Extra 2

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Un año había pasado desde que Bokuto y Akaashi se habían casado y desde que Tobio le había propuesto matrimonio al joven Hinata. En un año habían pasado tantas cosas que ninguno sabía cómo cambio tanto en poco tiempo. Empezando sobre que Tobio decidió mudarse a Tokio para empezar a vivir con Hinata, firmando contrato completo en la empresa de Asahi siendo su modelo oficial.

Por otro lado, inesperadamente Sugawara empezó a salir con el representante de Tobio, Daichi, a muchos les había sorprendió su relación, algunos hasta les sorprendió que Sugawara fuera gay, pero nadie crítico, más bien se sintieron contentos por él, al fin tenía una persona que le dedicaría su tiempo completo, se le veía feliz.

Todos estaban bien, felices, en especial ese día, el día en que Kenma y Kuroo se casaban.

—¿Ya estás listo?— Preguntó Hinata acercándose a Kenma, quien estaba sentado enfrente a un espejo en un precioso traje blanco.

—Creo que sí... ¿Me veo bien?— Preguntó tímido, incluso cohibido.

—Estás perfecto.— Le sonrió Shoyo acercándosele mientras tomaba un humectante de labios de la mesa, para ponérselo sobre los suyos.

—Ahora sí, más que perfecto.

Kenma sonrió tímido. —Tampoco te ves mal.— Hinata sonrió orgulloso. —No te mentiré, pensé que el traje naranja se me vería mal, pero realmente me queda a la medida. Tienes buen ojo Kenma.

—No creo, pero apenas lo vi, solo pude visualizarlo en ti. Espero realmente te guste.— Comentó levantándose, mientras se pasaba las manos por su delicado traje blanco, lleno de nervios.

Hinata notó aquello.

Shoyo se acercó más y abrazo a Kenma, pasándole las manos por la espalda, sintiendo como Kenma empezaba a llorar.

—Ya, no llores, no tienes porqué llorar.

—Estoy muy feliz Shoyo, no pensé que algo así pudiera pasarme a mí.

Hinata se alejó un poco y observo a Kenma a los ojos.

—Te lo mereces, mereces toda la felicidad del mundo, pasaste por muchas cosas, pero ese chico que está afuera, esperándote en el salón se muere por ti, y sé que tienes la certeza de ello, él no se va a ir nunca de tu lado, al igual que yo obvio.

Kenma se rio por lo último y sonrió, pasándose la mano por la cara, quitándose las lágrimas.

—Qué bueno que no usaste maquillaje porque si te lo hubieses dañado te hubiese arrancado los ojos.

—Que simpático...— Dijo una voz detrás.

—Ya sabes como soy.— Respondió Hinata acercándose a Tobio, dejándole un pequeño beso en la mejilla.

—¿Estás listo Kenma? Ya está todo preparado.

—¿Y Kuroo? ¿Cómo está?

—Está peor que una gelatina.— Comentó Tobio mientras se reía.

—¿Eso es bueno?

—No lo será si tardamos más, vamos Kenma.— Dijo Hinata tomando la mano de su mejor amigo.

Kenma asintió, entrelazando su mano con su mejor amigo. Ambos se sonrieron para luego irse junto a Tobio.

Como era de esperarse, la boda de Kenma y Kuroo no iba hacer parecida a la de Bokuto y Akaashi, más por parte de Kenma que de por Kuroo, pero el mayor no tenía problema. Todos sus conocidos más cercanos estaban presentes en la notaría, no pasaban de ser familiares y uno que otros de sus amigos.

𝖲𝗍𝗒𝗅𝗂𝗌𝗍 // 𝖪𝖺𝗀𝖾𝗁𝗂𝗇𝖺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora