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Mi corazón no para de palpitar.
Creo que me voy a morir en estos momentos.
Sus manos acariciaron suavemente mi cintura, para luego subir hasta mis pechos.
-S-Sebastian joder hay mucha gente – traté de zafarme inútilmente mientras el solamente hacía caso omiso a mis palabras.- ¿m-me estas escuchando? – sentí com sonrio encima de mi cuello, su aliento cálido golpeo contra la piel de mi cuello.
-no migues que te encanta que haga esto- yo solo pude ponerme roja
-n-no…S-Sebastian – sentí como sus dedos jugaban en mi zona intima-j-joder S-Sebastian – el solo disfrutaba de mi sufrimiento
Sus labios volvieron a estar sobre los míos, sus manos aún seguían torturándome y sus labios ahogaban mis suaves gemidos.
-di que me amas – exclamó suavemente sobre mis labios
-no puedo decir mentiras
-lo estás haciendo en estos momentos – sentí como la sangre subía por toda mi cara, sabía que sentía algo por Sebastian, sin embargo, no sé qué es y no pienso ir a investigar.
Sentí como se introdujo lentamente en mí…
-S-S-Sebastian – él estaba sentado y yo encima de él, se sentí tan bien.
El no dijo absolutamente nada, solo sonrió como siempre.
Miré hacia todos los lados para ver que nadie estaba viendo.
-no hay nadie, solo disfruta como yo lo haré – sentí sus manos agarrar fuertemente mi cintura y elevarme para luego dejarme caer en su miembro ya erecto.
Empecé a moverme sola en su entrepierna, se sentía jodidamente bien, Sebastian besaba mi cuello y sus manos jugaban con mis pechos.
Ya casi me estaba acercando a mi orgasmo, todos mis músculos abdominales se contraían
-S-S-S-Sebastian
-_-_____
Sentí un cálido liquido entrar y un sonoro gemido inundo el jardín.
Sebastian
Debo amar demasiado a esta chica para haber hecho lo que hice, aunque no me arrepiento, pero fue algo imprudente.
Al salir de los jardines, todas las personas nos veían de manera extraña, quizás era porque estábamos sudados y algo desaliñados.
-tengo sueño, joder – exclamó ______ restregándose los ojos.
-¿piensas que te dejaré dormir?
Sus ojos se abrieron como platos y un rubor se extendió en sus mejillas.
-i-idiota
Caminamos hasta el auto y subimos.
-me voy a dormir Sebastian - _____ se recostó en mis piernas
-sabía que lo querías sentir
-cállate imbécil, solo busco comodidad
-yo te creo
Escuché un bufido, para luego escuchar su respiración pausada. Su rostro es tan perfecto y angelical, es hermosa.
¿Cómo pude llegar al punto de enamorarme de la chica a la que tengo que matar?
No lo quiero hacer, y no pretendo hacerlo.
En el pasado no me hubiese dejado mortificar por una situación parecida.
Después de un trayecto largo o así lo sentí, entré a la casa con ______ en mis brazos, tiene el sueño pesado.
La coloqué suavemente en la cama, y bajé las escaleras para tomar un poco de agua.
-hola- la voz profunda de un hombre resonó en toda la habitación- s-sé que tuvimos una muy mala primera impresión, soy Marius Clark, soy el padre de ______
-el bastardo que la ha hecho sufrir tanto, no me ha hablado lo suficiente de usted pero con lo que vimos es Stuttgart es más que suficiente para ganarse mi odio
-sé que fuimos duros con ella
-se está quedando un poco corto
-lo sé, solo quiero decirte que ella, ella no es lo que parece
-¿a qué se refiere?, si pretende infundirme una mala impresión de su hija, permítame decirle que la conozco muchísimo más que usted
-no me malinterprete, no es nada malo, es más ella es la mejor hija del mundo, no supe valorarla y ahora me odia, es algo entendible. A lo que me refiero a que ella no es una humana
-¿podría explicarse? – parece como si el tiempo hubiese parado
-ella no es una humana, ella lo sabe, a los 15 ella debió escoger el lado demoniaco, pero por el odio que nos tenía, escogió ser humana, sin embargo, en su sangre sigue corriendo la sangre diabólica, pero no es inmortal, sé que es complicado pero es como es y debe ser.
-eres un bastardo Marius - la voz somnolienta de _____ cruzó la sala de estar donde estábamos hablando-ese era mi secreto y lo has arruinado o mejor dicho, la cagaste. Si Sebastian, soy un semi demonio, pero sin lo inmortal, no deseaba vivir como los monstros de mis padres por toda la maldita eternidad.
Su mirada fría apuñalaba a Marius de todas las maneras posibles.
Todavía no podía hacerme a la idea de que _____ fuese una semidemonios.
