Capitulo 35: Final

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Casey sigue a mi lado a pesar de que ha amanecido. Me consuela en mis sollozos que van desapareciendo lentamente para dejarme una respiración entrecortada y débil.

Se acerca suavemente a mi odio y me susurra que tiene que irse pero promete regresar pronto. Yo asiento y le suelto la mano que tenia abrazada como peluche.

Me quedo viendo al techo perdiendo la noción del tiempo. Empiezo a ver el sol entrando por la ventana, veo como cambia de posición y se va. Veo llegar también a la luna, solo que esta se refleja en la ventana.

Casey no volvió en todo el día, ni siquiera me llevo al comedor. Que no importa mucho ya que dudo que pueda tragar comida alguna. No creo que me queden lagrimas, creo que las gaste todas ayer y aun que sea tonto pensarlo me arrepiento de eso. Creo que no es malo llorar pero estoy segura de que las lagrimas se deben guardar para cuando mas las necesitemos. No se que le ha pasado a Sabiel. Espero este vivo, aunque no estoy muy segura. Mis pensamientos divagan de aquí para allá pensando en todo lo que pudo pasarle. Creo que Tessa me mintió, el no huiría sin mi. Me lo prometió. Hasta me tomo de la mano. Con sus profundos y cálidos ojos grisáceos. Se veía seguro de cumplir su promesa. O eso quiero creer.

Sabiel

La luz de la habitación es intermitente. Va y viene. No dejo de verla a pesar de que me cansa la vista y me marea, es una falla, flashea cada dos por tres. Cuento los segundos que tarda en ir y venir. El guardia que me cuidaba se ha ido y a tardado en regresar. Mido el tiempo basándome en el foco. Uno dos tres, se va cuatro cinco seis, regresa. La luz va y viene en lo han pasado 5 minutos.

Cada vez tarda mas en volver, hasta que suena una mini explosión. La luz se va por completo. Alguien abre la puerta de mi habitación. Me sujeta mientras me quita las cadenas. Quiero preguntar quien es o que hace, pero no me da tiempo. Me tapa la boca y me carga como un costal. Salimos por un pasillo hasta llegar a una pequeña habitación. Una luz de linterna se enciende cegándome brevemente.

-Tranquilo, estarás bien.

Es Patt, se ve asustada pero segura a la vez

-Solo no hagas preguntas y sígueme

Me toma de la mano y me lleva a otra habitación pequeña. En el suelo quita un tapete y abre una puerta. Hay unas escaleras, no se aun si es un sótano o tal vez un pasadizo. Me dice que la espere allí que volverá pronto. Cierra la puerta y pone el tapete dejándome totalmente a oscuras. Hay un aroma a tierra mojada y escucho una gotera a lo lejos. Intento dar un paso resbalo y caigo de las escaleras.

Zoeimi

He visto como la luz del hospital se apaga por completo tras una explosion. Alguien abre la puerta de mi habitación y me toca ligeramente

-Zoeimi no hay tiempo tienes que venir conmigo-

reconozco la voz de Patt y me limito a contestar

-No tiene caso-me giro para darle la espalda

-El esta aquí

-¿Quien?- digo con la voz quebrada y temblando

-Ya sabes quien

El Silencio De Su VozDonde viven las historias. Descúbrelo ahora