|No quiero ser débil|

7K 534 103
                                    

Mis padres han muerto, perdí a mi bebé y la posibilidad de tener una familia. Ya no tengo nada.

La lluvia cae sobre mi, no me importa mojarme, tampoco me importa manchar mis pantalones de lodo.

Mis manos se aferran a la tierra de la tumba de mis padres, las flores blancas parecen frescas. Alguien ha venido recientemente.

Natasha me dijo lo que había pasado con mis padres y en dónde habían sido enterrados. Quería venir desde que sali del hospital pero se negaron de inmediato.

Tenía que recuperarme por algunos días, tuve que esperar una semana para poder venir a despedirme de mis padres.

- L-Lo siento tanto.... Yo, yo tenía que hacer más... Tenía que salvarlos...-

Mis manos se cierran forman un puño, mi piel se tomar blanca por la fuerza que ejerzo.

- Tenía que hacer más...-

Puedo sentir que alguien me toma de los hombros para hacer que me levanté. No sé quién es, solo me aferró a su pecho para continuar llorando.

- Tenemos que irnos linda.-

Es Clint quien habla, asiento con la cabeza, no puedo hablar, no puedo hacerlo. Me toma del brazo con fuerza para marcharnos del cementerio. Es como si temiera que fuera a caerme en cualquier momento.

En el auto está Natasha quien solo me dedica una sonrisa al verme. Le devuelvo el gesto de la misma forma antes de subir a la parte trasera.

El auto comienza avanzar después de unos minutos de trayecto me doy cuenta que no vamos de vuelta a la casa que Clint había adquirido.

-¿A dónde vamos?.-

- Iremos al aeropuerto, volveremos a New York.-

Natasha responde sin apartar  la vista de la carretera. Clint va a un lado de mi.

-No quiero volver.- le digo segura de mis palabras mientras mis pensamientos van perdidos por la ventana.

- Tenemos que volver, todos tenemos asuntos que resolver en New York.-

- Puedo quedarme, no tienen porqué quedarse.-

Clint toma mi mano, haciendo que mi atención se centre en él.

- No vamos a dejarte sola Boo, sabemos por lo que estás pasando. No te dejaremos sola.-

...

Nuestro regreso a New York era inevitable. He decidido volver al departamento que comparten Natasha y Clint.

Steve me ofreció mudarme con él. Consideré que no era correcto, lo mejor era volver al departamento de Natasha.

Tony por supuesto menciono que tendríamos que volver a nuestra casa.  Pero me negué, he intentado mantenerme alejada de él. Es lo mejor para ambos.

-¿Porque no volviste con Tony?.-

Natasha llama mi atención haciendo que mis pensamientos se pierdan en el aire haciendo que vuelva a la realidad.

- Es lo mejor para ambos.-

- pero ustedes aún se aman, ya no hay nada que los mantenga separados.-

- Si lo hay. Tony querrá formar una familia en algún momento yo, no puedo ofrecerle una familia.-

- Creo que si ambos lo hablan...-

- No, no quiero hablar con él, no quiero que él lo sepa.-

- Brooke por favor tienes que  reconsiderarlo.-

Nuestra conversación se ve interrumpida por el sonido del timbre, Natasha se levanta para ir atender.

Le sigo sin pensarlo mucho, la puerta se abre, el hombre de traje impecable aparece delante de nosotras.

- Hola Nat, ¿Puedo hablar con Brooke?.-

- Por supuesto.-

Natasha observa desconcertada, pero estoy casi segura de saber a que ha venido.

- Ya todo esta resuelto.-

Matt saca unos documentos del portafolio. Me los extiende para tomarlos, mi manos tiembla antes de poder tenerlos entre mis manos, tengo miedo de ver lo que hay dentro.

- Es...-

- Si, Tú y el señor Stark están formalmente divorciados.-

- Creí que Tony no había firmando el divorcio.-

- Lo hizo dos días después de nuestra reunión.

Puedo sentir que mi corazón se cae al suelo. El firmo, el término con lo poco que aún nos unía.

-¿Te encuentras bien?.-

- Si, es solo qué, me tomo por sopresa.-

-Creo que será mejor que me marche.-

Matt se despide de nosotras, Natasha lo despide en la puerta del apartamento. Yo no puedo hacer nadamás que observar el suelo del lugar.

-¿Estás bien?.-

Natasha llega hasta mi para colocarse frente al sofá.

- Creí que no lo había firmado.-

- Eso fue antes de todo lo que sucedió.-

-Eso clara mis dudas.-

-¿A qué te refieres?.-

- Tony solo volvió conmigo por lastima.-

- No, por supuesto que no. El volvió contigo porque te ama. Porque quiere estar junto a tí.-

- Pero yo no.- Le hablo firme, sin apartar la vista del suelo.

- ¿De que estás hablando Brooke?.-

-Tony y yo ya no podemos estar juntos. Ya ni siquiera tenemos algo que nos una. voy a ir de New York.-

- ¿Que? ¿A dónde?.-

- No lo sé, a cualquier lugar en donde puedan enseñarme a defenderme. A ser fuerte. Tal vez la K.G.B siga operaron.-

Natasha se alarma al escucharme hablar sobre aquel lugar.

- ¡Por supuesto que no! No irás a ningún lado y mucho menos a ese lugar. No sabes lo que ellos pueden hacerte.-

- Ya no podrán lastimarme. Ya no tengo a nadie.-

- ¿Y nosotros que? Steve, Clint, yo. Somos tu familia.-

Me levanto del sofá para caminar hacia la ventana del lugar.

- Ya no quiero ser débil. Ya no quiero depender de alguien, no quiero ser siempre la damicela en peligro. Ya no.-

- No eres la damicela en peligro.-.

- ¡Lo soy! El idiota de Iván me tomo como rehén, Loki casi me mata. Y-yo debí haber hecho más, si lo hubiera hecho,mi madre no estaría muerta.-

Siento que me derrumbó, mis piernas tiemblan. Me doy cuenta que he comenzado a llorar solo por el sabor saldo en mis labios.

- No tienes porqué alejarte de nosotros.-

- Tengo que hacerlo. Ya no quiero ser débil...-

- Está bien ser débil...-

Natasha se acerca a mi para darme un abrazo y hacer que vuelva a tomar asiento en el sofá.

- Ya no puedo... No puedo seguir así.-

- Si estás decidida, Solo hay una persona que puede ayudarnos.-

-¿Quien?.-

- Nick Fury.-








|I'm Yours| Tony Stark|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora