◈♢Sakura contra la ira de los dioses♢◈

Prólogo

Hijos míos, no lloren por mi. Sonrían y sean felices, pues ahora estoy en un lugar mejor.

.
.
.

La vida es muy extraña, tan extraña que un día lloras por no poder concebir y al otro sonríes por una bendición de los dioses.

Sakura nació, creció y murió con una sonrisa. Aún cuando la vida le tiraba cientos de obstáculos ella siempre tuvo esa sonrisa en sus labios, no había nada ni nadie que se la quitará.

Sus padres, dos civiles, la criaron tan bien como pudieron, jamás le faltó nada, tenía tres comida al día, una cama calientita y el amor eterno de sus padres. Pero verla irse como pétalos de cerezo en el viento fue una sensación indescriptible, nada se podía comparar con su dolor, el dolor de un padre al ver a su hijo morir. Ellos juraron a los dioses cuidarla y les fallaron.

...

Lo último que recordaba fueron las lágrimas de dos personas, una mujer rubia y un hombre de cabello rosa grisáceo. Después, nada. No sentía nada, solo flotaba en una sustancia viscosa verde, que por alguna razón se veía iluminada, aunque no encontraba la razón del porque. Su cabello ondeaba y cada vez se hacía más largo, sus ojos verde menta brillaban como dos diamantes y su cuerpo adquirió una forma más estilizada. Fue así hasta que estiró sus brazos y traspaso una barrera. No lo sabía, pero al romper aquel material que la mantenía presa, se sintió como la corteza de un árbol. Tosió para deshacerse de aquella sustancia viscosa verde, retiró un poco de esa cosa de su cara y por fin logró ver lo que había a su alrededor...

—Bjuu~ señorita? –delante de ella un viejecito le miraba con curiosidad–

—Que es eso?? Una humana?.. ¡¿Que hace una humana de cabello rosa en el Olimpo?!

—El árbol de Gea-sama!! Zeus debe de estar completamente enojado..

—Por que salió de ese árbol?

—Hay que hacer algo, Gea-sama no debe de tener tal falta de respeto..

—Valla que carece de belleza..

—Bu~ una humana! Esto se pondrá bueno~

—Esta asustada, ni siquiera ella sabe lo que está sucediendo, hay ser justos y arreglar este asunto..

—Al diablo con tu justicia Hércules!! Era el árbol de Gea-sama!!

Entre tanto barullo la pobre pelirrosa estaba tratando de calmarse, pues además de aquellos gritos y el sonido de plástico rasgado [ya que un dios estaba comiendo dulces]. Los insistentes gritos de agonía, llanto y desesperación que se escuchaban a la lejanía la traían aturdida, tanto que tapo sus oídos, aunque aquello no ayudo mucho...

—¡¡¡Cállense!!! –todos guardaron silencio– ..por.. favor..

El sonido de su cuerpo al golpear contra el suelo se escuchó por todo el lugar. Solo un dios, solo un dios sintió aquella perturbación en el mundo. Sus ojos castaños voltearon a ver por última vez a la chica, sonrió de lado y desapareció del lugar.

.
.
.

.
.
.

.
.

Que tal les pareció??
Quieren que le siga??