Lo que siento

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Cuatro meses habían pasado.

Cuatro meses en los que miles de piezas volvieron a acomodarse en su vida de la forma que el viejo Jumin intentaba volver a la vida. Aun así, podía asegurar que era casi imposible volver a ser como eras antes cuando los traumas se volvían tan perjudiciales para uno mismo.

En cuatro meses Jumin logró comprender que los amigos fieles que tenía a su lado eran de mucha utilidad, no como para contarles todos sus planes o salir regularmente con ellos, pero si como para saber que contabas con ellos en lo que sea. Jeahee pudo haber renunciado, traicionado o incluso robado, mas fue su trabajadora mas fiel durante todo ese tiempo. Seven demostró ser un idiota metiche que cada cierto tiempo iba a su casa para despejar su mente cuando estaba solo ¿sería la culpa por los sentimientos de Saeran? Posiblemente, mas era agradable tener una distracción y poder pelear con quien sea, sobre todo cuando se juntaba con Yoosung y su cara llorosa.

Mc y V fueron la parte mas fundamental de su vida ¿Por qué? Por el simple hecho de que no tener padres presentes o "normales" no representaba mayor problema cuando ellos ocupaban ese cargo sin quejarse. Si tenía una crisis, Mc le daba su espacio, le abrazaba y acariciaba el cabello tal como un niño pequeño esperando a que se sintiera bien. Con V era más su relación antigua, aunque ahora se veían seguido. Ya no se veían solo una vez cada dos meses, sino que todas las semanas se juntaban a beber vino, hablar de la vida, fotografía o gatos.

Simplemente toda su vida se iba reconstruyendo rápidamente gracias a la ayuda de sus amigos y psicólogo (uno recomendado por Jihyun) quienes no lo dejaban tener pensamientos autodestructivos ¿irónico no? Jumin era el primero en pensar que la única forma de surgir era haciéndolo solo y convirtiéndose en una persona indestructible, pero desde que ella había perjudicado su mente y cuerpo no podía ser el mismo.

Es verdad, nunca podría ser el mismo de hace cuatro meses y medio.

Negando con la cabeza, Jumin dejó el papeleo en el escritorio y miró a su alrededor con cierto descontento. Ya habían pasado dos semanas también de que no traía a Carlos II para el beneficio de todos los trabajadores, mas para él todo se había vuelto aburrido. Rutinario.

Tragando con fuerza, sintió su celular vibrar y no dudó en ir a verlo para saber de quien se trataba. Por alguna razón ilógica su mente gritaba que Zen le había mandado un mensaje para ver si se juntaban hoy o no.

La realidad era que la RFA se volvía a activar con una nueva fiesta a beneficio.

Seven, Yoosung y Mc hablaban animadamente sobre lo que seria la fiesta mas grande para ayudar a los centros con niños abandonados. Cosa que realmente no podía llegarle a la mente debido que sus preocupaciones estaban en otro lado.

- Jumin si vas a conectarte al menos di algo, también eres parte de esta organización – escribió Mc seguido de un emoticón de ella haciendo un puchero

- Mc, solo estaba leyendo y no vi nada interesante que aportar – escribió Jumin desanimado – aun así, quiero que sepas que podemos subvencionar económicamente la fiesta sin problemas

- Señor Han, si tiene tiempo para hablar por el grupo, por favor termine de firmar los papeles – Jeahee se había conectado solo para decir eso y luego marcharse

- Estoy terminándolos. También me retiro

- Por cierto, Jumin ¿Cómo ha estado Zen? Últimamente viene muy poco – escribió Yoosung antes de que se desconectara

- Bien supongo. Deberías preguntarle a él y no a mi

- Es que siempre está ocupado – Seven envió seguido de su cara molesta – por eso te preguntamos a ti

yo no creo en el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora