí un rastro que "seguramente" fue dejado por el avatar y sus acompañantes, diría el hombre aún nervioso.

-¿¡Como que "seguramente"!?, no estoy jugando al escondite ni a un estúpido juego de azar, no quiero supuestos, ¡yo quiero!, ¡no!, ¡yo necesito hechos!, pruebas contundentes de la ubicación del maestro aire y los dos campesinos que le acompañan, dijo molesta la princesa por la respuesta dubitativa dada en ese momento por el rastreador, sin embargo James la tomaría del hombro pidiéndole con la mirada serena que se calmara un poco y procedió a tomar la palabra.

- ¡Princesa! Lo que el señor rastreador quiere decirle es que encontramos esto, decía el chico mientras de uno de sus bolsillos sacaba una bolsa, la cual en su interior tenía lo que parecían ser unos mechones largos de cabello blanco.